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Revista de Investigacion Psicologica

Print version ISSN 2223-3032

Revista de Psicologia  no.5 La Paz  2009

 

ARTICULO ORIGINAL

 

El "objeto cultura" en psicología

 

 

Mg.Sc. Virna Rivero Herrera

 

 


RESUMEN

El "Objeto Cultura" en la psicología pretende resolver mediante el análisis y la reflexión un asunto teórico-metodológico en el momento en que la psicología intenta tomar mano del objeto de estudio de la antropología, la cultura, -como lo estamos entendiendo ahora. Sin embargo, por más estructuradas que estén ambas disciplinas teórica y metodológicamente en su objeto de estudio, en sus objetivos y enfoques, es necesario que se apoyen mutuamente. Ni la psicología ni la antropología procuran adoptar los contenidos de la otra como si se tratara de un vaciado teórico-metodológico, ni tampoco ninguna de las dos pretende adoptar el objeto -territorio- de estudio y de investigación. Ello se debe a que cada una es suficiente por sí misma para responder a las problemáticas sociales, cimentada en su historia epistemológica. De la misma manera, ambas tienen bien estructurados sus objetos de estudio. Pero aunque la Psicología puede autoabastecerse, requiere del objeto Cultura para dar cuerpo a su propio enfoque. Es decir, que requiere alimentarse y nutrirse de otras experiencias disciplinares, de reflexiones, así como de otros procedimientos y de cuerpos teóricos para investigar en su propio quehacer académico y social, para dar una acertada respuesta científica.

Esto nos ha llevado a reflexionar y analizar sobre el uso del objeto cultura en psicología, en otras palabras, se ha puesto de manifiesto la importancia de la aplicación de este instrumento teórico-metodológico - cultura- en la disciplina psicológica.

PALABRAS CLAVES

Objeto cultura, antropología, psicología, teórico-metodológico.


 

 

INTRODUCCIÓN

La cultura es un "objeto" teórico abordado desde la antropología como un tópico o un territorio en el que se concentran varios ejes temáticos o dimensiones sociales, como son los procesos económicos, políticos, jurídico-legales, históricos, geopolíticos y medioambientales. De ahí que su enfoque es holista, es decir, que ve la totalidad y no la particularidad de los acontecimientos sociales, y ello desde sus orígenes, a diferencia de la psicología que únicamente considera el holismo en algunos de sus abordajes teórico-metodológicos, y sólo en el ámbito de la necesidad de entender al individuo en referencia a su sociedad, y no al individuo en sociedad.

Además del holismo, el objeto cultura tiene como enfoques el eclecticismo, el histórico-diacrónico, el relativismo cultural y el etnocentrismo, que desde varias miradas políticas permiten tener una manera de abordaje, de elaboración de instrumentos de investigación, así como de interpretación de los resultados a través del análisis y de la interpretación, que pretenden dar a partir de una visión amplia de las problemáticas de la realidad social.

Entre los objetivos más importantes del uso del objeto cultura para la psicología, se encuentra el de ampliar la mirada de análisis, interpretación y respuesta a las problemáticas que se encuentran y generan en la realidad social.

Sabemos que el objeto de estudio de la psicología tiene los procesos psíquicos, entendidos como la vida psíquica que está compuesta de la inteligencia en todos sus tipos, la autovaloración en todos sus niveles, los procesos cognitivos en todos sus tipos, y la estructura iónica que es el núcleo de la personalidad, el aprendizaje y finalmente la motivación y las expectativas, que sólo son válidas en tanto se encuentren enmarcadas en un contexto sociocultural, a partir del cual respira la vida psíquica.

Hacer un recorrido teórico-metodológico de ambas disciplinas no sólo sirvió como resumen de la evolución de éstas, sino también para visualizar las transformaciones que han sufrido a lo largo del tiempo, y en el cual se explicita el objeto de estudio.

Este trabajo consta de siete capítulos: el primero es el aporte teórico-metodológico de la psicología, el segundo es el aporte teórico-metodológico de la antropología, el tercero se refiere a las fronteras disciplinarias entre psicología y antropología, el cuarto trata sobre el enfoque del objeto cultura, el quinto muestra los objetivos del objeto cultura en psicología, el sexto se refiere a la exposición del método utilizado en este ensayo, y finalmente en el capítulo séptimo se expone a una discusión de resultados de lo dicho a lo largo del texto.

Mediante el análisis efectuado, se ha logrado el objetivo, es decir, explicitar que el objeto cultura es un instrumento teórico-metodológico que ha tomado cuerpo y experiencia en el seno de la antropología, pero que se puede usar en otras disciplinas, en este caso en la psicología ¿Cómo? A través de la transversalización y el enclavaje de éste en la psicología, desde sus raíces, hasta lo que ahora se entiende como la ciencia psicológica. El objeto cultura no sólo es la base de la psicología en el ámbito social, sino también la sangre y la vida psíquica misma, que es donde se concentra la psicología.

 

EL APORTE TEÓRICO-METODOLÓGICO DE LA PSICOLOGÍA

La psicología es una de las grandes disciplinas de las ciencias sociales que se enmarca en la salud mental, y que de manera similar a la antropología surge como ciencia en el siglo XIX. Sin embargo, sus orígenes filosóficos se remontan a la época de los griegos.

La psicología surge como ciencia positiva a mediados del siglo XIX. Sus cimientos se encuentran en la psicofísica, la química, la fisiología, la biología y la teoría evolucionista biológica de Darwin.

Los sistemas teórico-metodológicos de la psicología a lo largo de su historia son: el estructuralismo, el funcionalismo, la psicología personalística, la Gestalt, la teoría de campo, el psicoanálisis, el conductismo, la psicología cognitiva, la psicología constructivista y desconstructivista, la psicología humanista y la psicología y la teoría de sistemas.

La psicología estructural tiene como padre a Wundt (1879). Según este autor, el objeto de la psicología es la estructura -que representa el contenido de las sensaciones y la conciencia- para estudiar este objeto utiliza el método introspectivo y experimental, y a partir de la investigación es posible llegar a conocer el contenido de cada mente humana, en este caso, la del adulto. Aunque más tarde Wundt se interesó por estudiar los contenidos de la mente de los niños, de los adultos considerados anormales y también la de los animales, estos recorridos investigativos no tuvieron mucho éxito. Otro de los representantes del estructuralismo es Titchener (1885), discípulo de Wundt. Este autor sigue las enseñanzas de su maestro, sólo que se opone al estudio de la psicología anormal de los animales y de los niños. Titchener estaba interesado en estudiar exclusivamente al adulto normal y sin diferencias individuales.

Los objetivos de la psicología estructuralista en sus inicios fueron: "describir los componentes de la conciencia en términos de sus elementos básicos, describir las combinaciones de estos tres elementos y explicar la relación con el sistema nervioso".3 Con estos objetivos, la psicología se fundó como ciencia moderna y experimental, y estos avances no se quedaron en Europa, sino migraron a los EE.UU. de Norteamérica.

El funcionalismo tiene como precursor a James (1890) en Norteamérica, y se puede decir de este autor dio origen a la psicología en los EE.UU. Los postulados filosóficos del funcionalismo se asientan en el pragmatismo que destaca los resultados antes que el método y los hechos. James toma esta idea para referirse a la problemática entre lo físico relacionado con lo mental, y dice a propósito que ambos se encuentran en el mismo nivel de la experiencia humana, sólo que en diferentes facetas. De ahí que el objeto de la psicología funcionalista es la vida mental. Más tarde la teoría funcionalista se especializó en las Universidades de Columbia y de Chicago en Estados Unidos de Norteamérica.

En la Universidad de Chicago, los principales representantes son Dewey, Angell y Carr (1870-1930), quienes plantean que la psicología debe tratar las operaciones mentales, en oposición a los elementos mentales de la psicología estructural. En un sentido más filosófico, Dewey (1884) relaciona las sensaciones con el alma, refiriendo que las primeras vistas como una totalidad son el resultado de la segunda. En 1894, Angell refiere que la psicología debe dedicarse a las actividades adaptativas del ser humano y a la interacción psicofísica entre mente y cuerpo. Por su parte, Carr (1905) define a la psicología como la ciencia de los procesos mentales que son adaptativos al medio. Si bien les interesa la relación estímulo-respuesta, la motivación desempeña un papel importante en su teoría para que se dé una respuesta.

La Universidad de Columbia promovió a psicólogos funcionalistas, como McKeen, Woodworth, Thorndike (1870-1930), a quienes les interesó ver ante todo las diferencias individuales, discriminaron las capacidades en los individuos, y para ello empezaron haciendo aplicaciones. Woodworth (1899) hizo referencia al término mecanicismo para explicar que los impulsos tienen un origen entre el mundo externo y el interno, y ellos suscitan mecanismos. Pero en este interrelacionamiento de mundos, el mundo a estudiarse debería ser el mundo interno y no el externo. Los métodos que utilizaron fueron la introspección y la extrospección, y enfatizaron el aprendizaje y la adaptación.

La psicología personalística tiene como uno de sus más importantes representantes a Spranger (1928), quien tiene un enfoque holista. Clasifico a seis tipos de personalidades que pretendía describir y comprender in extenso. Las tipologías de personalidad son: la personalidad teórica, económica, estética, social, política y religiosa. Según Spranger, el estudio de la tipología de la personalidad es el objeto de estudio de la psicología. Por su lado, Stern (1930) considera que el objeto de la psicología es la representación de los fenómenos mentales. Para Stern es importante describir el contenido de estas experiencias que se denomina fenómeno mental. Para entender lo mental, es necesario tomar en cuenta los aspectos biológicos, en este caso, los impulsos que representan un nivel superior conjuntamente con las necesidades. Los impulsos más importantes son: la auto-conservación, el autodesarrollo, los impulsos sociales y los impulsos humanos. Por su lado, Allport (1936-1955) como representante de esta escuela refiere que el objeto de la psicología es el aprendizaje por la experiencia. Define el impulso (presión) como "un impulso vital que conduce a la reducción de alguna tensión orgánica parcial”. Estas tensiones forman parte del funcionamiento del organismo.4 Para Allport (1946), la psicología se dedica al estudio de los rasgos de la personalidad, que son adquiridos de la conducta humana. Los rasgos son formas de adaptación que tiene su base en las neuronas, que predisponen al individuo a las percepciones selectivas de los estímulos del medio ambiente. La metodología que se utiliza en la teoría personalística es variada: va desde la introspección hasta la experimentación, pero fundamentalmente se estudia la personalidad mediante la observación.

La Gestalt (1912) es otra de las grandes teorías de la psicología que tiene como enfoque la totalidad (holismo). Sus tópicos son la percepción y la memoria, y para investigarlas utiliza el método introspectivo y experimental. Sus antecedentes teóricos se encuentran en el funcionalismo inglés, francés y alemán y en la escuela de Wurzburg. Los representantes de esta escuela son: Wertheimer, Koehler y Koffka. En 1907, Koehler señala que el objeto de estudio de la psicología es "el análisis de los elementos esenciales que existen en la organización. Los datos locales no aparecen como tales al observador. En otras palabras, los fenómenos percibidos realmente son las totalidades organizadas y no los elementos sensoriales".5 La posibilidad de percibir y organizar tiene una base física: el sistema nervioso, que interactúa con el ambiente. La experiencia que se adquiere se representa en esta base biológica, por lo que para la Gestalt existe en la mente y en la naturaleza. En la teoría gestáltica, surgió la idea del campo dinámico, cuya autoría se atribuye a Koffka (y Lewin lo tomó para hacer cuerpo a la teoría de campo). El campo se refiere a la experiencia psicológica del individuo que percibe y organiza su ambiente. Para que esto suceda, es necesario que se presenten las siguientes leyes: proximidad, semejanza, cierre, continuidad, familiaridad y estado. En este sentido, los gestálticos adoptaron la figura fondo, es decir, que "los elementos perceptivos están organizados como un todo al igual que la Gestalt, ellos forman la figura, los restantes elementos de la percepción constituyen el fondo".6

La teoría del campo está representada por Kurt Lewin (1930-1950), quien con su sapiencia y experiencia revolucionó la teoría y la metodología en psicología7, y se convirtió en el padre de la psicología social aplicada, la psicología social de los grupos y la investigación acción. Para ello, utilizó las matemáticas y como fondo teórico la Gestalt, teoría en la cual se inspiró. Lewin considera los procesos sociales, el espacio -vital- o el ambiente como escenario en el que se vinculan y se ejercen las relaciones sociales. Para Lewin, el campo psicológico "es una totalidad de hechos coexistentes y mutuamente interdependientes (...) que determinan la conducta".8 Este campo está compuesto por necesidades, sueños y deseos que deben ser satisfechos para que exista una adecuada y positiva circulación de la energía entre individuos. Para esta corriente, el objeto de estudio son las interrelaciones existentes en el campo, que se aplica fundamentalmente al área social de la psicología.

El psicoanálisis es una de las tres grandes fuerzas de la psicología. Sigmund Freud (1892) es sin duda alguna el padre del psicoanálisis. Se dedicó a estudiar el inconsciente, la neurosis y la psicosis utilizando el método clínico para analizar el comportamiento de la persona, así como la hipnosis y la catarsis para tratar los transtornos mentales. Su planteamiento teórico-metodológico es la dialéctica, por lo que sus postulados se encuentran en el entendimiento de la dinámica de los contrarios. Se dedicó a la clínica como base del entendimiento de la evolución de la personalidad, y se refirió a ella como un ámbito que sostiene tres estructuras: el ello, el yo y el superyó. "El ello es la estructura más primitiva y menos accesible para la sociedad, por lo que se tendrá que recurrir al método clínico para conocerla. El ello es la estructura compuesta únicamente por la líbido o energía psíquica de origen irracional y carácter sexual que se determina por instinto de los procesos inconscientes. El ello no está en contacto con el entorno, sino que se relaciona con las otras estructuras, que median entre los instintos del ello y del mundo exterior. Lejos de la realidad y las convenciones sociales, el ello se guía por el principio del placer y pretende gratificar sus necesidades libidinosas instintivas en forma ya sea directa, mediante las experiencias sexuales, o indirectas, en los sueños o las fantasías. El objeto exacto de la gratificación directa del principio del placer está determinado por la etapa psicosexual del desarrollo del individuo".9 El desarrollo de la personalidad pasa por cinco etapas: la fase oral (de los 0 a los 18 meses), la fase anal (de los 19 meses a los 3 años), la fase fálica (de los 3 a los 6 años), la fase latente (de los 7 a los 12 años) y, finalmente la fase genital (de los 12 a los 18 años). Para que la personalidad se transforme y evolucione sanamente, debe pasar por procesos dialécticos que conlleva cada una de estas etapas. Freud dejó un gran legado teórico no sólo a sus discípulos, sino también a los escenarios académicos y clínicos. Entre sus discípulos -algunos de los cuales se enfrentaron a varios de sus postulados- se encuentran Adler, Jung, Horney. Sullivany Fromm. Además de ellos, se encuentra Lacan, aunque no ha sido discípulo directo de Freud, y es considerado como uno de los más importantes psicoanalistas.

Según Adler (1937) sistema de Freud es muy rígido porque no plantea alternativas ante ciertas esferas psicológicas que la persona pueda tomar en cuanto a su sexualidad, específicamente los deseos y la envidia que podría sentir la mujer del pene del hombre. Además, Adler creó una psicología individual con una visión holista de la personalidad. A diferencia de Freud, Adler expresa que "la personalidad es una unidad del individuo (...) con perfección y metas bien establecidas".10 Jung (1900) plantea -al igual que Freud- que el propósito de la personalidad es alcanzar un balance entre fuerzas conscientes e inconscientes. Freud considera dos tipos de inconsciente: uno personal y otro colectivo. En el primero, se encuentran todos los complejos y en el segundo se incluyen los complejos de los otros miembros de la sociedad. Horney (1932) brindó un gran aporte a la psicología de la mujer al referir que "la actividad mental es producto de motivaciones inconscientes y aceptar la primacía de los impulsos emocionales. Destaca la cultura en cada psíquis individual. Más tarde, con base en todos los planteamientos psicoanalíticos que se dieron a nivel individual y social, Sullivan (1922) y Fromm destacan el psicoanálisis en la psicología social. El primero elaboró teorías sobre la socialización, y el papel de la autoestima en ello. A Fromm le interesó la psicología del hombre moderno, a quién le atribuyó soledad y desamparo.

Si bien se reconoce a Wundt como uno de los iniciadores de los principios conductistas Pavlov (1867) es considerado uno de los primeros conductistas. El propuso la perspectiva reflexológica en psicología conductista y se dedicó a estudiar el condicionamiento mediante el método experimental. Sus investigaciones se relacionan con las bases biológicas del sistema nervioso como generadoras de conducta. Pavlov demostró que se puede condicionar un estímulo neutro mediante el condicionamiento clásico. Con el método experimental, logró controlar exhaustivamente las variables, a través de las cuales puso en marcha sus investigaciones elaborando asociaciones entre variables y sus componentes.

El conductismo de Watson (1913) se basa en el pragmatismo del filósofo James, en el Ffncionalismo de Dewey y en el método experimental. Watson utilizó también la reflexología de Pavlov para darle cuerpo a su conductismo. Además, "el sistema de Watson estaba basado en el determinismo, el empirismo, el reduccionismo y el ambientalismo".11 El objeto de estudio de la psicología desde esta teoría es la adaptación del organismo al medio ambiente tomando en cuenta los aspectos hereditarios, y ello se relaciona con el paradigma estímulo-respuesta, es decir, que a partir de la generación de estímulo se puede llegar a conocer una determinada respuesta. Esta es una de las razones por las que se le atribuye a Watson un enfoque ambientalista por excelencia. Además de su excesivo reduccionismo recalcitrante, indicó que "la conducta en sí, posee la integridad para garantizar una ciencia distinta e independiente (...) la conducta se reduce a estímulos y respuestas periféricas, que se equipara a la física y a la fisiología".12

Más tarde, el conductismo se amplió en otros escenarios académicos, como en Norteamérica, con representantes como Guthrie, Hull, Tolman y Skinner (1890-1990). Sus investigaciones en psicología se basaron en los estudios neurofisiológicos. Al igual que Pavlov, Guthrie (1920) utilizó el asociacionismo para explicar la relación de contigüidad entre estímulos y respuestas. Además, expresaron que éstas se producen gracias a los refuerzos que puedan existir entre la extinción o la modificación de la conducta, con el fin de que el organismo aprenda. Más tarde, Hull (1929) explicó la formación de los hábitos, la acumulación de las experiencias que llevan a la adaptación del organismo al medio. El aprendizaje debe ser reforzado, y éste consiste en una reducción de los impulsos que suceden a los estados emocionales. Por su lado, Tolman (1932) se concentró en el estudio de los impulsos su perspectiva del conductismo es molar. Para este autor, el reduccionismo es la pérdida de lo puramente psicológico. El comportamiento molar es más que la suma de los elementos moleculares. Esta idea lo convierte en un conductista holista que ve la conducta como una totalidad.

Tal vez Tolman fue el primero que ocasionó la vinculación del conductismo con la psicología cognitiva, al expresar que el aprendizaje termina en la construcción de mapas cognitivos. Pero fue Skinner (1947) quien elaboró una teoría cognitiva en psicología y estudió el sistema operante. Al respecto, refirió que ".. con diversos esquemas de administración de refuerzos, se obtienen índices de respuesta característicos. Del mismo modo, incorporó procesos de condicionamiento, como la generalización y la discriminación, a un marco de contingencia del reforzamiento".13 A partir de métodos experimentales, incorporó modelos de procesos de información y matemáticos probabilísticos. Con estos nuevos modelos, se pasó del conductismo al neoconductismo, a tal punto que, por ejemplo, Estes (1950) ve el aprendizaje como un proceso estadístico que selecciona elementos del estímulo para predecir el comportamiento humano.

Más tarde, aparece la psicología cognitiva que se dedicó al estudio de los procesos de la información, a los procesos internos. A los cognitivistas les interesa la selección, el análisis, la organización, el almacenamiento y la recuperación de la información, el cómo se recuerda y las formas cómo se responde a los estímulos del entorno. Al igual que el conductismo, la psicología cognitiva se deriva de las posturas filosóficas del pragmatismo y la fenomenología.

La cognición mira el subjetivismo, destaca las estructuras y los procesos del sujeto cognoscente, y el individualismo que asigna primacía al pensamiento y los mecanismos racionales de las personas. Cada uno de los procesos cognitivos produce respuestas distintas porque el organismo que los procesa es distinto en cada persona. Según Neisser (1967), la psicología cognitiva se refiere a "...los procesos, mediante los cuales el input sensorial es transformado, reducido, elaborado, almacenado recuperado y usado".14 Es muy importante tomar en cuenta la observación y la experimentación para entender la forma de construcción de los procesos cognitivos. Sus métodos de estudio son prioritariamente la experimentación y la observación.

La psicología marxista, también llamada la otra Psicología, ha surgido gracias a los postulados filosóficos de Carlos Marx (1848). Según Marx, se debe entender a las sociedades tomando como principal eje a la lucha de clases a lo largo de la historia. El postulado de Marx es entender la sociedad a partir del conflicto y de la manera en que se producen los cambios sociales. Quienes han promovido este sistema teórico indican que el objeto de estudio de la psicología es el conflicto para entender los cambios individuales y sociales, desde la metodología dialéctica. Los principales psicólogos que ayudaron a desarrollar esta escuela de la psicología son Bartín Baró (1980), fundamentalmente en el área de la psicología social y Fernando González Rey (1970) en el área de la psicología educativa.

Basado en Leontiev, González señala que "...el significado en sí mismo, es un hecho de la conciencia social, que expresa la conciencia individual con idéntico contenido, y sólo una vez que el individuo se apropia de su significado puro, puede darle un sentido determinado".15 El ser humano es un ser reflexivo que mantiene una relación objetal con el mundo, donde el objeto se define independientemente de los aspectos subjetivos del sujeto. Esto quiere decir que el hombre va formando los contenidos de su motivación, que portan una carga emocional, que guían su psiquismo.

La psicología humanista es la tercera fuerza entre los sistemas de la psicología (la primera es el Psicoanálisis y la segunda el conductismo). Esta tercera fuerza proviene de la tradición de concebir la actividad mental como una especie de fenómenos. También es considerada como una psicología existencial porque está íntimamente ligada a las temáticas axiológicas, a la autorrealización y la motivación, entre otros. Los precursores de la psicología humanista son fundamentalmente filósofos existencialistas, como Kierkegaard (1813-1855), Dilthey (1833-1911), Jaspers (1883-1969) y Buber (1878-1965). Los postulados filosóficos se basan en la fenomenología, o sea, se tratan los fenómenos tal como los experimenta el individuo en su especificidad y concreción. El conocimiento a través de la fenomenología consiste en investigar los procesos de la intuición, la reflexión y la descripción de los fenómenos. Husserl (1876) y Heidegger (1909) también aportaron metodológicamente a este entendimiento, y fueron muy rigurosos en ello. Pero en el plano de lo empírico, decían que el objeto se reduce a sus constituyentes. Esto se podía entender como la asimilación de los valores, las actitudes y las experiencias concretas a partir de la subjetividad que terminaba integrando la experiencia humana de manera unificada. Según Heidegger, se debe estudiar al ser en el mundo, pues la gente vive en un estado de enajenación, incluso hasta llegar a caer en un estado psicótico.

La psicología fenomenológica postula que hay que entender al ser humano como ser en el mundo. Desde esta perspectiva, se deriva su objeto de estudio: el crecimiento y el desarrollo del ser humano en general. El ser se irradia a nivel social entre percepciones, valores y actitudes. Su principal representante es Merleau-Ponty (1944), que plantea como tarea para la psicología el hacer un seguimiento a la persona para conseguir que tenga claridad de su mundo interior. Merleau-Ponty sostiene que "...la persona no es una conciencia dotada de las características que la anatomía, la zoología, y la psicología empírica han propuesto, sino la fuente absoluta de la existencia. El individuo no adquiere existencia a partir de hechos físicos previos, sino que se mueve hacia el entorno y sostiene los hechos físicos al traerlos a su existencia. Entonces la Psicología es el estudio de la intencionalidad individual (...) cada intención es una atención, y no podemos atender algo a menos que lo experimentemos".16 Más tarde Allport (1907), Bühler (1925), Maslow (1930), May (1935) y Rogers (1940) desarrollaron importantes teorías psicológicas desde este enfoque, tales como: el desarrollo de la personalidad, el desarrollo de la moralidad durante el ciclo vital, la motivación humana, la teoría de la personalidad y la voluntad de ser, y el yo y los procesos de autorrealización. La psicología humanista es ante todo una aplicación clínica de una psicología del individuo, sin dejar de considerar la implicancia fisiológica e instintiva.

Finalmente, la psicología y la teoría de sistemas plantea que las partes y los componentes de un todo se encuentran en interacción; se tiene que entender la estructura y la organización. La psicología de los sistemas ha sido promovida por Bertalanffy (1922).17 Este autor considera que los sistemas abiertos constituyen "...una ecuación general de transporte. La suma algebraica del transporte y la producción es el flujo o tasa de flujo (...) este sistema pone de manifiesto fuerzas dirigidas contra cualquier perturbación de su estado estable. La autorregulación característica de los sistemas vivos es, por tanto, una de las propiedades de los sistemas abiertos".18 Para la psicología de los sistemas el objeto de estudio es la persona como parte de un sistema, de una familia, de una comunidad, y finalmente, de una sociedad. Por ejemplo, esta teoría ha sido aplicada a la familia, que es uno de los sistemas más importantes. Bowen (1978) considera a la familia como una Unidad Emocional, una red de relaciones entrelazadas dentro de un marco multigeneracional e histórico. Un sistema familiar significa que sus miembros están entrelazados en el pensamiento, en los sentimientos y el comportamiento. Una familia es un sistema natural social con reglas, estructura de poder, formas de comunicación predeterminadas, formas de negociación y resolución de problemas. En el sistema psicológico, se puede utilizar una múltiple variedad de métodos, tanto experimentales como no experimentales. Lo importante es considerar el sistema dirigido hacia un equilibrio en un constante flujo.

 

EL APORTE TEÓRICO-METODOLÓGICO DE LA ANTROPOLOGÍA

La antropología es y ha sido abordada desde varias teorías y capturada desde diferentes métodos. Para entender mejor estas miradas, hay que considerar una cronología y en algunos casos un paralelismo evolutivo de esta disciplina. Algunas de estas teorías son las siguientes: el evolucionismo, el materialismo dialéctico, el particularismo histórico, el difusionismo, la cultura y la personalidad, el funcionalismo, el estructuralismo, el materialismo cultural y la ecología cultural. Finalmente, la antropología cognoscitiva, la antropología posmoderna y la antropología de los sistemas.

El evolucionismo tiene como representantes más importantes a Tylor, Morgan y Spencer (1860-1890). Ellos han basado sus explicaciones teóricas en el evolucionismo biológico de Darwin, que llevó a que esta corriente tenga una continuidad teórica hacia el evolucionismo social. Los planteamientos teóricos sobre los que se cimenta el evolucionismo social son el "progreso" y la "predictibilidad", que no tienen fisura entre ellos y que tratan de mostrar el esquema de la historia humana. Los evolucionistas creían que todas las culturas pasan por los mismos estadios o escalones hasta llegar a ser civilizados, como entonces era considerada la civilización blanca-europea.

Morgan (1977) manifiesta en su libro Sociedad primitiv, que del salvajismo se pasa a la barbarie hasta llegar a la civilización. Los indicadores y referentes de esta evolución son: la transformación de la tecnología, la formación de la familia y el parentesco, y el desarrollo de la agricultura. En sus primeras fases, el evolucionismo se ocupó de estudiar el lenguaje, la escritura, la familia, el matrimonio, el fuego y los mitos. Todos estos estudios tenían como metodología la arqueología y la etnografía, además de tomar en cuenta las cronologías que habían realizado los viajeros. Los antropólogos de la época utilizaron el método comparativo para comprender las similitudes y las diferencias entre las culturas. "La teoría de que el desarrollo cultural siguió los mismos pasos en todas partes estuvo basada en la idea de la unidad psíquica de la humanidad",19 es decir, todos los grupos tienen las mismas capacidades mentales para poder desarrollarse. Para ello, es necesario seguir la unilinealidad y la referencia de la cultura occidental-europea, aunque las culturas sean independientes o se encuentren distanciadas geográficamente de esta última, puesto que las leyes universales superan cualquier factor de separación.

El materialismo dialéctico tiene una gran influencia en Marx (1818-1883). Sus posturas filosóficas se basan en la filosofía hegeliana y en la teoría de Morgan. Según Marx, su Ciencia es de la Historia, y ello significa que la humanidad para ser comprendida como tal debe entenderse en la historia, pero no como una simple referencia, sino desde sus contenidos más profundos. La ciencia social y la acción política son inseparables. Este planteamiento surge a partir de las grandes desigualdades sociales que Marx encontró en las condiciones de vida entre proletarios y burgueses, como consecuencia fundamentalmente del capitalismo. Marx plantea una especie de evolucionismo basado en la "propiedad", asociada a los modos de producción. Estos estadios se refieren a: la propiedad rival, propiedad comunal y estatal, propiedad feudal y, finalmente el capitalismo. Además señala que debe existir un tipo de economía política socialista y que la mejor sociedad esta basada en el comunismo. Marx estaba conciente que esto era una utopía. El defecto de Marx en este sentido -evolución de la sociedad- es que no explica el mundo primitivo, como si para él no existiera. Para Marx, el objeto de estudio de la antropología es "la evolución cultural (...) el análisis de las similitudes y de las diferencias culturales válida para todos los tipos culturales (...) donde se presentaba la necesaria selección cultural".20 Para todo ello, utiliza el método dialéctico que tiene el objetivo de analizar la tensión entre contrarios.

El particularismo histórico, escuela representada por Franz Boas (1896-1941) a inicios del s.XX en Norteamérica, es una de las teorías que ha tenido una importante repercusión en su época, sobre todo en el ámbito metodológico, porque ha sabido fundamentar la oposición a la unilinealidad del evolucionismo. Boas insistía en que no existe una única fórmula de desarrollo, sino que hay una variedad histórica entre las culturas. El objeto de la antropología tiene que ser "...el estudio de secuencias específicas en áreas bien definidas".21 Boas pretendía hacer de la antropología una verdadera ciencia mediante el empirismo y el trabajo de campo extenso en el tiempo. En el medio de su carrera, decidió abandonar el materialismo, al cual se había inscrito y abocado a la utilización de la geografía y la etnografía como métodos de investigación, para hacer una antropología científica. A ello incluyó la psicofísica y las técnicas estadísticas para manejar los datos de crecimiento y desarrollo imprescindibles de la arqueología. Quiso "la dependencia del conocimiento del área de la migración de los pueblos y de la configuración del país".22

El difusionismo es una teoría de la antropología representada por Lowie, Clark y Kroeber (1890-1940) y, de manera menos directa por Boas.23 Es una de las perspectivas teóricas que tiene como nudo de estudio la área geográfica. Para los difusionistas, a partir de una área geográfica se da origen al resto de las áreas geográficas donde actualmente se asientan poblaciones. La primera área geográfica donde se originó la humanidad se encuentra en Egipto, y desde allí se extienden otras 18 áreas. Se va siempre desde el centro hasta la periferia. Steward en 1955 refirió que: "el centro y los límites del área cambian con el paso del tiempo, que la cultura dentro del área puede cambiar de tal forma que se asemeja a otras culturas en diferentes áreas y en diferentes momentos y que las porciones de una misma área pueden contener culturas radicalmente diferentes pese a compartir muchos rasgos".24 El difusionismo trata de entender los procesos y los tiempos en los que las culturas se difunden, y éstas toman en cuenta los cambios de los significados culturales que han ocurrido, y en algunos casos que se repiten y se adaptan a los nuevos escenarios geográficos. Aquí se inicia la antropogeografía (Ratzel) como uno de los métodos más importantes de la antropología de la época. Se uso también el método comparativo y el método histórico cultural para conocer el grado de distribución contemporáneo de los rasgos culturales.

La cultura y la personalidad, es una de las teorías de la antropología que se basa en algunos de los postulados de Freud y en la antropología de Boas. Los estudios de Mead (1926-1928) sobre la adolescencia se enmarcan en esta teoría. Los antropólogos de esta escuela se dedicaron a estudiar la personalidad, entendida esta como "...un sistema integrado de comportamientos, aprendidos y no aprendidos, que es el sistema integrado de patrones que son característicos de los miembros de una sociedad".25 En esta perspectiva, se utilizan las categorías de la psicología, específicamente del psicoanálisis, sobre todo en su primera etapa para dar cuenta de los sentimientos que son los que permiten mantener el hilo de la etnografía en el trabajo de campo. Pero también se utilizaron técnicas estadísticas para entender los rasgos de la personalidad que se construyen como parte de una cultura. A partir de la personalidad, se pretendía generalizar el comportamiento cultural. Se relacionó también la personalidad con la ecología, pero esta última categoría no se desarrolló tanto como en la teoría de la ecología cultural.

El funcionalismo (1944) es la perspectiva teórica de la antropología que tiene como representante a Malinoswski, quien priorizó el trabajo de campo por periodos. Para el funcionalismo, el objeto de estudio de la antropología deben ser las necesidades humanas, básicas, derivadas e integrantes que se crean a partir de aspectos propiamente humanos, psicológicos, espirituales y culturales. La primera necesidad se refiere a la biológica. Satisfacerla permitirá la supervivencia de los seres humanos. La segunda consiste en la necesidad de coordinar socialmente la distribución de los alimentos para que llegue a todos, lo mismo sucede con la indumentaria y otros objetos necesarios para la población en cuestión. Finalmente, las necesidades integrantes que sirven para tener seguridad psicológica se refieren a la religión, los mitos, los ritos, la magia, etc., o todo aquello que comprende los procesos culturales y cosmovisivos que se encuentran en el ámbito afectivo-emocional y psicosocial. El funcionalismo en antropología utiliza la etnografía como método de investigación. Precisamente, fue Malinoswski quien se ocupó de difundir este método utilizando como principal técnica la observación participante.

Aunque los postulados teóricos de fue Durkheim (1944)26 dieron el inicio al funciono-estructuralismo en Francia, sus principales representantes en antropología son Radcliffe-Brown (1965) y Lévi-Strauss (1945). Los estudios de los estructuro-funcionalistas se abocaron fundamentalmente al parentesco. Con base en el concepto de solidaridad social, de las representaciones colectivas y el alma de la colectividad de Durkheim, los estructuro-funcionalistas refieren que el objeto de estudio de la antropología debe ser el sistema social y la estructura social de las sociedades complejas. En su lado más duro -en una primera etapa muy durkheimiana-27 en esta perspectiva no caben los aspectos psicológicos que requieren ser analizados como los más importantes, aunque Mauss (1954)28 reivindicó la relación entre fenómenos psicológicos y fenómenos sociológicos, de quien tomó referencia Levi-Strauss (1945). "...en el espíritu humano pueden existir estructuras internas profundas y ocultas".29 Por otro lado, Levi-Strauss tomó mano de la teoría de Mauss en el tema del Don para explicar que esta categoría se convertía en la base de comprensión de la vida social del individuo, ya que entender los ciclos de reciprocidad sirve para entender no sólo una actividad económica, sino una necesidad psicológica fundamental que encuentra su basamento en el espíritu humano. En este sentido, también el objeto de estudio del antropólogo debe ser la estructura mental elemental que tiene una dualidad mental universal entre el yo y los otros, porque la mente tiende a construir categorías lógicas y contrastes binarios. El método por excelencia fue la etnografía o la nueva etnografía que utiliza técnicas lingüísticas, una reorganización de los sentidos de Emic y Etic, considerando la perspectiva de los nativos (Emic) como un punto central, y que a éstos se les puedan formular sus propias reglas de códigos para que se puedan comunicar espontáneamente. El punto de vista de los investigadores (Etic) no deben ajustarse a las ideas de los actores, pues éstos quedan verificados cuando varios investigadores independientes están de acuerdo con lo visto, dado los acontecimientos ocurridos.

Desde un enfoque funcionalista-estructural, Radcliffe-Brown (1952) expresa que uno de los objetivos de la antropología es contemplar las relaciones funcionales en el contexto de la estructura social. Se entiende por estructura a la economía y su correspondiente orden social de los grupos, mediante el sistema de parentesco y de la política. Es este orden, es el parentesco el que permite mantener la estructura tal cual. "Las estructuras sociales son los patrones relativamente persistentes a través de los cuales los individuos se relacionan recíprocamente y con su ambiente. Las estructuras son inferidas de la interacción social y de las normas o reglas de conducta para las relaciones sociales".30 Lévi-Strauss inicia su antropología con sociedades primitivas y que muy bien pueden ser estudiadas para ser comparadas, pero también "para descubrir las reglas fundamentales que gobiernan las formas actuales que toman las sociedades. Subraya los principios generales que gobiernan la organización global de las sociedades, sin tener en cuenta las formas específicas que puedan adoptar".31 Los estructuro-funcionalistas franceses (Lévi-Strauss) eran más deductivistas-inductivistas, y los británicos (Radcliffe-Brown) inductivistas-deductivistas.

El materialismo cultural y la ecología cultural se encuentran dentro de una misma línea teórica planteada por White (1949) y Steward (1972), y tiene una conexión directa con la teoría evolucionista. "El desarrollo cultural procede mediante una creciente transformación eficiente de energía que a su vez lleva al crecimiento poblacional, al incremento en la población, al incremento de la productividad y a la especialización económica".32 Por otro lado, la cultura evoluciona según su adaptación al medio ambiente donde habita, y desarrolla una forma de tecnología y de organización social del trabajo, o todo aquello que se considera como el sistema sociocultural. Según Steward, la ecología cultural es una forma de materialismo cultural debido a que las variables tecnoecológicas y económicas y la lectura diacrónica en investigación son adecuadas para el análisis de la organización social y de la ideología que se convierten en variables dependientes.33 Para los antropólogos de la ecología cultural, el objeto de investigación de la antropología es el estudio de la adaptabilidad de los sistemas socioculturales al medio ambiente. Los ecologistas culturales entienden la evolución de la cultura de manera multilineal (y no unilineal como considera el evolucionismo clásico), o sea, que hay evoluciones paralelas en el mundo.

La antropología cognoscitiva comenzó con sus primeros planteamientos en la década de 1950 en Norteamérica, con el estudio de los rasgos y las categorías culturales desde el enfoque de los procesos de la información. Estos estudios tienen sus antecedentes en los particulares enfoques de Steward, Murdock, White y Boas, pero no en el procesamiento de la información, como lo ha venido haciendo hasta el momento la antropología cognitiva. En sus inicios, Pike (1950-1960) desde este enfoque se dedicaba por ejemplo, al estudio de la lingüística como miembro del Instituto Lingüístico de Verano. Para él el objeto de estudio de la antropología cognitiva es la cultura como un programa detallado de acción, o como una gramática o sistema de reglas. La cognición consiste fundamentalmente en un proceso que permite organizar la experiencia en estructuras cognitivas. Se trata de saber cómo se forman las conductas y cómo se manifiestan esas conductas teniendo como referencia la cultura.

La antropología cognitiva se desarrolla entre 1975 y 1990 y sus representantes son: Rerlin, Kay, Rosh. Mervis, Mayer, Filmore, Coleman, Lakoff, Johnson, Leech, Vega, Quinn, Sanday, Cohen, Geoghegan, Colby, quienes hablan de una gramática cognitiva que "concibe el lenguaje como depósito y reflejo de un conocimiento enciclopédico y una semántica de prototipos, que ha logrado trascender las dificultades lógicas y metodológicas de la antigua semántica estructural".34 El concepto de semántica es muy importante en la antropología cognitiva, ya que significa la relación entre los esquemas psicológicos y los elementos del entorno. Estos últimos son referentes. Parte de estos elementos son los prototipos y los estereotipos. La antropología cognitiva también es una ciencia de los significados y de los significantes35 y la construcción de prototipos. "Elpropósito es estudiar una gramática cultural y su modelación de los sistemas que los forman, pero no predecir la elección real de una pauta o secuencia de pautas. Las gramáticas ponen al desnudo las pautas globales, mientras que las heurísticas, operando en un nivel más bajo, no lo hacen necesariamente".36 La metodología adoptada por este sistema teórico también es la etnografía, la observación participante, las entrevistas en profundidad que consideran el proceso de elaboración de los contenidos cognitivos relacionados con la cultura.

Muy afín a la antropología cognitiva es la antropología posmoderna, que tiene su cuna también en Norteamérica, y sus principales representantes son Clifford Geertz y Geert Clifford (1970-1990). Para Geertz, el objeto de la antropología posmoderna es la cultura entendida como un conjunto de signos y significados. Según este autor, el antropólogo debe ir a los sitios y volver con la información sobre la gente que vive allí y poner en conocimiento a la comunidad profesional de un modo práctico, y no quedarse en una biblioteca divagando intelectualmente. Se trata de que el antropólogo haga una narrativa de la información obtenida en trabajo de campo evitando las ideologizaciones pretensiosas, los informes y los textos ficticios. La antropología posmoderna le realza la metodología de trabajo de campo. A partir de la información obtenida, el investigador empieza a construir la cajita de herramientas, es decir, un conjunto de observaciones teórico-conceptuales que son extraídas directamente de la realidad social. La antropología posmoderna es también llamada la antropología interpretativa o antropología simbólica. La antropología posmoderna está basada en el paradigma actual de la época, de la sociedad postindustrial que se encuentra en cada una de las células de la sociedad global, donde hay grandes cambios históricos: la época de la tecnología de la información. Bell dice (1962) que se ha pasado de una sociedad de economía productora de mercado a una economía productora de servicios, de una época en la que se distribuían los servicios a la preeminencia de las clases profesionales y técnicas; de la centralidad del desarrollo teórico como fuente de innovación a la formulación política de la sociedad; de la orientación futura al control de la tecnología y de las contribuciones tecnológicas, y finalmente de una época de la toma de decisiones a la creación de una nueva tecnología intelectual. 37 Por lo tanto, la antropología posmoderna tiene sus cimientos en el contexto de la época y sus antecedentes metodológicos en el postestructuralismo -construcción de la historia posmoderna. Para Derrida (1955), la categoría de deconstrucción es muy importante y consiste " en una oposición militante a los grandes sistemas de pensamiento consagrados en Occidente, a la metafísica, a la ciencia, y sobre todo a la razón",38 que a la vez resulta ser el método.

La antropología y la teoría de sistemas, se originan en la década de 1940 y se difunden y aplican a las ciencias sociales (sociología, antropología y psicología) en la década de 1950. La antropología de los sistemas se basa en las posturas teóricas de la cibernética de Wiener (1947), en la teoría de sistemas de Bertalanffy (1950-1970), en la teoría de las estructuras disipativas de Adams (1983) y en la sinergética de Haken (1979). En este mismo nivel, Valera y Maturana (1974) ayudaron a consolidar la teoría de sistemas desde la comprensión de la red de relaciones de neuronas. Realzó el sistema interno (cerrado) y para ello utilizó el concepto autopoiesis. "Un sistema autopoiético es una red de procesos de producción de componentes (transformación y destrucción) que genera la propia red de sucesos y relaciones y que constituye a la entidad como una unidad concreta, especificando el dominio topológico de su realización como tal".39

Entre los representantes más directos de la teoría de sistemas llevada a la antropología, se encuentra Buckley (1978), Miller (1978) y Maruyama (1980). Este último es el más importante y hace referencia a los paisajes mentales de la persona. Entre las principales comprensiones de la vida social que se deriva de la teoría de los sistemas, se encuentra el hecho de considerar las relaciones sociales como modelos causales recíprocos, independientes, homeostáticos y morfogenéticos. Para Maruyama, el centro de la teoría de sistemas trata de realzar la categoría denominada mindscapes, que refiere a una "...una estructura de razonamiento, cognición, percepción, conceptualización, diseño, planteamiento y toma de decisiones que puede variar de uno a otro individuo, profesión o cultura o grupo social. Naturalmente, no existen grupos puros, y siempre hay alguna medida de mezcla".40 Por otro lado, para Maturana "las diferencias culturales no representan diferentes modos de tratar la misma realidad objetiva, sino dominios cognitivos legítimamente distintos. Hombres culturalmente diferentes viven en diferentes realidades cognitivas recursivamente especificadas a través de su vida en ellas".41

Las teorías sistémicas quieren ver la globalidad y el holismo de la vida cultural no sólo en sus orígenes teóricos, sino fundamentalmente en su desarrollo y aplicación. La metodología adoptada por la antropología sistémica es diversa. Se realiza el análisis de los sistemas tomando previamente técnicas como la entrevista y la observación para obtener información de la realidad social y cultural.

 

LAS FRONTERAS DISCIPLINARIAS ENTRE ANTROPOLOGÍA Y PSICOLOGÍA

La ciencia es un conjunto de sistemas teórico-metodológicos que persiguen objetivos determinados y que tienen enfoques según sea el área disciplinar y el objeto de estudio al que responde. Los sistemas teórico-metodológicos son estructuras de conocimiento legítimos, válidos, falibles y relativamente estables en el tiempo, que tienen sus propios procedimientos y caminos que les lleva a nutrir sus planteamientos teóricos y también metodológicos; de la misma manera que les permite definir y reafirmar sus enfoques según sea su experiencia investigativa.

A nivel teórico-metodológico, la antropología como la psicología tienen sus cimientos en la filosofía de la época de los griegos, cuando se contemplaba la naturaleza y se reflexionaba sobre ella. En ese entonces, se trataba de entender y explicar la relación alma-cuerpo, y las razones para que se den determinados comportamientos humanos. A los filósofos de esa época les interesaba resolver los problemas de la naturaleza humana y su expresión en el ámbito social. También estaban concentrados en las relaciones sociales dentro de la polis, y en la manera en que a partir de su entendimiento se podían normar algunos comportamientos que se encontraban dentro de la irregularidad social. Otro de los ámbitos de concentración intelectual y práctica, se encontraba en la medicina. Estas son las grandes preocupaciones de la época, que luego desembocaron en varias disciplinas que actualmente las tenemos con sus propias identidades y fronteras disciplinares.

La psicología y la antropología tienen un origen común, estuvieron muchos siglos compartiendo y apadrinadas por la filosofía. Pero a diferencia de la psicología, la antropología adquiere un realce disciplinar en momentos históricos en la que unos grupos, por la fuerza más que por la seducción, se imponen sobre otros, los conquistan y los colonizan. Por su lado, la psicología en sus inicios filosóficos se ha dedicado a resolver la relación entre alma (mente) y cuerpo. Pero el desarrollo de las ciencias puras y principalmente de las ciencias biológicas promovieron la cientificidad en ambas en los siglos XVIII y XIX. La teoría que inspiró a ambas ciencias ha sido la teoría evolucionista biológica de Darwin. Pero la psicología además tomó mano de los avances de la química, la fisiología, la psicofísica y la neurología.

Ambas disciplinas han evolucionado en sus recorridos teórico-metodológicos hacia una mejor comprensión del ser humano a nivel individual y a nivel social usando metodologías cada vez más sofisticadas. Ambas disciplinas hicieron uso de los postulados del funcionalismo, estructuralismo, materialismo dialéctico, marxismo, cognitivismo, simbolismo y posmodernidad como época y contexto, así como de la teoría de sistemas. En algunas épocas, una tomó mano de alguno de los postulados de la otra, como es el caso de la antropología que se basó en algunos de los postulados del psicoanálisis para construir la teoría de la personalidad y la cultura. Pero son más los usos de los postulados filosóficos comunes para ambas disciplinas a lo largo de la historia, que las diferencias teóricas que las distancian.

Una de las grandes diferencias entre ambas disciplinas se encuentra en el tipo de análisis, interpretación y respuestas que dieron a las problemáticas de la realidad social. En sus primeras fases, la psicología ha estado concentrada en resolver los problemas de la relación entre alma y cuerpo, entre mente y cuerpo y del influjo que tiene el ambiente sobre el comportamiento humano. La psicología ha querido responder a la individualidad -del comportamiento individual- siempre desde la comprensión del alma, de la mente, de la conducta y más tarde de aquello que se ha denominado el comportamiento humano. Por su lado, la antropología se ha preocupado prioritariamente por las relaciones sociales existentes entre las diferentes culturas y etnias. Se ha preocupado con un enfoque holístico desde todas sus teorías, por entender la diferencia entre las lógicas y cosmovisiones sociales considerando siempre su diacronicidad. La antropología en su primera fase también se ha preocupado por tratar de entender la dominación que ejercen unos pueblos sobre otros. En la Antigüedad, los pueblos que han logrado conquistar y dominar a otros pueblos, primero, los han estudiado para conocer cuáles son sus puntos débiles. Más tarde, la antropología se ha ido comprometiendo con su objeto de estudio y más bien han investigado a los pueblos para detectar sus necesidades, para elevarlos al objetivo de reconocimiento social y de los colectivos humanos occidentales y occidentalizados.

En este sentido, la antropología en sus inicios ha tenido como objeto estudiar "al otro", al diferente, "al otro no occidental", al indígena, al originario de esos pueblos llamados salvajes en un primer momento y luego bárbaros. Más tarde, quiso comprender a esos pueblos no

occidentales denominados, entonces, "el pueblo", que si bien eran -y son todavía- pueblos no occidentales, sin duda alguna se han transformado profundamente en sus identidades sociales y, por lo tanto, en sus componentes culturales, en sus estilos de vida y en su cotidianeidad. Pero la acepción de pueblo tiene un sentido más igualitario y humano, o lo que es lo mismo, el enfoque es menos colonizado. Más allá de esto, en la actualidad, la antropología estudia a los originarios en su proceso de transformación social, y está avanzando para estudiar las sociedades occidentalizadas y la cultura occidental en un contexto global.

Si bien la psicología se ha ido especializando en sus áreas (clínica, educativa y social), no ha dejado de darle importancia al estudio de los procesos psíquicos-en el sentido más individual que social- es decir, de la vida psíquica. La vida psíquica se refiere a aquellos procesos del pensamiento oculto y exteriorizado, a la autovaloración, las expectativas y la motivación y, finalmente, los procesos de aprendizaje. Y desde un enfoque más social, la psicología ha generado sus propios avances hacia la psicosociología.

La antropología como una intención de globalizar sus recorridos teóricos a lo largo de su historia epistemológica concentra su objeto de estudio en el hombre y su cultura, es decir, en las diferentes formas que el ser humano y su comportamiento se explicitan en los procesos de relacionamiento social. A la antropología le interesa fundamentalmente el estudio de la transformación de las culturas a lo largo de la historia, producto de las dinámicas sociales.

En la actualidad, la frontera entre antropología y psicología no sólo se encuentra en el objeto de estudio (incluida la comparación más directa entre antropología social y psicología social), como se mencionó en el párrafo anterior, sino fundamentalmente en el enfoque, que a la vez se deriva del objeto o territorio de estudio, y de la experiencia de cada cual. El enfoque es entendido como la manera de ver, analizar e interpretar el objeto de estudio a partir del contexto o de la realidad social circundante, así como de las estrategias que se utilizan para elaborar los instrumentos de investigación, y el tipo de abordaje de la realidad social.

El psicólogo ha desarrollado de manera más amplia su capacidad de aplicación en los ámbitos biológicos y médicos. Si bien éste no prescribe medicamentos, realiza el abordaje clínico para entender la dinámica psíquica. Finalmente, la perspectiva de la psicología es la interdisciplinariedad y la posibilidad que ésta tiene de aplicarse a un conjunto de disciplinas, en todos sus ámbitos y en todo momento y espacio.42

Por su lado, la perspectiva que tiene actualmente la antropología es el tratamiento del contexto económico-político, denominado globalización, pues ésta afecta a cada cultura y cada vida, así como las identidades sociales. La globalización ha saltado y sobrepuesto en el ámbito local. El ser ciudadano es el ser del mundo o es aquel que vive en un mismo tiempo entre lo local y lo global.43 Isidoro Moreno (2005) ha denominado a este contexto la glocalización. Y nosotros diríamos que la nueva persona es el ciudadano de la glocalización.

La mirada de la psicología es la construcción y transformación de la vida psíquica, y la mirada de la antropología es la construcción y la transformación de las relaciones interétnicas y sociales en un contexto global, en cuanto a objeto de estudio se refiere. En el ámbito teórico-metodológico (salvo la experimentación, que no es aceptada por la antropología en ninguno de los momentos históricos), cada cual preserva sus propias fronteras. Pero en la actualidad, ambas tienden a compartir los procedimientos referidos al contexto, o sea, a la posmodernidad aplicada a ambas ciencias, porque los tiempos así lo requieren.

 

EL "OBJETO CULTURA" Y SUS ENFOQUES

El objeto o territorio de estudio de la antropología es el hombre y su cultura. Este objeto se gesta y se forma en la experiencia histórica, epistemológica y disciplinar de la antropología.

El "objeto cultura" más allá de estar adscrita a la antropología tiene varios enfoques que le permite mirarse como en un espejo. Estos enfoques se refieren al holismo, el etnocentrismo, el histórico, el relativismo cultural y el eclecticismo.

El holismo se refiere a que "la cultura" es explicada por la realidad social desde una perspectiva de totalidad. La cultura como cerebro de una población o de un colectivo humano se describe, analiza e interpreta desde todas sus dimensiones sociales, es decir, desde la política, la económica, la religión, desde lo jurídico-legal y lo ecológico. Según Hoebel (1998), "ninguna parte de la sociedad puede ser plena o exactamente comprendida apartada del todo. Recíprocamente el todo no puede ser exactamente entendido sin un conocimiento especializado de las partes".44 Desde este enfoque, se toma al grupo humano como una globalidad social, y no como una suma de elementos o de personas que conforman un colectivo social. El holismo en la cultura entiende la lógica y la cosmovisión social desde todos sus componentes dimensionales sistemáticamente interrelacionados y globalizados.

Otro de los enfoques del "objeto cultura" es la perspectiva etnocéntrica. El etnocentrismo es el grado de amor propio que tiene cada pueblo sobre sí mismo en todas sus dimensiones sociales, y cuán centralizado se sienta en el mundo y ante el mundo. El etnocentrismo realza el enfoque político, ya que el hecho de comprender el cómo se mira cada pueblo a sí mismo proporciona una referencia del manejo del poder que tiene un pueblo para confrontarlo al poder proveniente de otro pueblo. "El etnocentrismo es la práctica de juzgar a otras culturas con las normas de la propia".45 Mientras más etnocentrista sea una población, más se alimentará en términos de poder y, por lo tanto, le será más fácil ser autosuficiente y dominante sobre otro pueblo. Mientras menos etnocentrista sea una población, menor posibilidad de dominación tendrá y mayor posibilidad de asimilarse a la cultura dominante.

Otro de los enfoques del "objeto cultura" es el histórico-diacrónico. Este se refiere a que cada cultura tiene sus antecedentes, es decir, que tiene sus propios recorridos coyuntales. Sobre la base de sus antecedentes y sobre la base de lo construido, se transforma a nivel integral, en todas sus dimensiones sociales. La cultura sigue una dinámica interna y externa a lo largo del tiempo, que le lleva a revisar sus propios contenidos construidos.

Otro de los importantes enfoques del "objeto cultura" es el relativismo cultural, que consiste en el hecho de "que cada cultura debe ser enfocada en sus propios términos".46 De manera similar al etnocentrismo, este enfoque resalta la perspectiva y dimensión política, debido a que sus propios términos representan una especie de espejo que le muestran el grado de equilibrio que tiene en su acción social particular y con referencia al contexto social que lo circunda, y con la visión global del mundo al que se adscribe.

Finalmente, el "objeto cultura" tiene una perspectiva filosófica ecléctica, es decir, cuenta con múltiples enfoques y categorías para que la realidad sea abordada tal cual o sea posible aproximarse a ella. La realidad social es demasiado compleja como para tener una sola mirada sobre ella. Como se mencionó anteriormente, el objeto cultura es abordado desde la antropología como disciplina en todas sus dimensiones sociales (económicas, políticas, legales, culturales). También puede ser abordado desde miradas disciplinares, como la sociología, la psicología, la economía, etc. Pero además adquiere su propia mirada desde sus propios sistemas teóricos, como las miradas humanistas, dinamistas y posmodernas.

EL "OBJETO CULTURA" EN PSICOLOGÍA

Hasta ahora se ha hecho todo ese recorrido teórico-metodológico tanto en la psicología como en la antropología, con el propósito de describir los postulados y procedimientos que se encuentran detrás de estas disciplinas. Se ha un hecho un recorrido histórico paralelo con el fin de observar similitudes y diferencias. Se han identificado similitudes debido al contexto que las ha construido, así como diferencias, debido a las problemáticas en las que se han centrado enfatizando y respondiendo los problemas diferentes, pero que con el tiempo se han aproximado.

Tal como se recalcan constantemente, para la psicología, el objeto o territorio de la antropología que es "la cultura", es eso, un objeto que se clava en la disciplina psicológica para ayudarle a dar cuerpo y contexto a esta disciplina en todas sus áreas. El objeto cultura también viene a desempeñar un papel de transversalización que cruza toda la disciplina, tanto en los aspectos teórico-metodológicos, en su objeto o territorio como en su enfoque, según sea el área que se esté abordando y la problemática que se esté tratando. El objeto cultura en psicología le proporciona un cuerpo analítico e interpretativo que le ayuda comprender los procesos psíquicos desde el enfoque cultural, que consiste en entender los significados, sentidos y estilos de vida de los colectivos humanos diferenciados. Si bien la psicología no puede, ni pretende apropiarse de la experiencia disciplinar de la antropología, ha logrado establecer la cultura como eje en sus explicaciones ante diversas problemáticas.

Los procesos psíquicos (objeto de la psicología) se originan en la cultura y vuelven a la cultura, es decir, se construyen en los procesos de relacionamiento intercultural. Gimeno y Palenzuela (2005) expresan que la globalización es un desafío para la antropología debido fundamentalmente a que hay que entender al ser humano en el contexto mundial, y no sólo local, y que la persona ha aprendido a mirar más allá de sus fronteras.... Ha visto mundo.... Es ciudadano del mundo. De manera similar, tenemos que entender a la persona en su individualidad, pero en una perspectiva social, que conciba la etnicidad como el eje que mueve la diferencia, y todavía la diferencia es un indicador para la desigualdad social mundial.

LOS OBJETIVOS DEL "OBJETO CULTURA" EN PSICOLOGÍA

Sin duda alguna, el objetivo central del objeto cultura en psicología es la aplicación de éste como herramienta teórico-metodológica. ¿El objetivo? En la psicología, es hacer una mejor y más pertinente lectura de la realidad social.

Esto significa que aunque la psicología tome mano de una construcción histórica, epistemológica y experiencial de la antropología, conserva sus fronteras disciplinares.

La psicología deberá mantener su identidad y sus fronteras a partir de su enfoque, pero considerando como transversal y como referencia contextual a la cultura, escenario donde se desarrolla la vida psíquica.

La psicología deberá construirse y reconstruirse en sus características teórico-metodológicas teniendo como base los procesos socioculturales. Para ello, deberá tener focalizado su propio objeto de estudio.

La psicología deberá actualizarse y reconfigurarse yendo de la mano con el objeto cultura, pero sin desechar la experiencia que ésta ha adquirido como objeto de la antropología.

La psicología tiene como principal tarea y desafío el responder a la búsqueda del sentido de la existencia humana y direccionarla hacia una calidad de vida, a partir de la comprensión de la formación de la vida psíquica y del contexto sociocultural.

 

MÉTODO

Este artículo es un ensayo que ha utilizado como método el análisis y la reflexión de la historia teórico-metodológica de la antropología y de la psicología, desde sus inicios en las escuelas europeas y el posterior surgimiento en Norteamérica, resaltando sus objetos de estudio.

Además, se ha utilizado el método comparativo entre ambas disciplinas a nivel teórico-metodológico para abordar el enclave que pueda tener el objeto cultura en la psicología.

 

DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES

La antropología es una disciplina que trata el objeto cultura desde sus teorías y métodos. Este objeto va a ser usado en la psicología como un enclave y una transversal, de manera que le permita ampliar su mirada o enfoque.

La antropología es la "ciencia del hombre y su cultura" (de la vida social) y la psicología es la ciencia de los "procesos psíquicos" (de la vida psíquica). Aunque esta última esté aplicada a la educación, o a aquello que vamos a considerar como lo social (histórico, político, económico, jurídico-legal, lo étnico, lo educativo y la salud), le sigue interesando fundamentalmente la vida psíquica.

Los procesos psíquicos son una concentración de las actividades históricas y socioculturales que tienen su manifestación y su impacto en la propia persona, en la familia, en la comunidad, en la sociedad y en el ámbito mundial. Por ejemplo cuando la psicología política se empezó a preocupar en su tiempo (años 1940-1950 y 1960) por la creencia y la subjetividad de la persona en el momento de sufragar, y sobre su participación en el ámbito nacional a través del voto, lo que en realidad pretendía era descubrir el sentido del hombre en el mundo, en este caso, a través de la votación en un sistema democrático, en ese entonces incipiente en los países desarrollados. De la misma manera, lo que pretende lo socio-cultural (sin separarse de la vida psíquica) es el ver el sentido y el dar testimonio de cada época sobre la existencia de cada individuo dentro de su colectivo, en el que se desenvuelve y el que le da vida.

Está claro que los procesos psíquicos tienen su origen en las bases biológicas y socioculturales. Estos procesos psíquicos son el resultado y a la vez el origen de la vida social que la persona vivencia, aunque esté durmiendo, meditando, exiliado en el lugar más distante de su nacionalidad o finalmente aunque esté en un tiempo diferente del terrestre, dentro de una nave espacial, por el afán de descubrir qué hay más allá del planeta Tierra. Los procesos psíquicos -está claro- no son sólo la memoria de lo social, o de la historia de lo afectivo-emocional y sociocultural, sino también se constituyen en la dinámica del sentido humano, y de la dirección que va a tener ésta a futuro, y siempre en la búsqueda de la preservación de la vida en sus diferentes formas, estilos y direccionalidades.

 

NOTAS

3 BRENAN, J. (1999). Historia y Sistemas de laPsicología. p. 168.

4 WOLMAN, Benjamín (1986). Teorías y sistemas contemporáneas

en psicología. p. 494.

5 De Kohler, Gestalt Psychology (1947). Benjamin Wolman (1986).

Teorías y sistemas contemporáneos en psicología, p.508.

6  WOLMAN, Benjamín (1986). Teorías y sistemas contemporáneas en psicología. p. 516.

7    Aplicada a la psicología social.

Ibid p.535

9   BRENAN, J. (1999). Historiay sistemas de la psicología. p. 233.

10   BRENAN, J. (1999). Historiay sistemas de la psicología. p. 237.

11  WOLMAN, Benjamín (1986). Teorías y sistemas contemporáneas

en psicología, p. 89.

12   BRENAN, J. (1999). Historiay sistemas de la psicología, p. 257.

13    BRENAN, J. (1999). Historiay sistemas de la psicología, p. 275.

14  De NEISSER (1967), p. 4. En PUENTE, Aníbal, POGGIOLI, L., NAVARRO,A.(1995).Psicologia cognitiva.p 20.

15 GONZÁLEZ, Fernando (1985). Psicología de la personalidad. p.10

16   BRENAN, J. (1999). Historiay sistemas de la psicología, p. 299

17    También promovió la antropología de los sistemas. Bertalanffy dio grandes aportes a la disciplina antropológica y realizó toda una explicación sobre la cultura y la relacionó con la historia.

19 NANDA, Serena. (1995). Antropología de la Cultura. p. 25.

18      BERTALANFFY, Ludwig (1995). Perspectivas en la teoría general de sistemas, pp. 118-119.

20       MARVIN, Harris (1979). El desarrollo de la teoría antropológica. Historia de las teorías de la cultura, p.199.

21   Ibid., p. 235.

22  Ibid.,p.230 

23   Aunque este último es por excelencia particularista histórico.

24   Ibid., p. 326.

25   HOEBEL, Adamson y WEAVER, Thomas (1998). Antropología y experiencia humana, p. 321

26    Sociólogo funcionalista y positivista francés. Según Durkheim, se debe estudiar la sociedad y no al individuo. Los hechos sociales tienen una existencia que rebasa a los individuos que participan en ellos. Por ejemplo, la religión aporta y estimula la solidaridad social, y ésta permite unificar las sociedades en el tiempo y en el espacio.

27   De Durkheim.

28       Quien se dedicó a estudiar profundamente  la ley de la reciprocidad humana, el dar, el recibir y el  devolver. La circulación de los objetos, que sirvió y sirve  de base para explicar el comportamiento económico.

29     En MARVIN, Harris (1979). El Desarrollo de la teoría antropológica. Historia de las teorías de la cultura, p. 420.

30   NANDA, Serena (1995). Antropología de la cultura, p. 30.

31  HOEBEL, Adamson y WEAVER, Thomas (1998). Antropología y experiencia humana, p. 34.

32  Ibid.,p.31

33    Esta idea se basa en la lectura sobre el materialismo cultural y ecología cultural en el libro de Marvin Harris (1979, pp. 570-571). Hay que aclarar que muchos antropólogos de la época de Steward, le niegan el uso del materialismo cultural.

34        REYNOSO, Carlos (1998). Corrientes en antropología contemporánea, p. 58.

35    Aunque el estudio de los significados tuvo mayor concentración por parte de la antropología simbólica y, según Serena Nanda (1995), ésta trata del sistema comparativo de símbolos y significados, cuyo representante principal es Clifford Geertz. Para nosotros Geertz es representante de la antropología posmoderna, que si bien tiene sus cimientos en la antropología cognitiva y simbólica, esta última tiene como representantes a Schneider y Turner.

36   De Colby (1981). En REYNOSO, Carlos. (1998). Corrientes en antropología contemporánea. p. 77.

37    REYNOSO, Carlos. (1998). El surgimiento de la antropología posmoderna.

38   Ibid., p. 21.

39    REYNOSO, Carlos (1998). Corrientes en antropología contemporánea. p. 333.

40    REYNOSO, Carlos (1998). Corrientes en antropología contemporánea. p. 314.

41 De MATURANA (1974, p. 464). En REYNOSO, Carlos (1998). Corrientes en antropología contemporánea, p. 334.

42    Basado en el libro de ARDILA, R. (2002). La Psicología en el futuro. Los más destacados psicólogos del mundo reflexionan sobre el futuro de la Psicología.

43    Basado en el ensayo de GIMENO, J. C. y PALENZUELA, P. (2005). La Globalización un desafío para la antropología (2005).

44   HOEBEL, Adamson y WEAVER, Thomas (1998). Antropología y experiencia humana, p. 7.

45   NANDA, Serena (1995). Antropología de la cultura, p. 11.

46  Ibid.,p13 

 

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