INTRODUCCIÓN
La producción de llamas y alpacas es una de las actividades económicas y productivas más importantes, que se desarrollan en ambientes de gran altura. Dando empleo alrededor de 500 mil unidades productivas en la región Andina de Perú y Bolivia, alcanzando una población de 3.6 millones de llamas y 3.5 millones de alpacas (1). Estas especies han logrado un equilibrio evolutivo para desarrollarse en ambientes con climas adversos a una gran altitud, con un descenso térmico de hasta - 25 °C y ausencia de oxígeno suficiente (2). Tanto las llamas como las alpacas, son capaces de seleccionar una dieta de alta calidad cuando esta sea disponible, además pueden sobrevivir con forrajes fibrosos de baja calidad en época seca (3,4).
Su alimentación principalmente se basa de pastizales naturales(5), escasos y pobres de las planicies altoandinas (6,7). Obteniendo de ello, carne de elevado valor nutricional (8), fibra de alto valor textil (9,10), además de pieles y cuero que son empleados como materia prima en la industria y artesanía (11). Esta actividad de producción animal contribuye al bienestar, manutención y desarrollo de las poblaciones altoandinas (4,12,13). Por tanto, es una oportunidad de desarrollo económico para las sociedades involucradas a fin de garantizar la seguridad alimentaria, haciendo frente al hambre y la desnutrición (14,15).
Sin embargo, la crianza de llamas y alpacas en la zona altoandina se realiza de forma extensiva al pastoreo (4), olvidando las demandas nutricionales que se reflejan en un nivel de producción relativamente bajo (16), en comparación a otros contextos y sistemas de producción animal (17,18). En los sistemas de pastoreo extensivo la cantidad y calidad nutritiva de biomasa disponible está influenciada por una marcada estacionalidad, con abundancia en época de lluvias (noviembre - abril) y escasez en la época seca (mayo - noviembre) con alto contenido de fibra, bajos niveles de proteína y digestibilidad, acompañado de una reducción en el consumo de alimento; que genera un desequilibrio en la ingestión de nutrientes que conlleva a una disminución de las tasas reproductivas y productivas (19,20), agravada por el problema de la sarcocistiosis macroscópica (Sarcocystis aucheniae) y microscópica (Sarcocystis masoni) (21), que devalúan la calidad de la carne, causando pérdidas económicas significativas (22). Todos estos factores afectan directamente la producción ganadera de camélidos en los andes de Perú y Bolivia.
En consecuencia, la nutrición cumple un rol muy importante en la producción de llamas y alpacas, siendo un punto crítico a la hora de realizar un adecuado manejo. Sin embargo, aún no existen suficientes investigaciones sobre las necesidades nutricionales de estas dos especies. Mientras tanto, estudios piloto realizados en condiciones de altura (4200 msnm), han mostrado la posibilidad de utilizar la técnica de sacrificio comparativo como herramienta para determinar los requerimientos energéticos en alpacas, a través de las mediciones de la energía disponible en el alimento y la retención de energía, en combinación con el balance energético (23,24). Esto permitirá mejorar los programas de alimentación en camélidos sudamericanos, con menor impacto ambiental (25). Considerando los aspectos mencionados anteriormente, el objetivo de este estudio fue determinar la ganancia de peso vivo y el rendimiento de carcasa de llamas y alpacas machos en crecimiento por el efecto nivel de oferta alimentaría, bajo condiciones de gran altitud, utilizando la técnica de sacrificio comparativo.
MATERIALES Y MÉTODOS
Se identifica brevemente la metodología empleada en el desarrollo del estudio, contexto o lugar y período (o momento) de realización del mismo, el universo y la muestra, además de explicar el método de muestreo, criterios de inclusión y exclusión de los objetos de estudio, detalles necesarios sobre los participantes o los objetos de estudio y las variables. Se diferencian explícitamente los resultados primarios y secundarios que se midieron, se exponen los procedimientos estadísticos utilizados y se detallan los equipos y materiales empleados en el desarrollo del estudio.
Lugar de estudio
El experimento se realizó en el Centro experimental (CE) La Raya de la Universidad Nacional del Altiplano, a una altitud de 4 200 m, ubicada entre las coordenadas 14° 30(33(( latitud Sur y 70°57(12(( longitud Oeste, ubicado en el distrito de Santa Rosa, Provincia de Melgar, departamento de Puno, entre los meses de abril - agosto del año 2016. A una temperatura promedio de 10.2°C, con una mínima de 2.1°C y una máxima de 18.4°C (rango de -10.7 a 17.8 °C), además de una precipitación pluvial de 525.7 mm, de clima frío y seco.
Los análisis químicos se realizaron en el Laboratorio de Nutrición y Alimentación Animal de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional del Altiplano de Puno.
Instalaciones
Las instalaciones estuvieron conformadas por 32 jaulas de alimentación de 1.2 m x 2.5 m (16 jaulas por especie), construidas de troncos de eucalipto, fijados con pernos metálicos, divididas con mallas metálicas y techo de calamina. Que fueron utilizados para el confinamiento de los animales durante la fase de alimentación. Además, se utilizó un galpón para el procesamiento y preparado de las dietas experimentales.
Dieta experimental
La dieta experimental fue elaborada con forrajes heno de avena (Avena sativa) y heno de alfalfa (Medicago sativa) 1:1, procesados mecánicamente con un molino/picador forrajero Trapp TRF - 700, a 12 mm de diámetro de la zaranda, siguiendo las recomendaciones de (26), con adición de algunas fuentes de minerales, formulado según las recomendaciones nutricionales para camélidos (Tabla 1), estimados por el método factorial (27,28).
Análisis químico del alimento laboratorio de nutrición animal; programa solver (24).
Animales
Se utilizó 16 llamas y 16 alpacas machos en crecientito de 2 años de edad, clínicamente sanos, procedentes de la población de llamas y alpacas al pastoreo del CE La Raya de la Universidad Nacional del Altiplano; los cuales se distribuyeron de forma aleatoria en cuatro grupos experimentales, con cuatro animales por especie, para ser alimentados con cuatro niveles de oferta alimentaria (94.2% materia seca, MS; EM:2219 kcal/kg MS), T1: mantenimiento, T2: intermedio bajo, T3: intermedio alto y T4: ad libitum (Tabla 2); correspondiente a 40, 50, 60 y 70 g MS/kg PV0.75 ,este patrón de oferta alimentaria fue para llamas y alpacas respectivamente, durante un periodo de 55 días.
Manejo experimental de los animales
Los animales fueron elegidos aleatoriamente y seleccionados por peso de una población de 500 animales en su mayoría alpacas y esa cantidad de llamas, ambas especies se alimentaban de la vegetación natural disponible en la cabaña Lloketa (5.200 m de altitud), las mismas que fueron trasladadas al centro de investigación La Raya (4,200 m de altitud), lugar donde permanecieron durante todo el experimento.
Cómo los animales proceden de un sistema pastoril extensivo, la fase de acostumbramiento al manejo en confinamiento fue gradual y sistemático, en tres etapas, a fin de minimizar los efectos de la neofobia (29), a fin de garantizar el bienestar animal, el éxito experimental y la validez de los resultados.
La primera semana permanecieron en un potrero de pastos naturales consumiendo la vegetación natural disponible; en la segunda y tercera semana se les fue alimentado gradualmente con heno entero de avena y agua para que aprendan a consumir forrajes. En los dos primeros días de la segunda semana se observó que las alpacas no mostraron interés por el forraje mientras que las llamas mostraron un comportamiento de aceptación desde el primer contacto con el heno de avena, al tercer día las alpacas empezaron a consumir ligeramente el heno de avena, en cambio las llamas ya consumen heno en su gran mayoría. A la tercera semana el consumo fue masivo en llamas y alpacas.
En la cuarta semana se les sub divido de forma alentaría en grupos de 10 animales por especie en un área más reducido (box de 20 x 4 metros), construidas con paneles metálicos, acondicionados con comederos y bebederos en recipientes de plástico con una capacidad de 30 L. Para ofrecerles el heno molido en relación al peso corporal que correspondió a 2 kg y 1 kg para llamas y alpacas respectivamente, a fin de que aprendan a consumir en comedero la mezcla forrajera molida. Al igual que, con el heno avena entero, los animales tardaron 2 días para volver a acostumbrarse a esta nueva presentación de alimento.
En la quinta semana el consumo fue a totalidad en ambas especies, hasta entonces pasaron 36 días de la fase de acostumbramiento, momento oportuno para dar inicio al experimento (Figura 1). La fase de alimentación inicio el día 37, por lo que se considerado como día 0 del experimento, con la asunción de que los camélidos colaboran de sobremanera en los trabajos experimentales cuando son debidamente acostumbrados al manejo en confinamiento (30).
A partir de la fase experimental se evaluaron los siguientes parámetros:
Peso vivo. Se midió utilizando una balanza digital electrónica digital con capacidad de 500 con precisión 0.1 Kg de la marca T-Scale equipada con plataforma metálica.
La ganancia de peso total se calculó mediante diferencia entre el peso inicial menos el peso final, mientras que la ganancia diaria de peso se calculó con el peso inicial menos el peso final de todo el periodo experimental dividido entre el tiempo de duración del experimento 55 días.
Rendimiento de carcasa. Expresado en porcentaje. Se determinó por la relación entre el peso de la carcasa y el peso vivo al sacrificio.
Los datos obtenidos fueron analizados por un Diseño Bloque Completo al Azar, con dos bloques (especies) y cuatro niveles de consumo (tratamientos), mediante el procedimiento GLM del programa estadístico SAS, según el siguiente modelo aditivo lineal fijo, a un nivel de significancia de ( = 0.05 (31).
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Ganancia de peso en llamas y alpacas
Las llamas iniciaron el experimento con un peso inicial de 100.7 ± 5.8, 140.1 ± 7.3, 108.2 ± 6.5 y 113.6 ± 6.8 kg de peso vivo para los tratamientos T1, T2, T3, T4, respectivamente. Paralelamente, las alpacas tuvieron un peso inicial de 52.2 ± 5.3, 53.9 ± 4.3, 57.3 ± 4.5, 59.5 ± 2.3 kg de peso vivo para los tratamientos T1, T2, T3, T4, respetivamente (Tabla 3).
Luego de un periodo de 55 días de alimentación a base de heno molido de avena y alfalfa (1:1), ofrecidos a diferentes niveles de consumo o niveles de restricción alimentaria, se logró encontrar diferencias en la variación de la ganancia de peso vivo por efecto nivel de consumo de alimento, tanto en llamas como alpacas. Dejando en evidencia qué la llama fue la especie qué logro alcanzar la mayor ganancia de peso vivo a diferencia de la alpaca (Tabla 3). Esta diferencia en la ganancia de peso (p<0.05), se puede asociar a la capacidad digestiva y mejores índices de conversión alimenticia de cada especie (32,33), además de las características productivas y zoometrías que difieren en cada especie, por tanto, las llamas son animales destinados a la producción de carne, fibra y piel principalmente (34,35), mientras que las alpacas están destinadas a la producción de fibra como actividad principal (36,37).
Estas diferencias encontradas se pudieron observar en los diferentes tratamientos, siendo los animales de los tratamientos ad libitum e intermedio alto (T4 y T3) los que lograron una mejor ganancia de peso, debido a la mayor disponibilidad de alimento consumido, mientras que los animales con un nivel de alimentación restringido intermedio bajo (T2) conservaron su peso con un ligero incremento. Sin embargo, algo opuesto se pudo observar en los animales con mayor restricción alimentaria, dieta de mantenimiento (T1) que presentaron pérdida de peso, lo que se traducen en un menor consumo de alimento y por lo tanto menor ganancia de peso (38-40), este patrón se repite tanto para llamas y alpacas respetivamente (Tabla 3). El comportamiento de este parámetro productivo (ganancia de peso) en llamas y alpacas se pudo reportar en experimentos similares donde los animales fueron alimentados con heno molido de avena y alfalfa (1:1) a diferentes tamaño de molido (23).
Al comparar la ganancia de peso por día (g/día) entre tratamientos, este fue mayor (p<0.05) en el tratamiento (T4) con 130 ± 48.8, disminuyendo en los tratamientos (T3, T2) con 121.8 ± 46.6, 29.1 ± 28.3, respectivamente, en cuanto al tratamiento (T1) presentó pérdida de peso teniendo ganancia negativa de -25.5 ± 34.7, mientras tanto las alpacas lograron una mejor ganancia de peso por día en el tratamientos (T4) con 47.7 ± 12.5, disminuyendo en los tratamientos (T3, T2) con 43.6 ± 10.3, 16.4 ± 12.8, respectivamente, en cuanto al tratamiento (T1) presentó pérdida de peso teniendo ganancia negativa de -14.5 ± 24.3, estas diferencias en la ganancia de peso diaria estarían relacionadas con el mayor aporte de nutrientes por parte del heno de alfalfa y la cantidad de alimento ofrecido en cada nivel de consumo alimenticio (28). Al respecto, (41), en un estudio con llamas al pastoreo utilizando Lolium perenne + Trifolium repens L y Phalaris arundinacea + Trifolium repens L reportaron ganancias de peso de 199 y 182 g/d, respectivamente, superiores a lo obtenido en el presente estudio, posiblemente debido al empleo de pastos cultivados como dieta única. No obstante, los pastos cultivados irrigados son económicamente beneficiosos si se usan como un suplemento para las praderas nativas y no como una base alimenticia por su mayor costo (42), así mismo (43) reportaron ganancias diaria de 105.6 g/d en llamas al pastoreo en pradera nativa entre los meses de setiembre y noviembre con 4.8% de PC y con predominancia de Festuca dolichophylla, Stipa ichu, Muhlenbergia spp, Bromus unioloides, Calamagrotis spp y Festuca orthophylla.
Durante la ejecución del experimento de alimentación se pudo registrar una variabilidad en la ganancia de peso por el efecto nivel de alimentación tanto en llamas y alpacas (Figura 2, 3), respectivamente. Esta práctica se realizó a fin de comprender el desempeño productivo de los animales a diferentes niveles de alimentación, simulando esenciaos de escasez y abundancia, tal y como sucede en un sistema extensivo para evaluar los parámetros productivos presentados en este trabajo de investigación.
a, b, c, d Letras diferentes en columnas indican diferencia significativa (p<0.05).
1 T1: Mantenimiento, T2: Intermedio bajo, T3: Intermedio alto y T4: Ad libitum; correspondiente a 40, 50, 60 y 70 g MS/kg PV0.75, respectivamente.
Rendimiento de carcasa en llamas y alpacas
En lo que respecta al rendimiento de carcasa (%). Las llamas y alpacas alimentados con heno molido de avena y alfalfa (1:1) no difirieron entre los tratamientos T1, T2, T3 y T4 (p>0.05), resultando en un valor promedio para el rendimiento de carcasa con 57.63 % y 53.43 % para llamas y alpacas (Tabla 4). Sin embargo, cuando se realiza la comparación entre especies existe diferencia en el rendimiento de carcasa (p<0.05), esta diferencia se puede atribuir a las características morfológicas y fisiológicas de cada una de las especies, como a tamaño corporal, capacidad digestiva, conversión alimentaria, entre otros (44). Además, los valores para rendimiento de carcasa encontrado por (45) con 57% en llamas, fueron similares a los obtenidos en el estudio; mientras que (46,47) reportaron 56.2%, estas variaciones entre trabajos podrían deberse a diferencias en edades y tipos de animales, condición corporal y época del año, calidad nutricional y disponibilidad del alimento (45,48).
CONCLUSIONES
El nivel de alimentación tiene efecto en el desempeño productivo (ganancia de peso) y rendimiento de carcasa en llamas y alpacas machos de dos años de edad alimentados en estabulación, Por tanto, se puede concluir qué los animales alimentados con una dieta balancean y ofertado a un nivel de consumo superior al mantenimiento (intermedio alto o ad libitum), pueden alcanzan mayor ganancia de peso frente a los animales que tiene mayor restricción alimentaria o de baja calidad como sucede con animales al pastoreo.
En consecuencia, es recomendable implementar un sistema de alimentación mixto en los hatos ganaderos, con suplementación alimenticia, elaborado con forrajes molidos propios de la zona, esta estrategia sin duda permitiría maximizar las cualidades productivas, reproductivas de cada especie en particular; considerando los resultados del estudio la llama es la especie que mayor inclinación tiene para la producción de carne.