INTRODUCCIÓN
La vida en pareja define la estabilidad familiar (Botero, 2000). Es ineludible la relación entre violencia doméstica y disfuncionalidad familiar (v.g. Spencer y cols., 2019). La actual situación en Bolivia debido a la pandemia por el COVID-19 ha favorecido el incremento del riesgo de violencia doméstica y familiar (Pinto y cols. 2020).
Ahora bien, la violencia en la relación de pareja se suscita por la frustración ante los embates de la injusticia social (Rodriguez y Córdova, 2009). La pareja debe enfrentar conflictos originados por la inestabilidad laboral (Aguilar, 2021), las crisis económicas (Arrieta y cols. 2021), la violencia de género inmersa en culturas patriarcales (Béjar, 2009).
No se debe reducir el desequilibrio de la vida en pareja a condiciones exclusivas del vínculo romántico. Es indispensable comprenderlo anegado en un entorno social e histórico (Armenta y cols. 2012). Los problemas de la pareja se instalan en las dificultades de sobrevivencia, muchas de ellas, ajenas a soluciones inmediatas o dependientes de la acción de cada miembro de la relación (de Weiss y Palos, 1988; Zafra y Espartal, 2008; Villegas y Mallor, 2017).
La pandemia por el COVID-19 ha ocasionado cambios en la organización familiar para adaptarse a las condiciones de nuevos hábitos para la protección contra la posibilidad de infección por el virus (Pinchak, 2020). El estrés familiar ha sido la consecuencia más común en sus relaciones, tanto ante el riesgo de contagio como en la presencia de enfermos en su seno (Calderón y cols., 2021).
En el estudio sobre el riesgo de violencia y la satisfacción marital en parejas bolivianas durante la cuarentena por el COVID-19, se estableció la existencia de la relación entre satisfacción y antecedentes de la convivencia. Si la pareja estaba satisfecha antes de la cuarentena se incrementó durante ella; es decir, si existía insatisfacción previa, ésta aumentó con el encierro. Las parejas insatisfechas manifestaron más conflictos que las satisfechas. El riesgo de violencia se produce enlazado a la insatisfacción. Una de las problemáticas presentes independiente a los niveles de satisfacción fue la relativa a los quehaceres del hogar (Pinto y cols. 2020).
La emancipación femenina se constituye en uno de los conflictos más difíciles de afrontar por parte de los varones (Pinto, 2018). Se relaciona con los cambios socio históricos de los roles de la mujer: emergencia por realización personal y necesidad de trabajar (Nash, 2006). El varón no tiene el repertorio cognitivo indispensable para adaptarse a los cambios de su pareja debido a esquemas construidos desde la ideología del dominio masculino (Martínez y Bolívar, 2021). Esto explica la alta incidencia de los conflictos ante la repartición equitativa de los quehaceres de la casa.
Se hace necesaria la investigación acerca de los problemas que la pareja debe afrontar en su relación. Esta información permitirá desarrollar programas de prevención (Marina, 2012) y de intervención terapéutica (Pinto, 2020). Así mismo, es importante establecer la relación entre los problemas de la pareja y los niveles de satisfacción, para identificar cuáles son aquellos más difíciles de sobrellevar y cuáles resultan superfluos (v.g. Lavener y cols. 2017).
Se utiliza el concepto ajuste diádico en los estudios de satisfacción, que incluye los componentes: consenso, satisfacción, expresión afectiva y cohesión (Spanier, 1976). En las investigaciones hispano parlantes, se ha preferido el uso de la palabra satisfacción en vez de ajuste (v.g.: Salinas, 2019), utilizando el término satisfacción marital para aludir a parejas formalmente casadas, y satisfacción conyugal en casos de unión libre o matrimonio.
La importancia del estudio de la satisfacción en las relaciones de pareja se debe a la relación entre una vida de pareja feliz, la salud mental (Peiman y cols.,2010). Tomando en cuenta a la familia, se han publicado varios estudios donde se verifica la relación entre la satisfacción conyugal y el pronóstico del divorcio (de Longis y Zwicker, 2017).
El concepto satisfacción conyugal es subjetivo, se refiere a la percepción de tener las necesidades y deseos satisfechos, a la percepción de la reciprocidad (dar y recibir) espontánea. Son los sentimientos de bienestar: compañerismo, ternura y seguridad afectiva, componentes propiciadores de la intimidad y la pasión, se determina congruencia entre las expectativas que los cónyuges, tienen relación con las experiencias vividas durante la convivencia (Jackson y cols., 2014). Hendrix (1988) la concibe como una dimensión valorativa global del cónyuge acerca de su relación romántica.
Se han creado diversas escalas para medir la satisfacción conyugal, la más esgrimida es la Dyadic Adjustment Scale (Spanier, 1989), se la utiliza en estudios ligados a la vida conyugal (vg.:Golen, 2020), ha sido validada en España (Santos y cols., 2009), México (de la Rubia, 2009), Chile (Zicavo y Vera, 2010), Perú (Céspedes, 2019). Otra es Marital Satisfaction Scale (Roach y cols.,1981), fue validada en México (Estrella, 1985). También ha sido empleada la Relationship Assessment Scale (Hendrix, 1988) en su adaptación mexicana.
En el presente estudio se ha recurrido al modelo multidimensional de la satisfacción conyugal, de tal manera que se establecieron los siguientes componentes: nivel de satisfacción general: establece la concepción global sobre el nivel de satisfacción que tiene la persona. Satisfacción con los aspectos emocionales de la relación: es la percepción de la persona hacia la expresión afectiva de la pareja. Satisfacción con la interacción: comprende la satisfacción con la comunicación, negociación y establecimiento de reglas. Satisfacción con los aspectos estructurales: señala la capacidad de afrontar problemas en pareja y la definición de límites a la familia de origen y a los sistemas sociales externos. Satisfacción con la sexualidad: determina el nivel de satisfacción con la vida sexual conyugal.
El propósito de la presente investigación ha sido identificar los problemas presentes en la relación de pareja y su relación con los niveles de satisfacción conyugal en parejas bolivianas durante la pandemia del Covid -19.
MÉTODO
Tipo de Investigación
La investigación parte de un enfoque cuantitativo porque estudia un fenómeno social utilizando mediciones donde interesa la precisión y el análisis matemático (Ander-Egg, 2011).
Según Landeau (2007) y Cruz, Olivares y González (2014) la investigación cuantitativa pretende establecer el grado de asociación o correlación entre variables, la generalización y objetivación de los resultados por medio de una muestra que permite realizar inferencias causales a una población.
Por ello, este tipo de estudio está orientado a comprobar de manera deductiva las proposiciones planteadas en la investigación, mediante la construcción de hipótesis a partir de la relación de variables para posteriormente someterlas a medición logrando así su confirmación o refutación (Alan y Cortez, 2017).
Se trata de una investigación explicativa porque va más allá de la descripción de conceptos, fenómenos o del establecimiento de relaciones entre conceptos dirigidos a responder a las causas de los eventos, sucesos y fenómenos en estudio. Su principal interés se centra en explicar por qué ocurre un fenómeno y en qué condiciones ocurre (Nieto, 2018).
Instrumento
La escala de ajuste diádico (DAS), es uno de los instrumentos más utilizados en estudios que evalúan la calidad y el ajuste de la pareja (Santos, Vallejo y Sierra, 2009). Como prueba de ello, Spanier (1985) señala que después de su creación fue empleada en más de 1.000 estudios (Santos, Vallejo y Sierra, 2009). Dicho instrumento, fue desarrollado como una escala multidimensional aplicable al matrimonio y a relaciones de pareja con características similares.
Las pesquisas psicométricas informan, que como puntaje total, el DAS tiene una consistencia interna de 0.96 (Rojas, 2007; Spanier, 1976). Por su parte, los estudios de validez ofrecen correlaciones elevadas con otras medidas de ajuste y satisfacción marital (Fisiloglu y Demir, 2000; Lim y Ivey, 2000; Spanier, 1976), un adecuado poder de discriminación entre parejas con buen y mal ajuste (Crane, Busby y Larson, 1991; Spanier, 1988) y sensibilidad al cambio terapéutico ( Boning y Hens, 1983).
Para la presente investigación se recurrió al modelo multidimensional de la satisfacción conyugal, que define la actitud multidimensional hacia el cónyuge y la relación marital, en el cual existen aspectos como: la interacción (Pick y Andrade, 1988a), que es el nivel de satisfacción en general, donde se establece la concepción global sobre el nivel de satisfacción que tiene la persona. La expresión de afectos (Pick y Andrade, 1988a), que es el nivel de satisfacción con aspectos emocionales de la relación, es decir, la percepción de la persona hacia la expresión afectiva de la pareja. Los aspectos de organización (Pick y Andrade, 1988a), que es el nivel de satisfacción con la comunicación, negociación y establecimiento de reglas.
La estructura diádica (Pick y Andrade, 1988a) es el nivel de satisfacción con los aspectos estructurales, donde se señala la capacidad de afrontar problemas en pareja y la definición de límites a la familia de origen y a los sistemas sociales externos. Además establece el nivel de satisfacción con la vida sexual conyugal.
El instrumento consta de dos partes: La primera relacionada con la satisfacción de la relación de pareja, donde se presenta un ítem, consta de cinco opciones de respuesta de tipo Likert, que va desde: 1 muy poca satisfacción, 2 poca satisfacción, 3 regular satisfacción, 4 buena satisfacción y 5 muy buena satisfacción.
La segunda parte, relacionada con los problemas de la convivencia, consta de 30 ítems con 5 opciones de respuesta de tipo Likert, que va desde: 1 nada, 2 poco, 3 medio, 4 alto y 5 muy alto.
El instrumento presenta datos sociodemográficos: sexo, departamento, edad, orientación sexual, nivel de formación académico, ocupación actual, tipo de unión, tiempo de la relación, tiempo de la convivencia, presencia de hijos, cantidad de hijos, y convivencia, mismos que son importantes para el análisis estadístico de los resultados.
Muestra
La muestra es no probabilística, intencionada y voluntaria, la condición de selección fue la convivencia actual en pareja. Los participantes son parejas convivientes bolivianas (Ander, 2011).
La muestra estuvo compuesta por 325 personas residentes de Bolivia: 0,6% (2) Beni; 1,5% (5) Tarija; 2,5% (8) Potosí; 3,1% (10) Cochabamba; 5,8% (19) son de Chuquisaca; 9,5% (31) de Santa Cruz de la Sierra; 76,9% (250) de la ciudad de La Paz.
Por sexo se identifica al 75,7% (246) mujeres y 24,3% (79) varones. Asimismo, se advierte que de esta proporción poblacional 32,9% (107) viven con su pareja, hijo/as y familias de origen; 57,5% (187) sólo parejas e hijos/as; 9,5% (31) sólo en pareja.
Procedimiento
Fase 1: Selección de la muestra: se realizó con personas que tienen pareja, siendo indiferente al tipo de unión, sea matrimonio civil, religioso o unión libre. Tomando en cuenta si en la convivencia estos viven solo con la pareja, pareja con hijos e hijas, o el caso de que convivan con algún miembro de la familia de uno de los convivientes. Se consideraron parejas de: La Paz, Potosí, Cochabamba, Chuquisaca, Tarija, Beni y Santa Cruz. Se las reclutó a través de redes sociales. Una vez contactada la persona se le hizo conocer el consentimiento informado, al ser aceptada las condiciones del estudio se procedió con la siguiente etapa.
Fase 2: Aplicación de los instrumentos: se realizó vía Internet, a través de un enlace compartido en distintas redes sociales: whatsapp y facebook. El tiempo utilizado para la resolución de la encuesta osciló entre 15 a 20 minutos.
Fase 3: Procesamiento de datos: para el análisis estadístico se recurrió al software Statistical Package for the Social Sciences - SPSS (Versión 25). Se realizó el análisis e interpretación de datos a través de los coeficientes Kolmovorov Smirnov, Krukal Wallis y Rho de Spearman, identificando la exploración de la normalidad, frecuencias generales, comparaciones de grupo por el tipo de convivencia, correlación de satisfacción y problemas de pareja, regresión logística de problemas en la convivencia y satisfacción en la pareja.
Análisis de los Datos
Se analizó la normalidad de la muestra mediante el coeficiente de Kolmovorov Smirnov. Los problemas de pareja son la variable independiente y la variable dependiente la satisfacción. Primero se diferenciaron los problemas en la convivencia que resaltan más. Luego se procedió a diferenciar los problemas de pareja en función al tipo de convivencia, realizado mediante estadísticos descriptivos y el coeficiente de Kruskal Wallis para la comparación de más de dos grupos. Después se estudió la relación entre los problemas de convivencia y la satisfacción de pareja con el coeficiente de relación de Rho Spearman, finalmente se determinó la influencia entre variables con el análisis de regresión logística.
RESULTADOS
Exploración de la Normalidad
Para evaluar la normalidad en la muestra se consideró la satisfacción de pareja y uno de los problemas de pareja al azar que fue el tiempo libre personal. La satisfacción de pareja señala una asimetría (-0,765) y curtosis (0,158) resultando ubicarse por debajo de 1. Sin embargo, señala un coeficiente de Kolmovorov Smirnov significativo (p<0,01) con gl=325 y una K= 0,239. Para los problemas de pareja en el tiempo libre personal con una asimetría (0,124) y una curtosis (-0,066) igual por debajo de 1, pero señala un coeficiente de Kolmovorov Smirnov significativo (p<0,01) con gl = 325 y una K= 0,231. Para ambas variables se concluye que no cumplen una distribución normal.
Frecuencias Generales
MIN | MAX | X | MIN | MAX | X | ||
Tiempo Libre Personal | 1 | 5 | 2,68 | Infidelidad | 1 | 5 | 1,69 |
Tiempo Libre Compartido | 1 | 5 | 2,95 | Violencia Física | 1 | 5 | 1,22 |
Creencias Religiosas | 1 | 5 | 2,85 | Violencia Verbal | 1 | 5 | 1,95 |
Administración del Dinero | 1 | 5 | 3,00 | Costumbres de mi pareja | 1 | 5 | 2,53 |
Sexualidad | 1 | 5 | 2,83 | Costumbres propias | 1 | 5 | 2,48 |
Cuidado de Hijos/as | 1 | 5 | 2,55 | Diferencia Cultural | 1 | 5 | 1,90 |
Educación de los Hijos/as | 1 | 5 | 2,56 | Consumo de Alcohol de mi pareja | 1 | 5 | 1,92 |
Quehaceres de la casa | 1 | 5 | 3,12 | Consumo de Alcohol Propio | 1 | 5 | 1,58 |
Trabajo de mi pareja | 1 | 5 | 2,92 | Consumo de Drogas por mi Pareja | 1 | 5 | 1,14 |
Trabajo Propio | 1 | 5 | 3,00 | Consumo de Drogas Propio | 1 | 5 | 1,08 |
Familia de Origen de mi Pareja | 1 | 5 | 2,82 | Enfermedad Física de mi pareja | 1 | 5 | 1,49 |
Familia de Origen Propia | 1 | 5 | 3,00 | Enfermedad Física de mi Persona | 1 | 5 | 1,55 |
Relación con mis Propias Amistades | 1 | 5 | 2,48 | Enfermedad Mental de mi pareja | 1 | 5 | 1,34 |
Relación con las amistades de mi pareja | 1 | 5 | 2,33 | Enfermedad Mental Propia | 1 | 5 | 1,33 |
Uso de Recursos Tecnológicos de Comunicación | 1 | 5 | 3,50 | Posturas Políticas | 1 | 5 | 1,75 |
Celos | 1 | 5 | 2,39 |
En la Tabla 1. se encuentra el mínimo (MIN), máximo (MAX) y el promedio (X) de los distintos problemas en las relaciones de pareja. Varía en un rango del 1 al 5. Por lo tanto, los problemas en las relaciones de pareja más comunes sugeridos por la muestra son: la administración del dinero, los quehaceres de la casa, el trabajo propio y el uso de recursos tecnológicos. Estos son significativos porque el promedio se encuentra en un nivel superior al término medio.
Comparaciones de Grupo por el Tipo de Convivencia
Tipo de Convivencia | MIN | MAX | X | |
Solo pareja | Tiempo Libre Personal | 1 | 5 | 3,10 |
Administración del Dinero | 1 | 5 | 3,16 | |
Sexualidad | 1 | 5 | 3,03 | |
Quehaceres de la casa | 1 | 5 | 3,39 | |
Trabajo de mi pareja | 1 | 5 | 3,13 | |
Trabajo Propio | 1 | 5 | 3,03 | |
Familia de Origen de mi Pareja | 1 | 5 | 3,06 | |
Uso de Recursos Tecnológicos de Comunicación | 1 | 5 | 3,45 | |
Pareja e Hijos/as | Tiempo Libre Personal | 1 | 5 | 2,67 |
Administración del Dinero | 1 | 5 | 3,02 | |
Quehaceres de la casa | 1 | 5 | 3,22 | |
Trabajo Propio | 1 | 5 | 3,03 | |
Uso de Recursos Tecnológicos de Comunicación | 1 | 5 | 3,49 | |
Parejas, Hijos/as y Familias de Origen | Sexualidad | 1 | 5 | 3,00 |
Familia de Origen Propia | 1 | 5 | 3,10 | |
Uso de Recursos Tecnológicos de Comunicación | 1 | 5 | 3,53 |
En la tabla 2 se encuentran sólo aquellos problemas de parejas que en su promedio están por encima de una media (3) en un rango del 1 al 5. Cuando la pareja convive sola se presentan problemas con el tiempo libre personal, la administración del dinero, la sexualidad, los quehaceres de la casa, el trabajo de mi pareja, el trabajo propio, la familia de origen de mi pareja y el uso de recursos tecnológicos de comunicación. Siendo el uso de recursos tecnológicos de comunicación y los quehaceres de la casa los más altos en promedio.
Cuando conviven entre parejas e hijos/as se presentan problemas con el tiempo libre personal, la administración del dinero, los quehaceres de la casa, el trabajo propio y el uso de recursos tecnológicos de comunicación. Con incremento de conflictos con el uso de recursos tecnológicos de información y los quehaceres de la casa.
En cambio, cuando se convive con las familias de origen aparte de la pareja e hijas/os, se resaltan problemas con la sexualidad, la familia de origen personal y el uso de recursos tecnológicos de comunicación, siendo este último el de mayor incidencia.
Algunos de estos datos se confirman con el análisis de Krukal Wallis en la tabla, porque señalan una diferencia por grupos altamente significativo (p<0,01) con quehaceres de la casa y medianamente significativo (p<0,05) con el tiempo libre personal y la sexualidad, estos se detallan en la Tabla 3.
Correlación de Satisfacción y Problemas de Pareja
En la tabla 4 se muestra la satisfacción de la relación de pareja relacionada con el coeficiente de Rho de Spearman con los problemas de pareja. Se diferencian dos tipos de comportamiento entre las variables: los problemas de pareja con el tiempo libre personal, el tiempo libre compartido, la administración del dinero y la sexualidad, son relaciones altamente significativas (p<0,01), a excepción del tiempo libre personal medianamente significativo (p<0,05).
Satisfacción de la Relación de Pareja | Satisfacción de la Relación de Pareja | |||||
Correlación de Rho de Spearman | Tiempo Libre Personal | Coeficiente | ,118* | Violencia Física | Coeficiente | -,249** |
Sig. | ,033 | Sig. | ,000 | |||
Tiempo Libre Compartido | Coeficiente | ,303** | Violencia Verbal | Coeficiente | -,425** | |
Sig. | ,000 | Sig. | ,000 | |||
Administración del Dinero | Coeficiente | ,145** | Diferencia Cultural | Coeficiente | -,264** | |
Sig. | ,009 | Sig. | ,000 | |||
Sexualidad | Coeficiente | ,203** | Consumo de Alcohol de mi pareja | Coeficiente | -,190** | |
Sig. | ,000 | Sig. | ,001 | |||
Celos | Coeficiente | -,213** | Enfermedad Mental de mi pareja | Coeficiente | -,228** | |
Sig. | ,000 | Sig. | ,000 | |||
Infidelidad | Coeficiente | -,393** | Enfermedad Mental Propia | Coeficiente | -,162** | |
Sig. | ,000 | Sig. | ,003 |
*. La correlación es medianamente significativa en el nivel 0,05 (bilateral).
**. La correlación es altamente significativa en el nivel 0,01 (bilateral).
Las otras relaciones con los problemas de pareja: infidelidad, violencia física, violencia verbal, diferencia cultural, consumo de alcohol del cónyuge, enfermedad mental de la pareja y la enfermedad mental propia poseen coeficientes negativos altamente significativos (p<0,01). La infidelidad y la violencia verbal poseen relaciones negativas medianas con coeficientes entre un rango de 0,3 a 0,7, las demás se caracterizan de ser relaciones negativas bajas con coeficientes con un rango de 0,0 a 0,3.
Regresión Logística de Problemas en la Convivencia a Satisfacción en la Pareja
La regresión logística se realizó con el método de Wald, define la presencia y el comportamiento de las variables cuando se presentan juntas e inciden en la satisfacción de pareja. Para eso se incluyeron todas las variables que señalan una correlación con la satisfacción de pareja.
B | Error estándar | Wald | gl | Sig. | Exp(B) | ||
Paso 1a | Tiempo Personal Compartido(1) | -2,046 | ,390 | 27,508 | 1 | ,000 | ,129 |
Constante | 3,035 | ,324 | 87,884 | 1 | ,000 | 20,800 | |
Paso 2b | Tiempo Personal Compartido(1) | -1,959 | ,404 | 23,535 | 1 | ,000 | ,141 |
Infidelidad(1) | 1,667 | ,387 | 18,530 | 1 | ,000 | 5,298 | |
Constante | 1,842 | ,395 | 21,701 | 1 | ,000 | 6,307 | |
Paso 3c | Tiempo Personal Compartido(1) | -1,870 | ,412 | 20,645 | 1 | ,000 | ,154 |
Infidelidad(1) | 1,340 | ,409 | 10,729 | 1 | ,001 | 3,819 | |
Violencia Verbal(1) | 1,224 | ,401 | 9,290 | 1 | ,002 | 3,400 | |
Constante | 1,233 | ,438 | 7,912 | 1 | ,005 | 3,432 |
a. Variables especificadas en el paso 1: Tiempo Personal Compartido.
b. Variables especificadas en el paso 2: Infidelidad.
c. Variables especificadas en el paso 3: Violencia Verba
En primera instancia se encuentra como significativa: el tiempo personal compartido. Esta variable en la Tabla señala beneficio para la satisfacción en la pareja al estar entre un rango de 0,0 a 0,3.
En segundo lugar, la relación entre la satisfacción y el tiempo personal compartido denota una vinculación de alto nivel, es decir, a mayor tiempo de las actividades personales compartido el grado de satisfacción se incrementa. En cambio, la infidelidad viene a ser un factor de riesgo elevado, manifiesta un Exp (B) superior a 2,6.
Un tercer aspecto es el relacionado con violencia verbal definiéndose como un factor perjudicial para la satisfacción, presenta un Exp (B) superior a 2,6.
La inclusión de estas variables (uso del tiempo personal compartido, infidelidad y violencia verbal) y el descarte de las otras sugieren ser las más influyentes en la satisfacción conyugal.
CONCLUSIONES
Es evidente que la emergencia sanitaria del Covid-19 produjo transformaciones a nivel estructural como organizativas en la relación de pareja, puesto que al ser obligados a estar aislados y guardar cuarentena, la convivencia en parejas se potenció más en aquellas que tenían satisfacción en sus relaciones y vínculos, mientras que en otras prevaleció la insatisfacción debido al impacto significativo que produjo el aislamiento (Pinto y cols, 2020)
Dentro de la investigación el problema más importante influyente en la satisfacción de las parejas bolivianas, indiferentemente de su tipo de convivencia (sola, sin hijos o con hijos y familia de origen), es el uso de recursos tecnológicos de información, probablemente debido a que la tecnología cobró mayor importancia (Hallar, 2009). Ha sido difícil asumir a la tecnología como un recurso imprescindible para la comunicación, considerándose una obligación modificar los hábitos laborales, socializadores y de consumo, generando un ordenamiento social que está bajo la premisa de la nueva era de la tecnología informática instalándose como la nueva forma de acceso virtual en todo ámbito (v.g. Guzmán, 2017).
Otro de los problemas que se ha identificado son los quehaceres del hogar, actividades de organización en el hogar, evidenciaron que la emancipación e independencia de la mujer sigue siendo objetada y demarcada por la ideología de dominio masculino. Influyendo notablemente el nuevo rol que asume la mujer en la actualidad, relegando, postergando su función en el sistema familiar.
En relación a los factores de influencia favorable para la satisfacción está el tiempo libre compartido. Lo que quiere decir que mientras más tiempo compartido tenga la pareja mayor satisfacción existirá. Los otros dos factores vinculados positivamente con la satisfacción son la administración del dinero y la sexualidad.
Otro aspecto relevante es que desde que se desató el brote del Covid-19 se ha intensificado todo tipo de violencia contra las mujeres, prioritariamente la violencia en el hogar. Por tanto, es imprescindible trabajar la prevención del riesgo de violencia (Pinto y cols. 2020).
Considerándose un aspecto de bastante importancia ya que los porcentajes de violencia incrementaron de sobremanera con cifras muy altas, es así, que seguirá siendo una lucha incansable rescatar a muchas mujeres de esa situación de vulnerabilidad a sus derechos como seres humanos.
En cuanto a las correlaciones negativas se pudo evidenciar a la violencia verbal con mayor incidencia negativa en comparación a la violencia física, refiriéndose a que entre más violencia verbal tenga la pareja, mayor será la insatisfacción, asumiendo que la violencia verbal es una señal menos perceptible que la violencia física (Rodríguez y Córdova, 2009).
Los otros factores incidentes de manera negativa con la satisfacción conyugal son: diferencias culturales, celos, enfermedad mental en cualquiera de los dos miembros conyugales y el consumo de alcohol por parte del otro cónyuge.
Es así que el presente estudio permite establecer los problemas relevantes en la convivencia de las parejas bolivianas, el cual confirma la hipótesis referida a la influencia entre los temas identificados y la satisfacción. Es factible aplicar estos hallazgos a las intervenciones psicoterapéuticas destacando el trabajo del entorno y el manejo inadecuado de los aparatos informáticos en la interacción de la pareja, interferentes de la comunicación. Resolviendo las condiciones de poder, preferentemente centrándose en el dominio masculino, las cuales repercuten en la distribución justa de los quehaceres del hogar.
En el proceso terapéutico se deberá favorecer el compartir las actividades de uno y otro cónyuge, al haberse identificado este factor como el más influyente en la satisfacción. A la par se debe estimular la complicidad en el manejo del presupuesto y el establecimiento de metas asociadas con el ahorro. El tercer ámbito conveniente para incrementar la satisfacción es la dimensión erótica, debe ser favorecida en terapia a través de técnicas favorecedoras de la sensualidad, ternura y pasión.
Se hace probable predecir el riesgo de violencia y ruptura de la relación si se manifiesta indicadores de violencia verbal, celos, infidelidad, presencia de trastornos mentales y consumo de alcohol.
Los hallazgos de este estudio promueven el desarrollo de propuestas de prevención del divorcio y de la violencia. Asumiendo que el divorcio se instala en parejas insatisfechas (Widmer y cols, 2006), además aquejadas de depresión (Wishman y Bruce, 1999) se deduce la importancia de abordar en la familia y escuela el aprendizaje de la regulación emocional, el cambio de creencias relacionadas con la ideología machista y la inserción de pautas requeridas para la convivencia familiar.
El límite más importante de este estudio ha sido la concreción de una muestra por conveniencia en lugar de establecer una representativa. Sin embargo, se han encontrado datos consistentes factibles de convertirse en puntos de partida para pesquisas más exhaustivas.
Otra limitante inevitable ha sido el utilizar las redes sociales para la aplicación de los instrumentos, propiciando la reducción en el control de variables extrañas. A pesar de ello, la validación de los cuestionarios ha sido satisfactoria.