SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.11 número17Emprendimientos femeninos indígenas y capital socialLas habilidades directivas una condición para una ejecución eficaz índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Revista Investigación y Negocios

versión impresa ISSN 2521-2737

Investigación y Negocios vol.11 no.17 Sucre abr. 2018

 

ARTÍCULOS

 

Apuntes sobre la Inversión Extranjera Directa
en América Latina

 

 

Ximena Roncal Vattuone
eximi@hormail.com
Economista, Investigadora Posdoctoral en Políticas Públicas de Educación Universitaria por el Consejo
Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT) y el Instituto Internacional de Integración del Convenio
Andrés Bello (IIICAB). Docente de posgrado del Centro de Investigación
Científica,
Académica y Posgrados (CICAP) Puebla - México

Recibido 14 de diciembre, 2017; Aceptado febrero 2, 2018

 

 


Resumen

El documento muestra de manera general el comportamiento de la IED en el mundo y de manera particular en América Latina en el 2016, se divide en cuatro apartados. En el primero, Sobre las oportunidades de la IED, se destacan desde la mirada de los principales organismos internacionales las oportunidades y bondades que ofrece la IED-como catalizadora del crecimiento económico; en el segundo apartado, Panorama Mundial, se distinguen los principales receptores de la IED en el sistema mundo y se da cuenta sobre las tendencias de los flujos de capital extranjero en la economía mundo y su correspondencia con el ciclo económico; en la siguiente sección, Panorama Regional, se presenta brevemente las principales características de la IED en países de América Latina, donde la caída de los precios internacionales de los recursos naturales afecta las inversiones en la región; por último, se presentan las Reflexiones Finales

Palabras Clave: Inversión Extranjera Directa, beneficios de la IED, América Latina, Empresas Transnacionales


Abstract

The document shows in a general way the behavior of FDI in the world and particularly in Latin America in 2016, it is divided into four sections. In the first, On the opportunities of the FDI, stand out from the glance of the main international organisms the opportunities and kindness that the FDI offers like catalyzer of the economic growth; in the second section, World Overview, the main recipients of FDI in the world system are distinguished and the trends of foreign capital flows in the world economy and their correspondence with the economic cycle are reported; The following section, Regional Overview, briefly presents the main characteristics of FDI in Latin American countries, where the fall in international prices of natural resources affects investments in the region; Finally, the Final Reflections are presented.

Keywords: Foreign Direct Investment, benefits of FDI, Latin America, Transnational Corporations


 

 

Introducción

La estrategia aplicada en América Latina desde los años ochenta se sistematizó en el documento titulado "What Washington Means by Policy Reform", en el que concurren decisiones políticas y económicas que han seguido los países latinoamericanos para superar sus contradicciones internas y reincorporarse al ciclo de acumulación de la ganancia. El Consenso de Washington surge como el resultado de las ideas predominantes de los grupos económicos influyentes: el gobierno norteamericano a través del Departamento del Tesoro, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, dando cuenta de los fundamentos globalizadores neoliberales y la estrategia tendiente a restablecer las condiciones para asegurar la reproducción del sistema mundial.

En este marco se redefine el papel de los estados nacionales y se reduce su participación en las actividades productivas, dando lugar a la libre circulación del capital trasnacional, al abandono de las políticas proteccionistas y a la apertura de los mercados nacionales. De esta forma además, se otorgan condiciones especiales, dando paso a la desregulación normativa y legislativa para favorecer las inversiones fundamentalmente de empresas extranjeras privadas, determinando la entrada de China al mercado mundial.

La inversión extranjera directa (IED) es considerada de manera oficial como un factor indispensable para el desarrollo, de ella se espera la modernización industrial, la importación de tecnología, la creación de empleos y con ello- su contribución al ahorro y al equilibrio de la balanza de pagos (Morales, 2010). Las grandes empresas transnacionales se constituyen en los sujetos dominantes del mercado mundial y los Estados asumen las funciones de subsidiarios de los proyectos y estrategias empresariales (Ornelas, 2017).

 

Resultados y discusión

• Sobre las oportunidades de la IED

Abordar el tema de la Inversión Extranjera Directa (IED) requiere necesariamente, hacer referencia a las aportaciones o colocación de capitales a largo plazo por parte de grandes empresas en algún país extranjero. Estas compañías se caracterizan porque poseen fortaleza financiera, son dueñas de importantes segmentos de mercado, se distinguen por ser generadoras de tecnología y propietarias de patentes y marcas.

La globalización y la apertura de los mercados le han otorgado un papel significativo a los flujos de inversión extranjera directa a escala global. Distintos organismos internacionales le atribuyen a los movimientos de capital, diversos aspectos conceptuales y ventajas que han orientado la economía mundo.

El Banco Mundial (BM) (1998) sostiene que la Inversión Extranjera Directa es una fuente importante de fondos para promover el crecimiento en los países en desarrollo, al dotarles de nuevas tecnologías. Para este organismo, la IED contribuye a las economías en desarrollo en tres niveles:

• Como motor del crecimiento de las exportaciones, del empleo y de la productividad

• Como fuente de capacidades tecnológicas y de innovación.

• Como elemento que fortalece la convergencia entre las distintas regiones y países (Villanueva, 2010).

A inicios del Siglo XXI, el Fondo Monetario Internacional (FMI) (2001) proponía que los países debían fortalecer sus políticas para favorecer la IED para el establecimiento de vínculos entre empresas nacionales y transnacionales. Entre las ventajas que le atribuyen se destaca:

• "La IED permite la transferencia de tecnología — sobre todo en forma de nuevas variedades de insumos de capital que no se logra con inversiones financieras ni con el comercio de bienes y servicios. También puede fomentar la competencia en el mercado nacional de insumos.

• "Los que reciben IED a menudo obtienen capacitación para sus empleados en el desempeño de las nuevas tareas, lo que contribuye al desarrollo del capital humano del país.

• "Las ganancias que produce la IED incrementan el ingreso obtenido de los impuestos a las sociedades en el país".

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) (2002), además de enfatizar sobre los beneficios económicos, señala que la IED es una importante fuente de capital tanto para las economías receptoras como para las inversoras. Esta afirmación la sustenta en que a través de ella se establecen vínculos estables y de larga duración entre las distintas economías y favorece, las condiciones sociales y ambientales de los países. La OCDE establece que para este tipo de transferencias es fundamental la existencia de un entorno político favorable, en tanto que:

"...puede servir como vehículo importante para el desarrollo de la empresa local, y ayudar también a mejorar la competitividad tanto de la economía que los recibe ("receptora") como de la que los invierte ("inversora"). En particular, la IED fomenta la transferencia de tecnología y de experiencia (o know-how) entre economías. También ofrece a la economía receptora una oportunidad para promocionar de forma más extensa sus productos en los mercados internacionales" (OCDE, 2002:45)

Por su parte, la United Nations Conference Trade and Development (UNCTAD) afirma que incentivar la inversión extranjera conlleva a la generación de empleo, la transferencia de tecnología y la promoción de las exportaciones. En esta misma línea de pensamiento se encuentra la Organización Mundial de Comercio (OMC), la cual hace hincapié en la necesidad de reformas a fondo de las políticas y prácticas de los países. Entre las bondades que determina a la IED destaca el incremento de la eficiencia en el empleo de los escasos recursos mundiales, el estímulo a la competencia, la innovación, el ahorro y la formación de capital, y por consiguiente la creación de empleo y el crecimiento económico.

Los organismos hasta aquí comentados atribuyen a la Inversión Extranjera Directa (IED) significativos efectos positivos como, su "capacidad" de financiamiento y producción de externalidades, por ejemplo, la transferencia de tecnología y de nuevos conocimientos en habilidades empresariales y de mercados que otorgan las empresas transnacionales.

En consecuencia, para que la IED sea la catalizadora del crecimiento y la competitividad de las economías, los Estados nacionales deben ofrecer, sobre todo a las grandes empresas extranjeras, incentivos y condiciones especiales en la legislación, así como medidas fiscales y de desregulación. Los flujos de inversión extranjera, sensibles a la situación macroeconómica de los países, señalan las concepciones teóricas.

• Panorama Mundial

El derrumbe de los precios del petróleo y de los commodities en general paralizó a las economías emergentes, provocando una desaceleración económica global. Andrés Serbin (2016) señala que el comportamiento de los precios de los productos básicos se reflejó en la evolución de los términos de intercambio en la región, siendo los países exportadores de hidrocarburos los que en todo el año 2015 mostrarían una mayor pérdida, seguidos por los exportadores de productos agroindustriales y productos mineros (CEPAL, 2015).

"Finalizado el auge de precios de las materias primas, se desaceleró el flujo hacia la extracción de recursos naturales y a partir de 2010 la participación de la IED en este sector disminuyó, cayendo al 13% del total en 2016. En cambio, el peso de las manufacturas y los servicios aumentó y llegó al 40% y el 47%, respectivamente" (CEPAL, 2017:13).

Según datos de CEPAL, el crecimiento de la economía mundial en el mismo año fue de 2,5%, cifra inferior a la registrada en 2014 (2,6%). Mientras que observa un deslucido 2016 con un producto interno bruto (PIB) global de sólo 2.4% (por debajo del 2014 y el 2015). Este retroceso debido fundamentalmente a la desaceleración económica de China e India y a la contracción del comercio internacional, el incremento de tasas de política monetaria en Estados Unidos y los elevados niveles de deuda, aunado a la caída de los precios y de las exportaciones de los productos primarios (CEPAL, 2017; BCB, 2017).

En el concierto internacional, el 2017 registró un moderado crecimiento de tres puntos porcentuales, llegando a 2.7%. En este año también se evidencia una leve recuperación de los precios de la materias primas en el mercado mundial, además de mayores niveles de estabilización en los Estados Unidos y de apoyo adicional de políticas macroeconómicas en Japón (ONU, 2017).

Respecto a la Inversión Extranjera Directa (IED), su comportamiento a nivel mundial ha sufrido una tendencia similar al ciclo económico de la economía mundo. Si bien en 2015 los flujos de IED tuvieron un fuerte crecimiento, alcanzando 36%, considerado el nivel más alto desde 2007 (CEPAL, 2016), en 2016 las entradas disminuyen en un 2% en un escenario complejo de frágil crecimiento de la economía y de importantes riesgos políticos en las distintas regiones del mundo (UNCTAD, 2017)1. Mientras que en 2017, tuvo una tendencia positiva hacia su recuperación en correspondencia al leve crecimiento económico, el repunte del comercio y al incremento moderado del precio del petróleo a pesar de la certidumbre política y geopolítica.

Este despunte del crecimiento fortalece, en general, a las empresas transnacionales, a sus beneficios empresariales; y en particular a las empresas de la industria petrolera, ya que desde la perspectiva del capital, la explotación transnacional de los recursos disponibles conduce a una modernización de las economías en desarrollo.

Una característica importante que se presenta en las actividades de los mercados mundiales es la concentración del componente tecnológico que origina niveles exacerbados de competitividad, así como la reestructuración empresarial hacia la innovación mediante la creación de empresas digitales que promueven una ruta de la inversión, en particular a mercados con contenidos y servicios digitales elevados: telecomunicaciones y la industria de programación de software. En este acelerado camino tecnológico, la localización nacional de la producción se constituye en otra de las mayores preocupaciones (OCDE, 2017; CEPAL, 2017b).-

En este marco, las economías desarrolladas se constituyen en las líderes en la recepción de IED, alcanzando un 59% del total mundial en relación al 37% alcanzado por las economías en desarrollo. En estos últimos años (Tabla 2), esta situación en las economías en desarrollo puede ser originada fundamentalmente por la caída de los precios de los minerales sobre todo en África y Asia.

"Los Estados Unidos, China y la India siguen siendo los principales destinos potenciales de la IED. Se mantiene la confianza en el desempeño económico de los países asiáticos en desarrollo y prevén un aumento de las inversiones en Asia Sudoriental; Indonesia, Tailandia, Filipinas, Vietnam y Singapur, en ese orden, mejoran su clasificación entre los países receptores más prometedores" (UNCTAD, 2017:32).

A pesar de la disminución de los flujos de capital (1%), Estados Unidos (20% del monto total) continúa siendo el mayor país inversor del mundo en 2016, China se ubica en segundo lugar después de ocupar el quinto puesto en el año anterior. El tercer lugar le corresponde a Japón; el cuarto, quintoy sexto puesto lo ocupan Hong Kong, Francia e Irlanda, respectivamente; seguidos por España (7), Alemania (8), Luxemburgo (9) y Suiza (10). Todos estos países representan las diez principales economías inversoras en el sistema mundo capitalista.

• Panorama Regional

El informe de la CEPAL de 2017 sobre la Inversión Extranjera en América Latina y el Caribe señala que las entradas de IED disminuyeron un 7,8% en 2016, porcentaje 16.9% inferior al alcanzado en el 2011. Entre las principales causas de esta contracción se encuentran la reducción de la actividad económica de la región, la caída de la inversión en recursos naturales: minería metálica, las incertidumbres macroeconómicas y políticas, y la contracción de los mercados internos.

Según el informe de CEPAL, la IED orientada a los recursos naturales ha tenido una tendencia decreciente desde el periodo- 2010-2015, pasando del 18% al 13% en el 2016, lo que refleja que en 2017 la inversión orientada a las industrias extractivas de la región fuera limitada. Esta reducción en la rentabilidad de las empresas transnacionales ha estado influida por la caída de los productos mineros y la repatriación de utilidades. "La rentabilidad media de la IED difiere según la especialización de los países. En 2016, en las economías donde la inversión se dirigió a la minería y los hidrocarburos, la disminución fue más acentuada; este es el caso de Bolivia (Estado Plurinacional de), Colombia, el Perú y, en menor medida, Chile" (CEPAL, 2017:49).

Esta situación puede asociarse también a la reorganización global del capitalismo que ha reorientado las inversiones, como señala Guerra-Borges (2001), caracterizada por:

• La concentración de la inversión extranjera directa en los países desarrollados

• Los países asiáticos en desarrollo están ocupando el lugar que anteriormente tenia América Latina.

• China se ha convertido en uno de los más importantes receptores de inversión extranjera directa.

En cuanto a la evolución de los flujos de IED por economía, el Informe de la CEPAL destaca que dos aspectos importantes en cuanto a la presencia de inversión extranjera en la región: a) Las economías más grandes son las que han recibido en 2016 mayores flujos de IED y b) El comportamiento heterogéneo de la IED entre los distintos países (Grafica 1).

En cuanto a inversión extranjera, Brasil se posiciona en primer lugar como país receptor en el 2016 con un 47% del total de la inversión, con un crecimiento de 5.7% entre 2015-2016 que lo consolida pese a la recesión que vive como el mercado de negocios más atractivo para las empresas transnacionales.

Las principales inversiones en Brasil provienen de los Países Bajos, Luxemburgo, Italia, Reino Unido y Estados Unidos. No obstante, en ese mismo año, China repunta su estatus de inversor en esta nación a través de dos adquisiciones transfronterizas2: a) China Molybdenum Co. Ltd., en negocios de niobio y fosfatos, ubicándose como segundo proveedor de fosfato en este país; b) A China Three Gorges Corporation, empresa a la que se le concesiona por 30 años las plantas hidroeléctricas de Jupiá e llha Solteira en 2015 y en 2016 adquiere plantas hidroeléctricas, expandiendo de esta manera su mercado en territorio brasilero.

El segundo lugar lo ocupa el mercado mexicano con el 19% del total de la recepción de IED. De acuerdo con los datos de la CEPAL (2017), en 2016, el 61% correspondió al sector manufacturero. Para el sector automotriz los ingresos fueron del 19% seguido de la industria química y bebida y tabacos con 14% y 7% respectivamente.

En orden de importancia, las principales inversionistas continúan siendo las empresas norteamericanas a las que les corresponde el 39% del total del mercado mexicano y muy cerca la Unión Europea con el 31%. Canadá, Japón y Brasil tienen también una relativa importancia como países inversores en México. Un aspecto a destacar es la venta de activos por parte de la empresa petrolera Petrobras como estrategia de desinversión y de apertura a capitales extranjeros para la explotación de hidrocarburos. Con esta estrategia se distingue la empresa estatal de origen noruego Statoil (CEPAL, 2017).

En tercera posición se sitúa Colombia, con el 8% del total de inversión, mostrando un crecimiento de IED del 15,9% en 2016 orientado al sector energético y de servicios. Se destacaron las inversiones en electricidad, gas y agua (27%), así como los servicios financieros y empresariales (22%), y petróleo (19%)

"La privatización de la empresa de energía ISAGEN fue la mayor operación del sector energético en 2016. El fondo de inversión de origen canadiense Brookfield Asset Management compró el porcentaje accionario del Estado de Colombia (57,61%) (...) Con la adquisición de ISAGEN, el Canadá se posicionó entre los dos mayores inversionistas en 2016 y, con un 16% del total, igualó la participación de los Estados Unidos. La Unión Europea representó el 29% del total, destacándose las inversiones desde Alemania, España, Francia y el Reino Unido" (CEPAL, 2017:63).

Chile se encuentra en el cuarto lugar con el 7% de IED. En este país, la presencia de capitales provenientes de distintas regiones del mundo cobra importancia en 2016 en los de fusiones y adquisiciones transfronterizas: la empresa española Abertis, dedicada a la infraestructura de autopistas y telecomunicaciones, se le otorgan seis concesiones de la Autopista Central. La empresa de seguros norteamericana Prudential Financial, Inc., compra el 40% de la Administración de Fondo de Pensiones de este país. En el sector energético se destacó la inversión y contratos a 20 años de la empresa irlandesa Mainstream Renewable Power, para la producción de energía eólica. Rockwood Holdings Inc., subsidiaria del grupo estadounidense Albemarle Corporation, se expande a través de inversiones sus actividades de extracción de litio.

Los demás países suramericanos también se caracterizaron por la evolución del mercado de fusiones y adquisiciones transfronterizas, aunque en mucho de ellos, como Perú, en 2016 los flujos de IED decrecieron en un 17%, evidenciando la contracción y ausencia de proyectos en el sector minero de ese este país. Esta misma tendencia caracterizó a Ecuador, siendo la industria petrolera la principal receptora de flujos extranjeros. Sólo Colombia y Paraguay registraron un incremento con relación a 2015 (Grafica 1).

En lo que respecta al Estado Plurinacional de Bolivia, el Banco Central de Bolivia (BCB) destaca la seguridad jurídica para las inversiones en hidrocarburos y la estabilidad económica y crecimiento de 4.7% en este país:

• Inversión y desarrollo de actividades de exploración y explotación, así como estudios de áreas exploratorias en Vitiacua, La Ceiba y Madidi por parte de la empresa rusa GAZPROM.

• Participación de la estatal Rosatom en proyectos industriales del litio.

• Actividades exploratorias de la firma petrolera Shell, Maarten Wetselaar, en el bloque de Iñiguazu, Huacareta.

• Participación de la República de Corea del Sur en la industria petroquímica, así como en la construcción de plantas de propileno y polipropileno.

El tamaño de China, la rapidez de su crecimiento y su desempeño comercial se siente en la economía boliviana cuyas inversiones suman montos por encima de los 3.000 millones de dólares orientadas sobre todo al sector minero, la construcción de infraestructura y carreteras.

"China ha logrado incursionar en los sectores más importantes de la economía, se ha convertido en el principal acreedor bilateral y se prevé que se convierta en el principal financiador del Plan de Desarrollo del País a partir de la generación de deuda para las mayores inversiones públicas y proyectos de infraestructura en condiciones que abren las puertas a la presencia privilegiada de empresas chinas en Bolivia" (CEDLA, 2016:15)

La inversión de China en América Latina es de aproximadamente 110 mmdd y se destina al sector primario de las economías. Su presencia a través del comercio bilateral tiene mayor relevancia en Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Perú, Uruguay, México y Venezuela.

 

Conclusiones

La búsqueda de recursos estratégicos y el control de la energía global es sin duda uno de los fundamentos ocultos de la Inversión Extranjera Directa (IED). Las principales motivaciones de los flujos de capital transnacional ponen el punto de mira fundamentalmente a las actividades petroleras, minería, tierras agrícolas3, telecomunicaciones, manufacturas, así como a las tecnologías de la información y la comunicación.

El papel de las grandes empresas define la hegemonía económica del sistema mundo. El control de las fuentes de ganancias y la acumulación del capital responden a las prácticas monopólicas de mercado en las que se sustentan. El argumento dominante otorga legitimidad a las empresas transnacionales como la principal estrategia para avanzar hacia el desarrollo económico sin considerar las prácticas de poder que excluyen a la eficiencia como criterio ordenador de la economía capitalista, evidenciando que a través de sus empresas se priorizan los intereses particulares sobre los intereses colectivos. Está demostrado que las actividades de las empresas transnacionales han tenido consecuencias negativas para el medio ambiente (Órnelas, 2017).

La transferencia de conocimientos y tecnología -empresas extranjeras a las nacionales- poco incide en la acumulación de los países receptores por el contrario se utilizan como mecanismos de control en las economías en desarrollo. La fuga y repatriación de capitales es una de las principales virtudes de la IED, pues favorece el financiamiento de sus filiales ubicadas en distintas regiones geográficas del mundo vinculada a la lógica de la ganancia.

Las asimetrías entre los países que otorgan y los que reciben muestra la competencia desigual en las distintas relaciones que se establecen, al mismo tiempo que se genera dependencia del financiamiento externo, escasa tecnología así como especulación financiera sin transformar la producción. Este hecho muestra un desfase entre la teoría y la realidad que cuestiona las bondades de la IED, ya que se contribuye también a profundizar en el desarrollo desigual y dependiente.

La fe y el encanto que comparten las distintas para atraerla IED hacen perder de vista que son los grandes grupos económicos liderados por las empresas transnacionales quienes ejercen control sobre los grupos empresariales locales, definen las políticas económicas, políticas y sociales y en complicidad con ellos, comparten la plusvalía.

Esta enorme fea la Inversión Extranjera Directa debe acompañarse con la construcción de nuevas formas de relacionamiento entre los países donde se asuma la existencia de asimetrías en la economía mundo y se formulen estrategias para que la IED sirva de eslabonamiento productivo en torno a las actividades locales y se incida en una verdadera trasferencia tecnológica. Es decir crear condiciones objetivas que contribuyan a los desarrollos de los países por encima de los movimientos perversos del capital transnacional.

Hoy, se suma China a la geopolítica de disputa en la apropiación de los recursos naturales de los territorios de América Latina.

 

Notas

1 Salida del Reino Unido de la Unión Europea (brexit) y las elecciones presidenciales de los Estados Unidos

2 De acuerdo con Celso Garrido (2001:11-12), "...las fusiones y adquisiciones (FyA) son operaciones mediante las que se realiza la compra venta de derechos de propiedad y control sobre empresas. Con ello se forman mercados de empresas, concretados en mercados accionarios públicos o en transacciones de carácter privado (...) En el caso de las inversiones realizadas a nivel internacional como FyA transfronterizas (FyATs), éstas son una modalidad de IED (...) las FyATs no significan en lo inmediato nuevas inversiones sino cambio de propietario entre empresas ubicadas en distintos países".

3 China concentra una quinta parte de la población del mundo, pero solo cuenta con el 10% de tierras arables en el mundo, situación que revierte a través de la intensificación de la compra de tierras en las diferentes partes del mundo. En lo que respecta a América Latina, Argentina, Chile y Brasil son los principales países elegidos para la compra de tierras agrícolas por parte del país asiático.

(Footnotes)

1 Geopark es una firma independiente dedicada a la exploración y producción de petróleo y gas con importante presencia en Latinoamérica, entre los países donde opera se encuentran Argentina, Brasil, Colombia y Perú. Su producción asciende un promedio aproximado de 20000 barriles por día de petróleo y gas. Tiene alianzas con la firma coreana LG con la finalidad de desarrollar una cartera de activos de exploración en Latinoamérica.

 

Referencias

• Banco Mundial (1998) Inversión Extranjera Directa. Corporación Financiera Internacional, BM, Washington, D.C.        [ Links ]

• Caputo, O. (2007) América Latina: la invasión de las transnacionales productivas y financieras. Centro de Estudios Latinoamericanos Justo Arosemena: Panamá.        [ Links ]

• Banco Central de Bolivia (2017) Reporte de Capital Privado Extranjero en Bolivia 2016.BCB: Bolivia.        [ Links ]

• CEDLA (2017) La presencia China en Bolivia: ¿Por qué el interés en una de las economías más pequeñas de la región? En Cuadernos de Coyuntura. Año VII (15).        [ Links ]

• CEPAL (2017) La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe        [ Links ]

• (2017b) Estudio Económico de América Latina y el Caribe. La dinámica del ciclo económico actual y los desafíos de política para dinamizar la inversión y el crecimiento. CEP AL: Argentina.

• (2016) Estudio Económico de América Latina y el Caribe. La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los desafíos del financiamiento para el desarrollo. CEPAL: Argentina.

• Guerra-Borges, A. (2001) Factores determinantes de la inversión extranjera: introducción a una teoría inexistente. En Revista Comercio Exterior.        [ Links ]

• Morales, J. (2010) Inversión Extranjera Directa y Desarrollo en América Latina. En Revista Problemas del Desarrollo, 163 (41), octubre-diciembre 2010.        [ Links ]

• Navarro, F. y Oglietti, G. (2017) Análisis de la Inversión Extranjera Directa en América Latina 1990-2016. CELAG: Argentina.        [ Links ]

• OCDE (2008) Definición Marco de Inversión Extranjera Directa. Cuarta Edición. Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico        [ Links ]

• 2002) Inversiones Extranjeras Directas en Desarrollo: Un Máximo de Beneficios por un Costo Mínimo. OCDE

• Ornelas, R. (2017) Hacia una economía política de la competencia. La empresa transnacional. En Revista Problemas del Desarrollo, 189 (48), UNAM.        [ Links ]

• UNCTAD (2017) Informe sobre las Inversiones en el Mundo 2017. Conferencia de Las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo: Ginebra.        [ Links ]