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Revista CON-CIENCIA

versión impresa ISSN 2310-0265

Rev.Cs.Farm. y Bioq v.8 n.2 La Paz nov. 2020

 

ARTÍCULOS DE REVISIÓN CIENTÍFICA

 

La condición humana como un saber necesario para pensar complejo

 

The human condition as a necessary knowledge for complex thinking

 

 

González Velasco Juan Miguel
Centro de Seguimiento y Gestión de la Calidad. Facultad de Ciencias Farmacéuticas y Bioquímicas. Profesor e Investigador.
Universidad Mayor de San Andrés. La Paz, Bolivia
juanmgv@hotmail.com.
Fecha de recepción: 23 Septiembre 2020        Fecha de aceptación: 18 Octubre de 2020

 

 


Resumen

Introducción: La condición humana como un potenciador del pensamiento complejo

Objetivo: Identificar las características de la condición humana vinculada al paradigma emergente

Métodos: Revisión teórica de carácter exploratorio y descriptivo sobre la temática

Resultados: Se conceptualiza la condición humana y se realiza un barrido de autores

Conclusión: La condición humana en su sentido más amplia debe ser entendida como un saber innato y práctico, caracterizado y aplicado en toda disciplina de manera transdisciplinar, haciendo valer principalmente la comprensión de los niveles de realidad, el tercer incluido y la complejidad.

Palabras claves: Condición humana, pensamiento complejo, paradigma, descriptivo, transdisciplinar


Abstract

Introduction: The human condition as an enhancer of complex thought

Objective: Identify the characteristics of the human condition linked to the emerging paradigm

Methods: Theoretical review of an exploratory and descriptive nature on the subject

Results: The human condition is conceptualized and a sweep of authors is carried out

Conclusion: The human condition in its broadest sense must be understood as an innate and practical knowledge, characterized and applied in all disciplines in a transdisciplinary way, mainly asserting the understanding of the levels of reality, the third included and complexity.

Keywords: Human condition, complex thinking, paradigm, descriptive, transdisciplinary


 

 

1. La Condición humana desde la complejidad

La condición humana hace referencia a la razón de ser y esencia de lo que significa las palabras “ser humano”, muchas veces pese a ser esas palabras pero que carece de significado más que teórico práctico. Para hablar de condición humana es necesario trascender  de una visión homo sapiens, es decir el hombre que piensa a un hombre complejo, es decir homo complexus inmerso en su visión cognitiva, delirante, de labor, poética, prosaica y otras más que lo entreteje.  La condición humana en su sentido más amplia debe ser entendida como un saber innato y práctico, caracterizado y aplicado en toda disciplina de manera transdisciplinar, haciendo valer principalmente la comprensión de los niveles de realidad, el tercer incluido y la complejidad.

Nada de lo anteriormente dicho se podrá realizar sin la aplicación de un componente olvidado o poco aplicado por los seres humanos, es decir la conciencia, la Era de la Conciencia, misma que trasciende lo material hacia lo espiritual y más allá. Es posible emerger a todo momento que la condición humana permite trascender hacia una visión planetaria de la vida, ecologizante, sistémica tomando en consideración la razón de ser de los seres vivos, en esa visión que para algunos es alcanzable pero que en su sentido actual muy desgastante llamada libertad.

El concepto de condición humana pasa por un indeterminismo, que no es sinónimo de esencial o naturaleza y que incorpora una manera o estructura  en la que se desenvuelve la vida humana (Sartre 1998,15),  misma que no podemos entender a plenitud sino incorporamos al pensamiento complejo como una manera práctica del quehacer humano (Morín 2010, 35).

La condición humana es más que un mero concepto de identificación terrenal o que busca identificar funciones que cumplir en el mundo. Una de las preguntas claves que de ello resulta y que escapa a una visión de simple evolución biológica o genética es ¿Qué hago aquí? ¿Por qué estoy aquí?, ¿Qué influencia tengo entre mi ser y la naturaleza? Y  Lo cierto es que ante tales interrogantes la palabra maestra que se incorpora es “Ecología”, por lo que ya no solo hablamos de espiritualidad sino trascendemos y ahora incorporamos ecoespiritualidad o en educación se habla de Ecoformación. Con lo anterior nos obliga a pensar no en una sola visión cognitiva de la condición humana, es decir de conocimientos de la condición humana, sino incorporarla como saber, en su más profunda significación ancestral empírica o científica.

Hablar de condición humana ubicar nuestro ser en el planeta y en el universo, creer en nuestro ser común y nuestra diversidad humana, y más profundamente en lo que nos identifica y nos une como humanos, en que condición, es decir bajo qué circunstancias nacemos, crecemos, nos reproducimos y dejamos este mundo no solo en lo biológico sino nuestra trascendencia espiritual.

Pero, como incorporar en esta reflexión lo que significa condición humana sino es a partir de los operadores cognitivos de la complejidad, es decir entretejiendo la dialogicidad, la visión de bucles, la auto-eco-organización e inclusive elementos tales como emergencia, tercer incluido, lo que quedo en el medio. Ya que si no lo hacemos estaríamos cayendo en un concepto muy objetivo, materialista y único, es decir como el entender el concepto de célula solo como la unidad fundamental de los seres vivos.

En la miseria del reduccionismo el concepto de condición humana nos ha llevado a comprenderla como un elemento más del concepto biológico de ente material, bajo una visión de ciclo abierto o cerrado, preciso de condiciones materiales y que lo limita a un ser arrojado en el mundo, que trabaja, viven en medio de los demás y muere, es decir una condición humana finita y que para muchos fue conocida, vivida y para otros fue como el pasar de una sombra en el suelo, vista por algunos no percibida por otros.

La condición humana vista desde la complejidad es trascendente, emergente, religante, no entendida bajo una lógica clásica aristotélica, sino más bien no clásica buscando lo que quedo en el medio, o lo que esta como tercer incluido, es autopoyética, reflexiva y que incorpora en su esencia un alto sentido de conciencia y ecoespiritualidad tanto en su sentido teórico como práctico.

 

2. La inmanencia en la Condición Humana

Partiremos tal y como menciona Morin,  “estos deben reconocerse en su humanidad común y al mismo tiempo reconocerse en su diversidad cultural” y me atrevo a señalar en su incertidumbre planetaria. Y que el reduccionismo ha hecho que la condición humana se vuelva un rompecabezas que a lo largo de la historia de la humanidad y de la ciencia no logra unir o permite ubicar  a la humanidad en el mundo y en el universo en su conjunto, creo que parte de ello se debe en pensar hacia una visión del todo hacia la parte sin “feed back”,  y es necesario integrar nuestra condición cósmica, física y terrenal a fin de lograr que nuestra visión de animalidad se entreteja a la de humanidad y permita hablar de condición humana.

Es esta visión de cambio o bucle es que subyace la condición humana y de manera afirmativa señalamos que la condición humana es invariante, es y seguirá siendo parte de la evolución y razón de ser del ser humano, es decir el Neanderthal fue un hombre con condición humana al igual que el Homo sapiens, y es esta la que permite unir el principio con el fin, hablar de individuo, especie, y sociedad. Por lo que el contexto del ser humano es fundamental para diferenciar los matices que la condición humana arroja en tiempo y espacios diversos.

Es posible hablar de inmanencia en la condición humana, ya Spinoza nos habla de este concepto cuando nos indica de ente intrínseco de un cuerpo; es inmanente toda actividad cuando en el  ser perdura la acción en su interior, cuando tiene su fin en ese mismo ser.  La condición humana es inmanente, nacemos con ella en lo individual y lo colectivo, por lo que es necesario hablar de una condición humana individual y otra como humanidad en sí.

Pero hasta donde esta visión individual y de humanidad de la condición humana el ser humano a distorsionado con el avance de la ciencia, la tecnología, el mismo proceso histórico que lo que entendemos por condición humana ya no es para otros.  Que ha buscado la ciencia hasta el momento tomar de la naturaleza lo que le sirve y de ahí buscar el dominio de la misma, hacia una lucha incansable de satisfacción de necesidades que alguna vez empezó como una actividad nómada y posterior se quedo como sedentaria, no veo diferencia entre la invención de la rueda y el desarrollo de un software de última generación, ambos buscan la satisfacción de necesidades, tampoco veo diferencia entre la condición humana en diferentes épocas, la diferencia está en cómo buscamos que la condición humana se refleje en nuestras vidas y en nuestra condición social, sin lugar a duda que son diferentes y es lo que en algunos los aspectos religiosos, económicos, políticos o otra actividad se atribuye la salvación de la condición humana, es por ello que en educación ha quedado tan relegada o poco aplicada, tal pareciera que a medida que avanza la ciencia se nos olvida la condición humana, esta es una afirmación muy importante si pensamos que el mundo en que vivimos es el mejor, el más tecnológico, el más científico, tal vez lo será pero también es el que menos considera una verdadera condición humana.

 

3. Transdisciplinariedad, Complejidad  y Condición Humana

Si partimos de que la condición humana tiene una característica inmanente, también desde la complejidad tiene otras muy importantes, una de ellas es la incorporación de la incertidumbre, de no acabado, inmersa en un océano de incertidumbres y un archipiélago de certezas (Morín 2000, 27) y para cual debemos estar atentos antes de que la condición humana se nos acabe de reducir o fragmentar, es un mundo muy concreto el que pongo pero a la vez muy abstracto e incierto, y es aquí donde los seres humanos debemos estar alertas antes de que cualquier variante nos lleve a una catástrofe humana y planetaria.

Otro componente importante es la “realidad” bajo que realidad estamos manejando a la condición humana y creo importante señalar que es un componente diferenciador y camuflador de pensar y aplicar la condición humana. La realidad es todo lo que resiste a nuestras observaciones, experiencias, etc. Siguiendo esto hay diversas realidades de condición humana que muchas veces en los seres humanos choca o es compatible entre ellos. La visión de contexto y las relaciones humanas son factores trascendentales en el alcance de condiciones humanas óptimas o aceptables (Nicolescu 2010, 27)

Si bien la incertidumbre es un factor a considerar, la realidad no se queda relegada, pero existe un tercer elemento muy importante que hace que el mundo macro y micro (Sotolongo 2006, 17) se entretejan, es decir podemos comprender la condición humana desde el mundo macro y creo que es el mundo dominante, comprender la condición humana desde el mundo micro también ha sido un reto y que va más allá de un mero valor energético o espiritual. Hay un mundo que me atrevo a indicar el más importante en tema de condición humana el mundo meso el de las complejidades, es el tercero incluido, el que entreteje el orden con el desorden y que permite trascender a los seres humanos y que muy pocos alcanzan a comprender en este mundo tan materializado y reduccionista (Vallejo 2009,7).

Bajo estas premisas surge la Transdisciplinariedad como la que incorpora estos elementos de complejidad, niveles de realidad y tercer incluido y que la condición humana recoge como sus elementos emergentes mas importantes para diferenciar y unir lo común con lo diverso. Comprender que el Homo sapiens quedo insuficiente y es preciso ir más allá hacia un homo complexus que permita entretejer saberes y conocimientos en esta Era de la Conciencia.

Uno de los procesos que el pensamiento complejo y en general la Complejidad a través del proceso metodológico de la transdisciplinaridad ha construido, y que en los últimos años es relevante para entender cómo se puede aplicar este paradigma emergente en la educación es aplicando el religaje, entendido este como unir y desunir el conocimiento en función de lo relacional o no relacional para deconstruir algo. Esta manera de pensar así, es a lo que llamo pensamiento religado como una herramienta práctica que permite que el pensamiento complejo y más aún el pensamiento sistémico operen en la cabeza de los educandos. Un sistema o subsistema en sus componentes, en su funcionalidad y recursividad, es poco entendible sino se religa su existir y su función.

Pensamiento religado es pues, una manera de correlacionar nuestra existencia y nuestro quehacer cotidiano y científico, es una herramienta que permite llegar a la transdisciplinaridad de una manera más fácil y práctica.

Es muy interesante ponerle nombre a las acciones, pero sin lugar a duda que día a día religamos nuestra vida, nuestras actitudes, hechos, conceptos, fenómenos y en general todo lo que hacemos en la vida, sin querer pasamos de un proceso comunicacional, a sentimientos encontrados y estos a su vez a cuestiones económicas que afectan nuestra conducta y a su vez nuestros hechos sociales. Generamos una metodología para hacerlo que nuestra razón y nuestro pensamiento hace que nuestra personalidad como seres humanos fluya en un religaje social.

Lo interesante también es que la misma historia de la ciencia hace que veamos como las disciplinas, los aportes científicos y más aún las profesiones se coadyuven en sus descubrimientos, y es irreal pensar que muchos descubrimientos por ejemplo no nacieron en su disciplina tal es el caso de las ciencias biológicas, de la física o las ciencias blandas. Pensar religado es pues una manera cotidiana de vivir, de hacer ciencia, construir, separar y deconstruir conceptos, ideas, pensamientos y más aun conocimientos.

Es así como el mundo, en su cotidianidad es religado, religión, ciencia, magia no se ven separadas, sino religadas, el conocimiento, el poder y la ideología se ven como componentes naturales de una realidad religada. Todo coexiste de un nivel de organización si, en su mundo natural y social y también se ven como unidos por puntos que jamás pensaríamos pudiera existir, en este sentido lo concreto y lo abstracto coexisten en su religaje. El ejemplo más claro lo tenemos en el mundo de la comunicación y la famosa era digital, una red social no es otra cosa que un religaje humano de ideas y sentires. En el entendimiento del origen etiológico de una enfermedad a veces la causa no está en lo biológico o físico sino en conductas o patrones sociales, es increíble cómo el mundo religa y religa su existencia. Por el momento, quisiera plasmar que el pensamiento religado existe en su manera natural como un elemento natural, una herramienta de la razón y de la complejidad, el reto es darle mayor forma, didáctica y dialogo.

 

4. La condición humana en la vida cotidiana

Uno de los momentos más significativos para el ser humano es su cotidianidad, como el quehacer cotidiano y donde confluyen infinidad de hechos, circunstancias, relaciones y vivencias de la condición humana, misma que fluctúa entre el mundo macro, micro y meso y hace que el ser humano refleje su energía, su materia y su espiritualidad. Es en su vida cotidiana donde su condición de ser humano debe demostrar su existir, su razón de ser en el mundo y en el universo, el elemento que lo distingue como único y como diverso, donde los bucles vinculados a la razón, al sentimiento, al pensamiento, a su creatividad, a su grandeza interior y exterior se entremezclan para hacer de los seres humanos complexus.

Sin lugar a duda que hablar de condición humana en su naturaleza más simple también involucra hablar de valores y de lo que significa el valor de la vida, de la búsqueda de la libertad, del respeto del otro y de sí mismo, de la búsqueda de la espiritualidad, de la vinculación del ser con su conciencia, y que en muchos casos parte de una visión individual a una conciencia social y mucho más amplia la conciencia planetaria.

Enseñar la condición humana es un saber muy necesario para atrapar lo que el reduccionismo ha ido dejando suelto y que junto a otros saberes permite la visión integral del ser humano. La condición humana en su expresión más amplia permite el acercamiento a la libertad del sujeto, esa libertad que muchas veces creemos alcanzarla pero que en la práctica estamos muy lejos de tenerla (From 1987, 12), esto permite reflexionar como el ser humano necesita de la aplicación de su conciencia para comprender más su condición humana, que lo posesione, le permita ubicarse en cuerpo, alma y espíritu de su estructura sistémica de condición humana (González 2006, 34)

Es prudente acercarse desde esa vida cotidiana, del entender complejo y transdisciplinar cual es el significado de condición humana, misma que se articula bajo varios elementos entretejidos, más allá de una simple significación de ser humano terrenal, es decir, como momentos entretejidos inciertos, emergentes, entretejidos que la cotidianidad, su unicidad y diversidad permite ubicarse planetariamente y ecológicamente relacionarse en su ser y con su medio ambiente.

También dentro de este acercamiento es necesario afirmar que para considerar una certera condición humana, en su sentido más amplio evolutivo debemos trascender de un homo sapiens, sapiens a un homo complexus, inmerso en sus bucles, entretejido, que pasa de su visión netamente racional hacia un demens, delirante, fabers, a prosaico y poético, es increíble que en esa diversidad y unicidad este la condición humana, que no puede ser vista desde un solo lente o mirada homo, sino que transita y es indeterminada (Anguera 2007, 13). No es posible pensar en una caja llena de conceptos sobre que es condición humana, ni tampoco preparar en la universidad sujetos con mucha información y con poca aplicación de lo que significa la condición humana, es más fácil pensar en una caja vacía donde el sujeto en esa condición humana elástica se adecue a su contexto, circunstancias, momentos y que en algún momento esta caja se llena y en otro se vacía o esta medio llena,  no es un proceso de completar la condición humana sino de completitud.

La destrucción del planeta por el ser humano es un hecho muy vinculado y lineal al proceso de satisfacción de necesidades, es decir para satisfacer sus necesidades algo tenemos que arrancar al planeta o dañar para ello, esto es muy triste en lo material, en la continuidad de los recursos naturales para la vida, mencionamos esto no como un lamento del ser humano sino como una reflexión de lo que hacemos y dejamos de hacer por nuestro planeta, sin tener en cuenta un alto sentido de conciencia de lo que como seres humanos hacemos en nuestro hogar y que muchas veces parte de esto que discutimos la condición humana, es un hacer y hacer sobre la condición humana que esta queda relegada a un segundo o tercer plano.

Enseñar la condición humana debe ser una necesidad y reflexión para toda institución educativa de cualquier nivel, contexto, raza, continente u otra consideración, es también claro que la condición humana no tiene una disciplina única de responsabilidad, por lo que no es propio ni de la Psicología o Sociología por ejemplo, sino de todas las disciplinas, vistas desde luego desde una visión transdisciplinar, donde cada una de ellas aporta a la comprensión de la condición humana.

También es necesario mencionar que la condición humana no solo se enseña en la escuela, sino en la vida misma que es donde de manera cotidiana se desenvuelve el ser humano, se relaciona, cumple su ciclo vital, se entreteje, se enriquece como sujeto, la condición humana es inmanente al ser humano, por lo que mucho hacen las relaciones humanas (Bourdieu y Passeron 2001, 23).

Finalmente, con estas reflexiones es casi nulo pensar en una condición humana bajo estas condiciones, en una visión reduccionista, disyuntiva, para ello la principal herramienta que permite tener latente y enriquecida nuestra condición humana es aplicar el pensamiento complejo, que une y desune el principio con el fin, vincula el orden con el desorden y hace ver inacabado lo terminado y esto es la condición humana.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Anguera, T. et.al. (2007). Transdisciplinariedad y Ecoformación: Una nueva mirada sobre la educación.         [ Links ]

Bourdieu, P. y Passeron, J.  (2001) La reproducción. Elementos para una Teoría del sistema de enseñanza. España.        [ Links ]

From, E. (1987). El Miedo a la Libertad. Barcelona España:Paidós..        [ Links ]

González, J. (2006). El proceso de Investigación en el aula-mente como generadora de nuevo conocimiento a partir de la teoría del yo-metacognitivo. En: Aprendizaje y Enseñanza en tiempos de transformación educativa. La Paz.         [ Links ]

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Nicolescu, B. (2002). Manifesto of Transdisciplinarity. Albany: State University of New York.         [ Links ]

Sartre, J. (1998).  El existencialismo es un humanismo Traducción Manuel Lamana Buenos Aires: Editorial Losada.         [ Links ]

Sotolongo, P. (2006). Teoría social y vida cotidiana: La sociedad como sistema dinámico complejo. Cuba.         [ Links ]

Vallejo, N. (2009). Morin, humanista planetario. Perú.        [ Links ]

 

 

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