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Ajayu Órgano de Difusión Científica del Departamento de Psicología UCBSP

versión On-line ISSN 2077-2161

Ajayu vol.13 no.1 La Paz mar. 2015

 

 

 

DISCONTINUIDADES EN LOS PROGRAMAS DE INVESTIGACION CIENTIFICOS DE FREUD Y LACAN EN TORNO AL “APARATO DEL LENGUAJE”

 

BREAKS IN THE SCIENTIFIC RESEARCH PROGRAMMES ON FREUD AND LACAN CONCERNING THE “APPARATUS OF LANGUAGE”

 

RUPTURAS NA PESQUISA CIENTÍFICA EM PROGRAMAS DE FREUD E LACAN RELATIVAS AO "APARELHO DE LINGUAGEM"

 

 

Por: Lic. Prof. María Eugenia Bellone Cecchin 1

 

 


RESUMEN:

El presente trabajo de tipo exploratorio se encuadra en un proyecto de investigación más amplio titulado “Continuidad y discontinuidad del PIC psicoanalítico entre Sigmund Freud y Jacques Lacan desde la perspectiva de I. Lakatos”. Mediante revisión bibliográfica se intentará arrojar luz sobre planteos freudianos y lacanianos respecto de la concepción del aparato del lenguaje tomando como antecedentes el Análisis de las Sensaciones de Ernst Mach y su influencia en Freud, junto con aportes de la fenomenología existencial en Lacan. Tomando como referencia la perspectiva epistemológica de Lakatos, quien sostiene que en todo programa de investigación científico existe un “núcleo firme” y un cordón de teorías auxiliares protectoras, se intentará identificar las teorías del lenguaje que subyacen en los programas de investigación lacaniano y freudiano, las cuales reflejan una discontinuidad o ruptura entre ambos: Freud sustenta su aparato del lenguaje en supuestos “machianos” partiendo de la cadena estimulo–percepción–sensación–representación; y en esto se contrapone Lacan, quien al teorizar sobre el aparato del lenguaje intenta satisfacer los requerimientos del programa fenomenológico existencial, sosteniendo la revelación del ser en la palabra heideggeriana.

Palabras clave: Aparato del Lenguaje – Programas de Investigación Científicos (PIC) – Jacques Lacan – Sigmund  Freud.


ABSTRACT:

This exploratory paper is included in a larger research project entitled "Continuity and discontinuity between the psychoanalytic SRP of Sigmund Freud and Jacques Lacan from the position of I. Lakatos'. Through this bibliographical revisionill try to explain some Freudian and Lacanian approaches concerning the apparatus of language by taking into consideration the influences of the Analysis of Sensations from Ernst Mach and its influences on Freud, and the contributions from existential phenomenology in Lacan. Referencing the epistemological perspective of Lakatos, who argues that in all scientific research programs (SRP) there is a "hard core" and a line of protective auxiliary theories, we will try to identify the language theories that support the Lacanian and Freudian research programs reflecting a discontinuity or a break, between the two of them: Freud’s apparatus of language is based on the "Machian’s" chain stimulus-perception-sensation-representation, but this opposes Lacan, whose theory about the apparatus of language attempts to satisfy the requirements of the existential phenomenological program, trying to show the revelation of beingnto Heidegger’s word.

Key Words: Apparatus of Language – Scientific Research Programs (SRP) – Jacques Lacan – Sigmund Freud.


RESUMO

Este trabalho exploratório se encaixa em um projeto de pesquisa maior, intitulado "Continuidade e descontinuidade entre o PIC psicanalítico de Sigmund Freud e Jacques Lacan a partir da posição de I. Lakatos. Através desta revisão bibliográfica, vamos tentar explicar algumas abordagens freudianas e lacanianas sobre o aparelho de linguagem, levando em consideração as influências da Análise das Sensações de Ernst Mach e suas influências sobre Freud, e as contribuições da fenomenologia existencial em Lacan. Referenciando a perspectiva epistemológica de Lakatos, que argumenta que em todos os programas de investigação científica (PIC) existe um "núcleo duro" e uma linha de teorias auxiliares de proteção, vamos tentar identificar as teorias de linguagem que sustentam os programas de pesquisa lacanianos e freudianos refletindo uma descontinuidade ou uma ruptura entre os dois : aparelho da linguagem de Freud é baseada no estímulo percepção-sensação-representação em cadeia "Machiana", mas isso se opõe a Lacan, que em teorizar sobre sistema de linguagem tenta satisfazer requisitos do programa fenomenológico existencial, segurando a revelação do Ser na palavra “heideggeriana”.

Palavras clave: aparelho da linguagem - programas de investigação científica (PIC) - Jacques Lacan - Sigmund Freud.


 

 

Introducción

El presente trabajo se propone leer diferentes momentos de la teoría freudiana y lacaniana desde la metodología de los PICs (programas de investigación científica) desarrollados por Imre Lakatos. Un PIC está conformado por un núcleo firme (histórico, no falsable por decisión metodológica) y un cordón de teorías auxiliares guiado por su heurística positiva. Este programa de investigación señala que es un hecho grave acusar a una teoría de pseudocientífica, basándose en los criterios de demarcación establecidos por el “falsacionismo ingenuo” (en referencia a Popper, maestro de Lakatos), por lo tanto admite al psicoanálisis como un PIC joven y en desarrollo.

A partir de esta concepción metodológica, se puede evidenciar que tanto Freud como Lacan sostuvieron una epistemología marcada por referentes de la época, lo cual les permitió filiarse en PICs no sólo diferentes, sino, contrapuestos: el programa neuropsicológico y el programa clínico en Freud y el programa fenomenológico-existencial en Lacan. Consecuencia de ello podría pensarse en una frase promulgada por Lacan (1975) hacia el final de su obra: ¡Freud no era lacaniano!

Aparato del lenguaje

“Quien dice “aparato” apunta por lo general a un objeto o, más exactamente, a una máquina que se compone de un dispositivo formado por un ensamblaje de piezas y que está destinado a producir un cierto resultado. Este objeto es artificial –como una prótesis– pero en el sentido anatómico, se designa como aparato al conjunto de órganos que participan en una misma función” (Assoun, 2002, p. 31).

La idea de “aparato” aparece tempranamente en la obra de Freud: aparato del lenguaje, aparato psíquico/anímico, aparato perceptivo, son algunos de los términos con los que irá trabajando a lo largo de su programa de investigación científico (PIC).

En 1891 i, en el escrito sobre las afasias, Freud postula un “Aparato del lenguaje” (sprachapparat) confrontando a los partidarios del localizacionismo cerebral en estos términos:

“Concebimos la organización del aparato central del lenguaje como una región cortical continua que ocupa el espacio entre las terminaciones de los nervios óptico y acústico y de las áreas de los nervios craneales y ciertos nervios motores periféricos en el hemisferio izquierdo” (Freud, 1891, p. 81).

Tanto en su contribución a los estudios sobre La Afasiaii (1891), como en la sección sobre la afasia del texto Parálisis Cerebral Infantil (1897), subraya el carácter no tópico ni localizable de la misma, abogando en favor de una localización global de este “aparato del lenguaje”:

“Hemos rechazado las hipótesis de que el aparato del lenguaje está constituido por centros distintos separados por áreas carentes de función y de que las ideas (recuerdos) que sirven para el lenguaje están almacenadas en ciertas partes de la corteza llamadas centros, mientras que su asociación es atendida exclusivamente por haces subcorticales de fibras” (p. 76), rechazando la suposición de que hubiera “áreas dentro de esta región que estuvieran excluidas de la función del lenguaje en general” (Freud, 1981, p. 81). Por ello, los centros del lenguaje son partes de la corteza que tienen derecho a arrogarse un significado patológico pero ningún significado fisiológico especial (Freud, 1891), es decir que “las relaciones topográficas se mantienen solamente en la medida en que se ajustan a las necesidades de la función” (Freud, 1891, p. 68).

De esta manera, Freud va más allá de lo lesional o de lo funcionalmente acotado en que trabaja el “neurólogo tradicional”, considerando que las afasias se producen cuando las asociaciones de funciones en las que consiste son interrumpidas o destruidas por lesiones de los sistemas no específicamente dedicadas al lenguaje, pero que están al servicio de esta función. Pues la teoría extendida de la afasia que sostiene Freud incorpora las para-afasias, los efectos transitorios de la fatiga, y los trastornos neuróticos del lenguaje (Castel, 2013). “Una vez más, como lo notaba ya Binswanger, Freud ha preferido la aplicación al cerebro de la biología darwiniana, que es necesariamente funcionalista, a la neurología locacionista” (Castel, 2013, p. 6).

Anteriormente a este escrito, Freud ya se hallaba trabajando en torno al lenguaje, como lo muestra su trabajo El Origen del Nervio Acústico (1886), donde adopta el método de Flechsig en el que la observación directa de la trayectoria del haz a partir de cortes de cerebro en fetos, se efectúa no sobre el objeto formado, sino sobre el objeto en desarrolloiii .

Para Freud, en este aparato hay representaciones del cuerpo que no coinciden con la anatomía sino que se vinculan, más bien, con la jerga común de la época. En su Estudio comparativo de las parálisis motrices orgánicas e histéricas de 1888-1893, señala:

“Nos inclinaremos a creer que bajo el término de «lesión orgánica» se esconde la idea de una lesión como el edema o la anemia, que son realmente afecciones orgánicas pasajeras. Por el contrario, afirmo que la lesión de las parálisis histéricas debe ser completamente independiente de la anatomía del sistema nervioso, puesto que la histeria se comporta en sus parálisis y demás manifestaciones como si la anatomía no existiese  o como si no tuviese ningún conocimiento de ella. (…) Toma los órganos en el sentido vulgar, popular, del nombre que llevan: la pierna es la pierna hasta la inserción de la cadera, y el brazo es la extremidad superior, tal y como se dibuja bajo los vestidos” (p. 19).

En el prólogo de J. Stratchey a los Estudios sobre la histeria, publicado cuatro años luego del escrito sobre las afasias, se citan algunos ejemplos que muestran el interés neurológico que tenían en este período las teorías de Freud, a diferencia de las de Breuer, quien intenta llevar a Freud hacia una psicología que prescindiera de la terminología neurológica. Señala Stratchey (1976) que tanto Freud como Breuer adherían a la escuela de Helmholz, donde fueron alumnos de Ernst Brücke. Gran parte de la teoría que subyace en los Estudios deriva de los postulados de dicha escuela, donde todos los fenómenos naturales eran explicables, en última instancia, en función de fuerzas físicas y químicas.

“Breuer (…) declara su propósito de tratar el tema de la histeria en términos puramente psicológicos: «En estas elucidaciones se hablará muy poco del encéfalo, y nada sobre las moléculas. Los procesos psíquicos deben tratarse en el lenguaje de la psicología». (…) Freud aplicaba todas sus energías a la explicación de los fenómenos psíquicos en términos fisiológicos y químicos”. (…) “Su formación inicial y su carrera como neurólogo hacían que se resistiese a aceptar como definitivas las explicaciones psicológicas, y estaba empeñado en formular una complicada estructura de hipótesis que permitieran describir los sucesos psíquicos en términos exclusivamente neurológicos. Este intento culminó en el «Proyecto» y no mucho después fue abandonado; pero hasta el fin de su vida Freud siguió sosteniendo la etiología química de las neurosis «actuales» y creyendo que a la postre se descubriría el fundamento físico de todos los fenómenos mentales. En el ínterin, sólo gradualmente llegó a adoptar la concepción de Breuer en cuanto a que los procesos psíquicos debían tratarse en el lenguaje de la psicología” (p. 18-19).

Hacia el final de su obra dirá Freud (1940): “El futuro podrá enseñarnos a influir directamente mediante sustancias químicas particulares sobre las cantidades de energía y sobre su distribución en el aparato psíquico” (p. 3402).

Es posible observar que ya tempranamente en su obra, el autor sostenía una diferencia entre hardware y software, haciendo referencia al “aparato neuronal” y “aparato del lenguaje”, diferencia que en las filosofías de la mente actual es un lugar común.

La noción de aparato se sostendrá sin muchas variaciones en el este PIC psicoanalítico. Es notable señalar que, en 1940, en su Compendio del Psicoanálisis, vuelve a tomar lo que escribiera en su trabajo sobre las afasias de 1891: “Presumimos que la vida psíquica es la función de un aparato al cual suponemos especialmente extenso y compuesto de varias partes” (p. 3380).

Freud, ¿Machista?

“Mientras la psicología de la conciencia jamás logró trascender esas series fenoménicas incompletas (…) la nueva concepción de que lo psíquico sería en sí inconsciente permitió convertir a la psicología en una ciencia natural como cualquier otra” (Freud, 1940, p. 3387).

¿De dónde extrae Freud sus concepciones sobre este “aparato”? Resulta interesante el planteo que realizan tanto Ernst Mach como Salomon Stricker en Análisis de las sensaciones y Estudios sobre la conciencia, respectivamente. El mundo para Mach consiste solo en nuestras sensaciones y lo que llamamos objetos son construcciones surgidas de sensaciones persistentemente conectadas (Mach, 1925).

“Como resultado de esta forma de pensar, el mundo de la sensación se llego a considerar independientemente del mundo externo, idea que llevó al monismo de sensaciones de Mach: contra el dualismo del mundo (o el cuerpo) y el ego, Mach, provocadoramente clamó por el punto de vista monista en que el mundo consiste solo en nuestras sensaciones”. (Roque, 2007, p. 140).

Cabe señalar la relación que mantenía Freud con Mach y éste con Breuer, desarrollando una teoría del paso de las sensaciones a las representaciones. Juntos postulan la hipótesis Breuer-Mach (Argañaraz, 2012):

“la problemática era cómo se construyen las representaciones a partir de los estímulos exteriores y las sensaciones. El estudio de la cadena: estímulo- percepción-sensación-representación, es llevado adelante por Mach en su análisis de las sensaciones (1886, 1925) con la intención explícita de fundamentar una psicología del conocimiento, del error y la ilusión y, en ultimo termino, de la epistemología” (Argañaraz, 2012, p. 61).

Es conocida la carta 137 que escribe Freud a Fliess, en la que se pregunta:
“¿Crees que en esta casa podrá leerse algún día una placa de mármol que diga así?: Aquí, el 24 de julio de 1895 se le reveló al doctor Sigmund Freud el enigma de los sueños. Por el momento parecen escasas las perspectivas de que ello ocurra”. Acto seguido agrega “leo, empero, las últimas obras psicológicas (Mach: Analyse der Empfindungen, segunda edición; Kroell: Aufbau der Seele, etc.), todas las cuales persiguen objetivos similares al de mi obra” (Freud, 2011, p. 3643).

Mach, en su Análisis de las sensaciones, dialoga con Salomon Strickeriv (1834-1898), patólogo e histólogo austríaco, también discípulo de Brucke, iniciador de la fisiología experimental y autor de varios ensayos sobre la conciencia y las representaciones del lenguajev . Freud trabaja un tiempo en el instituto de patología del Profesor Strickervi , a quien citará luego en conocidos trabajosvii . Su adherencia a los planteos de Stricker está ligada a la representación del lenguaje y a la asociación de representacionesviii . Roland Kuhn (S/F), en el prefacio francés al estudio sobre las afasias señala que hay un concepto de Stricker que Freud toma en este escrito; se trata del concepto de complejos de representación de Stricker (que es, en verdad, de J.F. Herbart) que ha sido, sin duda, importante para Freud, aunque no lo cite explícitamente. Además, “el concepto de conciencia potencial de Stricker prefigura el concepto de preconsciente y una comparación con el estudio de Stricker sobre la conciencia sería de un interés considerable ix” (p. 19).

Cito un párrafo de Los Afectos del Sueño:

“Una atinada observación de Stricker ha atraído nuestra atención sobre el hecho de que las manifestaciones afectivas del sueño no pueden ser comprendidas en el juicio despectivo que al despertar hacemos recaer sobre el contenido manifiesto del mismo. (…) El testimonio de nuestra sensación nos demuestra que dichos afectos son perfectamente equivalentes a los de igual intensidad surgidos en la vigilia. (…) Si tal inclusión parece inaceptable a nuestro pensamiento despierto es porque somos incapaces de evaluar psíquicamente un afecto fuera de su conexión con un contenido de representacionesx ” (Freud, [1900] 2011; p. 626).

Stricker, al igual que Freud, adhiere a la tesis machiana sobre la cadena estímulo-sensación-representación y postula que las sensaciones, precursoras de las representaciones (como el lenguaje) no tienen un centro localizado en el cerebro, sino que se ubican en toda la corteza.

Es notable como Freud intentará aún ligar los dos PICs en los que se hallaba trabajando, el neuropsicológico y el clínico (junto con Breuer), en su célebre Proyecto de Psicología para Neurólogos (1985). Paul-Laurent Assoun (2001) no vacila en llamarlo barroco epistemológico “en la medida en que la epistemología freudiana actúa en las fronteras de tradiciones dispares” (p. 118), .considerándolo como el encuentro de diferentes componentes que confluyen en algo “profundamente original”.

Ninguna de estas menciones resta originalidad a la teoría de base empírica de Freud (Stratchey, 1976). Señala Assoun (2001) que la anatomía continuará siendo la base de investigaciones topológicas pero es la clínica la que le servirá al padre del psicoanálisis para exhibir las leyes anatomo-fisiológicas, ocupando el terreno de la experimentación clásica.

Desde la perspectiva de Lakatos, se demuestra no solo la adhesión de Freud a un programa de investigación antecedente, sino la aceptación de los mismo presupuestos filosóficos y ontológicos monistas propios de una concepción naturalista de la ciencia y en franca pugna con los presupuestos filosóficos y la ontología dualista del PIC fenomenológico-existencial en el cual Lacan inicia sus investigaciones (Suen, 2013).

Aparato del lenguaje Lacaniano

«La théorie lacanienne fait du langage le présupposé de la psychanalyse: c’est tout la structure du langage que l’expérience analytique découvre dans l’inconscient. Il s’agit de radicaliser ce constat élémentaire et fondamentale que l’analyse est expérience de parole» (Assoun, 2011, p. 38).
Tomando esta cita como referencia, se partirá de una temprana distinción que realiza Jacques Lacan respecto del PIC de Freud sustentándose, paradójicamente, en la invención freudiana del aparato del lenguaje.

En el seminario sobre Las Psicosis (1955-1956), plantea:
“La relación de exterioridad del sujeto con el significante es tan cautivante que todos los cínicos de algún modo la enfatizaron. (…) El síndrome de acción exterior, por ingenuo que parezca, subraya bien la dimensión esencial del fenómeno, la exterioridad del psicótico respecto al conjunto del aparato del lenguaje. A partir de aquí se plantea la cuestión de saber si el psicótico entró verdaderamente en el lenguaje” (p. 359-360)

“(…) ¿Cuál fue en el caso del presidente Schreber la significación que fue abordada así? ¿Qué significante fue llamado entonces, cuya falta produjo una tal conmoción en un hombre que hasta ese momento se había acomodado perfectamente al aparato del lenguaje?” (p. 404).
Diez años más tarde, en libro 14 del Seminario (1966-1967), insiste con esta frase:

“Cogito ergo sum, es allí que podemos retomar la intuición como captar el contenido que depende de la estructura del aparato del lenguaje. No olvidemos ciertas funciones en las que el sujeto no se encuentra simplemente en posición de ser agente sino en posición de sujeto, en tanto que el sujeto está más que interesado, forzosamente determinado por el acto del que se trata” (Lacan, 1966-1967, p.45).

Puede observarse cómo el aparato del lenguaje freudiano no cobra sentido en el modo de expresión que utiliza Lacan, quien toma palabras textuales de Freud incluyéndolas en su propia perspectiva epistemológica.

“Freud se da cuenta de lo inútil que sería el intento de recrear todas las categorías del lenguaje esquematizando las diferentes maneras en que se organizan los elementos, atomísticamente concebidos, de la realidad. El esquema espacial de las conexiones conceptuales no sería más que un doble de las exigencias del juego del pensamiento, en el sentido más general. Vemos que Freud desiste y que su esquema ya no ofrecerá utilidad, salvo la de indicarnos que allí donde hay relación de lenguaje tiene que haber como sustrato un aparato neuronal determinado. (…) La tranquilidad con que abandona la tarea, a la que vemos consagrarse a más ingenuos, es por sí sola una enseñanza” (Lacan, 1954-1955, p. 211).

En La instancia de la letra, Lacan (1957) trae a colación que “el inconsciente es el discurso del Otro” (p. 491) otorgando con ello algunas claves para ligar la teoría psicoanalítica freudiana con el existencialismo Heideggeriano. Abbagnano (1978) respecto de la obra de Lacan, señala que “las estructuras cotejables en las más diversas actividades del hombre, sobre todo en la simbólica (o lingüística) que es la dominante, se atribuyen al Inconsciente que, precisamente por ser tal, es el Otro del hombre. Otro que luego es el Logos, es decir, la revelación del Ser en el lenguaje” (pp. 789).

El aparato del lenguaje en Lacan, “no se confunde con las diversas funciones somáticas y psíquicas que le estorban en el sujeto hablante. Por la razón primera de que el lenguaje (…) preexiste a la entrada que hace en él cada sujeto en un momento de su desarrollo mental” (p. 463). “Es con la aparición del lenguaje como emerge la dimensión de la verdad” (p. 491).

En Función y campo, señala que, “el momento en que el deseo se humaniza es también el momento en que el niño nace al lenguaje” (Lacan, 1953, p. 306). Subraya Roudinesco que en este escrito Lacan fusiona Saussure y Heidegger privilegiando lo simbólico e insistiendo en la cuestión del sentido del ser a través de la revelación verdadera de la palabra y el lenguaje (Roudinesco, en Argañaraz, 2012).

En La dirección de la cura liga al sujeto con el Logos heideggeriano:
“Aquí se inscribe esa Spaltung última por donde el sujeto se articula al Logos, sobre la cual Freud al empezar a escribir, nos daba en el extremo último de una obra a la dimensión del ser, la solución del análisis "infinito", cuando su muerte puso en ella la palabra Nada” (Lacan, 1958, p. 622).

Sin embargo, no sólo en sus escritos iniciales pueden verse las huellas de su filiación fenomenológico-existencial. “Aparato no hay otro que del lenguaje”, señala Lacan en el Seminario 20, “así se apareja el goce en el ser que habla. Es lo que dice Freud si corregimos el enunciado del principio del placer. Lo dijo así porque otros habían hablado antes que él, y porque era la manera que le pareció más audible” (Lacan, 1972-1973, p. 69-70). “El lenguaje (…) es tal que, como ven, nunca en ningún momento puedo hacer nada sin deslizarme de nuevo hacia ese mundo, ese supuesto de una sustancia impregnada de la función del ser” (Lacan, 1972-1973, p. 57).

Aunque no sea objeto del presente trabajo, es significativo señalar que “los conceptos de Sujeto, la distinción de Sartre entre ‘Je’ y ‘Moi’, alienación, Goce, ‘falta en ser’, ‘Nada’, ‘Ser’, ‘esencia’, Verdad y Saberxi (Aleman, J. 2003; Tavakian, E., 1998; Adam, R. 2007) y muchos otros términos no son ‘vocabulario propio’ de Lacan. Son ‘vocabulario antecedente’ que él reformula fundiéndolos con los términos freudianos. Son los términos de referencia de este programa- o tradición en el sentido amplio, lo que Lacan llama en algún momento la ‘filosofía del ser’ aludiendo a la obra de Heidegger” (Argañaraz, 2012, p. 80-81).

En palabras de Argañaraz (2012) Lacan pasa de “una fenomenología de la apariencia, a una revelación del ser en la palabra heideggeriana” (p. 88).

 

Discusión

En la actualidad, algunos estudiosos del lacanismo sostienen que los conceptos referidos al lenguaje en Freud, de inspiración psicofisiológica, tales como el sistema neuronal o la representación, sirvieron como baranda contra las primeras desviaciones o, como muralla al esoterismo de Jung (Cottet, 2012, p. 8). En discrepancia con esta postura, lo que se intenta reflejar en el presente artículo es en que el aparato del lenguaje es primordial para Lacan porque en él se inscribe la revelación del ser. Las representaciones ya no guardan relación con las sensaciones, como en Freud (para quien las experiencias de las sensaciones determinan las representaciones), sino que están determinadas por los significantes que el sujeto recibe del Otro, significantes que determinan su experiencia. Tanto para Freud, como para Mach, son las sensaciones del mundo exterior las que forman los 'complejos de representaciones' entre los que se encuentra el lenguaje:

“Desde la tesis de 1932, el Entwurf, proyecto, freudiano y lacaniano son epistemológicamente opuestos: la arquitectura teórica del psicoanálisis freudiano intenta satisfacer los requerimientos de una ciencia natural de base empírico clínica; y la arquitectura teórica del psicoanálisis de Lacan intenta satisfacer los requerimientos del programa fenomenológico existencial y la ‘filosofía del ser’ Heideggeriana” (Argañaraz, 2012, p. 89-90).

 

Referencias:                                                                                      

  1. Abbagnano, N. (1956). Historia de la filosofía. Vol. 3. Edición. Barcelona: Hora, S.A. 1994.
  2. Anzieu, D. (2008). El autoanálisis de Freud y el descubrimiento del psicoanálisis. Tomo 1. México D.F.: Siglo XXI Editores, S.A.
  3. Argañaraz, J. (2012). Ruptura y continuidad de Lacan con Freud (desde Lakatos). Córdoba: Universidad Nacional de Córdoba.
  4. Assoun, P-L. (2001) Introducción a la epistemología freudiana. Bs. As.: Siglo XXI Editores.
  5. ----------------- (2002). La metapsicología. Bs. As.: Siglo Veintiuno Editores.
  6. ----------------- (2011). Lacan. Collection Encyclopédique Que sais-je? France: PUF Presses Universitaires de France.
  7. Castel, Piere-Henri. Del «aparato psíquico» freudiano a los primeros esquemas topológicos de Lacan: ¿Ruptura o continuidad? Recuperado el día 24 de Mayo de 2013 de: http://www.teebuenosaires.com.ar/biblioteca/biblio_02.pdf
  8. Cottet, S. (2013). Un bien-decir epistemológico. Virtualia Nº26. Revista digital de la Escuela de la Orientación Lacaniana. Año XII. Recuperado de: http://virtualia.eol.org.ar/
  9. Freud, S. (1891). La Afasia. Recuperado el 20 de Febrero de 2013 de:  http://es.scribd.com/doc/55257139/S-freud-La-Afasia-1891-OCR-ClearScan
  10. ----------- Prólogo de James Stratchey a los Estudios sobre la histeria (1976). En Obras completas. Volumen 2. Bs. As.: Amorrortu editores (1996).
  11. ----------- (1915) Apéndice B en Lo inconsciente. Obras completas. Vol. 14. (1914-16). Bs. As.: Amorrortu editores (1990).
  12. ----------- Obras completas. Bs. As.: El Ateneo. 2011. Traducción de Luis López-Ballesteros y de Torres.
  13. ---------- (S/F) Contribution à la conception des aphasies: une étude critique. Préface de Roland Kuhn. Paris: PUF (Presses Universitaires de France). Recuperado de:http://www.amazon.fr/dp/2130415474/ref=rdr_ext_tmb
  14. Lacan, J. (1953) Función y campo de la palabra y del lenguaje en psicoanálisis. En Escritos 1. Bs. As.: Siglo XXI Editores. 2002.
  15. -----------  (1957) La instancia de la letra en el inconsciente o la razón desde Freud en Escritos 1. Buenos Aires: Siglo XXI Editores. 2002.
  16. ----------- (1954-1955). El Seminario. Libro 2. Bs. As.: Paidos. 2006.
  17. ----------- (1955-1956). El Seminario. Libro 3. Bs. As.: Paidos. 1993
  18. ----------- (1966-1967). La lógica del fantasma. Seminario 14. (Inédito). Versión íntegra.
  19. ----------- (1972-1973). El Seminario. Libro 20. Bs. As.: Paidos. 2006.
  20. Mach, E. (1925). Análisis de las sensaciones. Madrid: Daniel Jorro Editor.
  21. Suen, P. (2013) Acerca de Ruptura y continuidad de Lacan con Freud (Desde Lakatos). Revista Borromeo Nº 4. Recuperado de: http://borromeo.kennedy.edu.ar/Artculos/SuenlibroCruzArga%C3%B1araz.pdf

 

Artículo recibido en: 04/10/2013
Manejado por:
Editor jefe Ajayu
Aceptado en: 12/02/2014

No existen conflictos de intereses


 

Notas

1 Investigadora en SeCyT-UNC, Facultad de Psicología. Córdoba, Argentina. eugeniabellone@hotmail.com

i En el original: Zur Auffassung der Aphasien. Eine kritische Studie (1891). Traducida al inglés en 1953 por E. Stengel con el título de On Aphasia, a Critical Study. En el presente trabajo se hará referencia a dicha traducción.

ii Recordemos el concepto de localización cerebral que comienza con Franz Joseph Gall en 1825. Parte de la hipótesis de que el cerebro se compone de tantos sistemas particulares como funciones particulares cumple. Broca en 1861 definió la correlación precisa entre los trastornos del lenguaje y una región del cerebro, este trabajo es completado por Wernicke en 1874. Como conclusión de estos trabajos resulta que las grandes regiones del espíritu corresponden a las grandes regiones del cerebro. En 1891, Freud define una posición diferente que consiste en refutar las localizaciones parceladas de la función del lenguaje en beneficio de una localización global y articulada de lo que Freud denominó entonces “aparato del lenguaje”.

iii “La découverte par Freud d’un myelinisation vérifiable de la voie auditive dans le système nerveux central, au course des 6 et 7 mois du développement embryonnaire est devenue depuis quelque temps d’une grande actualité. (…) Ce fait joue certainement un très grande rôle pour la compréhension de la plus jeune enfance et de l’apprentissage du langage”. (Préface de Roland Kuhn en contribution à la conception des aphasies ; S/F ; p. 18)

iv Salomon Stricker, élève de Brücke, chez qui Freud a également travaille dans le domaine expérimental, a publié en 1880 et 1883 trois études consacrées a La conscience, aux Représentations de langage et a l’Association des représentations. Freud cite la deuxième dans son étude sur l’aphasie et les deux autres uniquement dans la bibliographie de la première édition de L’interprétation des rêvés (1900).

v Entre ellos: “Estudios sobre la conciencia”, “Estudios sobre la asociación de representaciones”, “Del lenguaje y la música”

vi Allí realiza vanas investigaciones sobre las glándulas acinosas en 1878 y luego sobre la función glandular en relación con el aparato circulatorio en 1884 (Anzieu, D.; 2008).

vii Por ejemplo en la Interpretación de los Sueños y en La Afasia

viii «El sueño no consiste pura y exclusivamente en engaños; por ejemplo, si en sueños tenemos miedo de ladrones, estos son por cierto imaginarios, pero el miedo es real»; (…) lo cual nos plantea este problema: ¿Qué parte de los procesos psíquicos del sueño puede ser real, vale decir, reclamar que se la clasifique entre los procesos psíquicos de la vigilia? (Stricker, S.; 1879 en Freud, S.; 2011, pp)

ix “Toutefois celles-ci offrent intérêt supplémentaire en raison d’un autre concept que nous rencontrons dans l’étude sur l’aphasie, même si Stricker n’y est pas mentionné. Il s’agit du concept de “complexes de représentation” de Stricker (…) [qui] ont, sans doute, été importants pour Freud. (…) Le concept de “conscience potentielle” de Stricker préfigure le concept de “préconscient” et une comparaison avec l’étude de Stricker sur la conscience serait d’un intérêt considérable » (Kuhn, en Freud, S/F, p. 19). El destacado es del autor. La traducción es mía.

x Véase Bellone Cecchin, M. E. (2012) A propósito de la tragedia griega rupturas y convergencias en torno a la teoría freudiana y lacaniana de los afectos. En Actas del XII Encuentro Argentino de Historia de la Psicología, la Psiquiatría y el Psicoanálisis  Volumen 13, pp. 7-16. ISSN 1851-4812.

xi “Los últimos 5 términos, serían considerados por Freud, gigantescos “extravíos  metafísicos” según el manifiesto del Círculo de Viena” (Aragañaraz, 2012, p. 81).

 

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