RESEÑAS

Cuando amar era pecado:
sexualidad, poder e identidad entre los sodomitas coloniales (virreinato del Perú, siglos XVI-XVII)
La Paz: Plural Editores, 2017

Molina, Fernanda

Vladimir Roger Torres Monasterios
E: mail: warang_2002@hotmail.com

Sexualidad y política: la sodomía y su potencia desestructuradora en el orden colonial del virreinato del Perú

La historiadora argentina Fernanda Molina presenta un trabajo enmarcado en los estudios de género y la investigación histórica. Cuando amar era pecado. Sexualidad, poder e identidad entre los sodomitas coloniales (virreinato del Perú, siglos XVI-XVII) articula ambos campos de estudio para, en palabras de la autora, desmitificar prejuicios y deconstruir identidades sexuales osificadas que se nos presentan como "naturales" pero que, a la luz de una revisión de documentos históricos, son producto de un pasado colonial complejo respecto a la regulación de la sexualidad masculina. Las prácticas sexuales ejercidas por los hombres sodomitas en el Virreinato del Perú son leídas desde diversas dimensiones. El libro parte de la premisa de que la sodomía no puede entenderse como un fenómeno simple sino como expresión de la sexualidad atravesada por distintas contradicciones (p. 22). El objetivo de la autora es reflexionar, desde una perspectiva histórica, sobre los antecedentes coloniales de diferentes estereotipos y conceptos relacionados al ejercicio de la sexualidad masculina que perviven hasta hoy (p. 25).

La obra se encuentra dividida en cinco capítulos. El primero: "Sodomía", nos introduce a las ideas de Santo Tomás de Aquino y otros moralistas que fundamentaron filosóficamente la

naturaleza pecaminosa de la sodomía. El placer corporal, sobre todo entre personas del mismo sexo, es entendido como un vicio contra natura, la especie más degradante de lujuria (p. 32). En el segundo capítulo: "Justicia", se hace una exploración sistemática al corpus de leyes coloniales desentrañando a la sodomía como crimen perseguido y castigado por el entramado burocrático del imperio español. En el tercer capítulo: "Poder", se exploran las conflictivas relaciones de poder que atravesaron la colonia, explorando cómo la sodomía fue utilizada para desprestigiar e incluso eliminar adversarios políticos; asimismo, el libro da cuenta de la capacidad que tenían ciertos individuos para evadir la justicia colonial gracias al lugar que ocupaban en la jerarquía social. El caso de los clérigos es ilustrativo para entender la valoración de la sodomía en el seno de una sociedad que favorecía las desigualdades. A continuación, en el capítulo "Religión", se exploran los esfuerzos de la iglesia católica para llevar a cabo un control moralizante sobre sus fieles en el contexto internacional de la reforma luterana; el pasado colonial es descrito como licencioso, es decir, la sexualidad no fue tan restringida y la sodomía fue rechazada abiertamente solo cuando existieron demostraciones públicas de su práctica. En ese entendido, los intentos de reforma moral de la iglesia católica fueron resistidos, así se explica la emergencia del tribunal de la Inquisición y la brutalidad con la que intentó ajustar las costumbres de la comunidad religiosa. Finalmente, en el capítulo "Identidad", la autora explora la subjetividad de los sodomitas virreinales, una cuestión pre-constitu-tiva de lo que ahora conocemos como identidad sexual (p. 141). Si bien la subjetividad de los sodomitas estaba condicionada por su posición social, Molina deja constancia de los vínculos afectivos existentes entre estos tal y como prueban los procesos criminales. La sodomía era entendida como crimen y pecado, pero era practicada por una especie de subcultura donde se daba rienda suelta al deseo. Ese deseo tenía en algunas ocasiones la potencia de subvertir las relaciones sociales dominantes, pues los testigos que concurrían en los juicios contra los sodomitas, se escandalizaban porque clérigos o señores españoles, intimaban, en trato y palabra, con sus sirvientes indígenas, negros o moriscos. Es decir, la erótica tuvo la capacidad de, en la esfera privada de las relaciones íntimas, nivelar socialmente a hombres que provenían de estratos sociales distintos, situación poderosamente llamativa considerando el carácter estamental de la sociedad colonial. Esta es una de las conclusiones más poderosas del trabajo de Molina, entender la sodomía como dimensión corporal y erótica capaz de rebasar las relaciones sociales basadas en el origen étnico, el estatus o las configuraciones de género (p. 168).

Cuando amar era pecado es un trabajo sugerente, pese a que la propia autora reconoce los límites de su trabajo al advertirnos sobre la poca documentación judicial existente en archivos históricos. Uno de sus aspectos más interesantes es el rastreo de algunos de los prejuicios más enraizados en el sentido común de nuestras sociedades atravesadas por relaciones patriarcales de dominación: la atracción entre dos hombres implica necesariamente una disminución de su masculinidad. El estereotipo del "marica" que deshonra su hombría tiene sus orígenes en la filosofía de Santo Tomás, las leyes de indias y el imaginario colonial que entendía que el sexo tenía una única función natural: la reproducción. Por tanto, las relaciones afectivas entre hombres no podían ser toleradas, al menos esa era la intención de la reforma moral que intentó imple-mentar la iglesia católica en las colonias españolas luego del Concilio deTrento. Pero el placer es también entendido como fuente de transgresión, no solo a la moral imperante, sino también a las relaciones sociales establecidas. En este sentido, el libro de Molina es de un gran valor para quienes se interesen por los estudios de género y por la deconstrucción de las identidades sexuales dominantes. La obra está influenciada por la Historia de la sexualidad de Mi-chel Foucault, pero también difiere de esta al concebir al sodomita como un tipo de identidad transitoria, imposible de ser fijada en las categorías de lo normal y lo anormal. El sodomita virreinal, para Molina, se constituye en uno de los primeros antecedentes de la diversidad sexual moderna.