Querido editor,

La enfermedad por coronavirus (COVID-19) es una enfermedad infecciosa causada por el virus SARS-CoV-2. La mayoría de las personas infectadas por el virus experimentarán una enfermedad respiratoria leve a moderada y se recuperaron sin requerir tratamiento especial. Sin embargo, algunas enfermaron gravemente y requirieron atención médica. La mayoría de las personas padecen enfermedades subyacentes y tienen mayor probabilidad de desarrollar una enfermedad grave. Esta infección atacó principalmente a la población adulto mayor y adulto maduro ¹.

Cabe agregar, que una buena higiene de manos y uso de elementos de protección personal ayudan a reducir la propagación de la infección. Asimismo, se debe evitar el contacto estrecho con cualquier persona que presente signos de afección respiratoria ².

Ahora bien, enfermarse es una situación a la que todo el mundo está expuesto, sin embargo, con el conocimiento adecuado, prevención y cuidado personal. Se ayuda a mitigar esta problemática; aportando a la salud, de manera que reduce costos para el estado, reduce la incidencia en casos de COVID-19 y ayuda al bienestar de la población en general. Por otro lado, se dice que la proteína se reactiva se activa cuando hay un proceso inflamatorio infeccioso en el cuerpo; es liberada por el hígado y actualmente se ha demostrado que aquellas personas con síntomas respiratorios y con niveles elevados de PCR en sangre tienen un estrecho vínculo con COVID-19 ³. Según clínicas por tu salud, manifiesta la importancia de la PCR para ayudar a frenar el SARS COV2; esta técnica en concreto consiste en una reacción de la cadena de la polimerasa, básicamente esta enzima se encarga de construir el ADN copiando el patrón. Lo que permite detectar si existe o no un ADN específico en este caso el del COVID-19 ⁴.

Tomando como referencia se rescatan los resultados encontrados en el manuscrito de Alejandra Regina Maceda Maidana (publicado en el volumen 19 de esta revista) que logro identificar que la mayoría de los casos presentados en el Alto fueron adultos mayores y adultos maduros, de igual manera la mayoría de los fallecidos se presentaron en estos grupos; además se resalta que las características sociodemográficas influyen demasiado, comprometiendo la salud del paciente. Ya que a mayor altura mayor presión, dando gravedad a la enfermedad. Además, se logró identificar que la concentración de PCR en los adultos maduros y adultos mayores fue mayor a 23, 4 mg/L ⁵.

A lo anterior le permite concluir que a medida que la edad incrementa los pacientes tienen mayor riesgo de fallecer, como se observó en los grupos de adulto mayor y maduro, que presentaron 25 defunciones y 31 defunciones respectivamente.

Es de suma importancia de los resultados que arrojó el autor de su estudio, ya que muestra la importancia de la PCR en dichos casos en el hospital del alto, menciona y compara las edades encontrando la relación y afectación de del COVID-19 en estas; además el tener en cuenta la altura, posición geográfica y la presión a nivel del mar agranda el interés para indagar una misma situación en casos de COVID-19 presentados en poblaciones a menos altura o a nivel del mar.

Finalmente, el interés por indagar sobre la PCR y su nivel de compromiso en pacientes con SARS COV2, permite al lector, investigador y estudiantes conocer ideas, desempeño de otros, estrategias de investigación. Con temas muy conocidos, pero poco tratados o que no se les da la importancia suficiente para profundizar en ello ^5,4.