INTRODUCCIÓN
A lo largo del siglo XX, los esfuerzos de integración regional en América Latina se originaron por motivos económicos y políticos. Comprender esos procesos implica examinar tanto las dinámicas del entorno internacional, como los factores económicos y políticos internos que influyeron en los países latinoamericanos para implementar esas decisiones.
Este impulso hacia la integración regional reflejó la búsqueda de soluciones a los desafíos económicos compartidos por los países latinoamericanos. Las alianzas regionales se configuraron como respuestas estratégicas a la necesidad de superar las limitaciones de los mercados nacionales y reducir la dependencia económica externa. Kahler (1997), destaca la importancia de entender esas iniciativas dentro de un contexto más amplio de estrategias económicas, particularmente marcadas por la sustitución de importaciones, cuyo modelo económico definió la evolución del regionalismo de América Latina durante el siglo XX.
Para Morales (2007), la caracterización de los diferentes acuerdos de integración económica regional en América Latina (Asociación Latinoaméricana de Libre Comercio (ALALC) - Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI), Mercado Común Centroamericano (MCCA) y la Comunidad Andina de Naciones (CAN), no puede ser entendida si no se analiza tanto el contexto mundial, como las estrategias de crecimiento económico regional, las cuales implementaron y rodearon la conformación de dichos bloques regionales.
Hoy, los países compiten por bloques económicos, ninguno con estrategias de empoderar sus sectores en el mercado internacional, puede salir sólo al mercado, América del Norte, La Unión Europea, El Mercado Común Centroaméricano, El Mercosur, etcétera, son ejemplos palpables del proceso de integracion comercial y competencia entre bloques económicos.
En el ámbito académico, existen infinidad de investigaciones relacionadas con el Tratado de Libre Comercio Canadá, Estados Unidos y México; muchas más vinculadas con Europa, pero muy pocas relacionadas con países de América Latina, es por ello que esta investigación aporta nuevos conocimentos al proceso de integración de la CAN, en particular, nos ocupa el tema de la salida de Venezuela de dicho proceso de integración comercial.
Contextualizado a este estudio, en un proyecto realizado por Díaz et al. (2020), se analizó la relación comercial entre Venezuela y los países de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), ello durante el periodo 2007- 2016, aunado ello, se revisaron los posibles efectos derivados de la crisis en Venezuela. En dicha investigación se muestra la evolución histórica de la CAN y se realiza una revisión de las teorías de comercio internacional que sirven como soporte para la investigación. Se realiza una caracterización de tipo descriptivo del comercio entre Venezuela y los países de la CAN en dos periodos, el primero de 2007 a 2012, y el segundo de 2013 a 2016. Paso siguiente se estimaron ocho modelos econométricos de corrección de errores vectoriales (VEC), dos para cada país de la CAN relacionando las importaciones y exportaciones, desde y hacia Venezuela. Los resultados del análisis descriptivo, como el de los modelos multivariados, sugieren posterior al año 2009 una importante disminución del comercio bilateral entre Venezuela y los países de la CAN , presentándose caídas de hasta el 90% en el segundo período, lo que apoya la teoría de una posible desviación del comercio generada por la crisis en Venezuela.
El proyecto de Díaz et al. (2020), aporta información valiosa para comprender las repercusiones económicas de la salida de Venezuela de la CAN, un tema que cobra especial relevancia en el presente estudio. Esta evidencia empírica pone en tela de juicio la efectividad de la integración regional dentro de la CAN, al menos en términos comerciales, y abre la puerta a nuevas investigaciones sobre los factores que determinan el éxito o fracaso de los bloques regionales.
De igual forma, entre los referentes teóricos del estudio se encuentran la Integración económica como motor inicial de la integración regional, que puede definirse como un proceso por el cual los Estados nacionales se mezclan, confunden y fusionan voluntariamente con sus vecinos, de modo tal que, pierden ciertos atributos fácticos de la soberanía, a la vez que adquieren nuevas técnicas para resolver conjuntamente sus conflictos (Haas, 1967).
A esta definición clásica de Ernst Haas, debe agregarse que lo hacen creando instituciones comunes permanentes, capaces de tomar decisiones vinculantes para todos los miembros.
Otros elementos -el mayor flujo comercial, el fomento del contacto entre las elites, la facilitación de los encuentros o comunicaciones de las personas a través de las fronteras nacionales. (Malamud y Schmitter, 2006).
En este sentido, la salida de la CAN y el ingreso al Mercosur marcaron un cambio significativo en la estrategia regional de integración económica de Venezuela. Tradicionalmente, la integración regional tuvo objetivos sobre todo económicos, es decir, ampliar el mercado a los productores locales para lograr economías de escala y promover el crecimiento económico. La nueva estrategia de Venezuela apuntó a convertir la integración regional en un instrumento para ejecutar su agenda política. El gobierno venezolano en carta enviada a la Secretaría de la CAN, explicó que la decisión de separarse del acuerdo regional obedecía los siguientes argumentos:
Las negociaciones y firma de los Tratados de Libre Comercio (TLC) de Colombia y Perú con los Estados Unidos, crearon un cuerpo legal que pretende asimilar la normativa de los Tratados de Libre Comercio a la Comunidad Andina, y que los mismos privilegian los intereses particulares sobre los intereses de los pueblos, propulsan una injusta distribución de la riqueza y poseen la misma concepción neoliberal del ALCA (Sainz, 2007).
En la mirada de diversos autores, la ideología izquierdista de Chávez, su desconfianza en la economía de mercado y su enfrentamiento con los empresarios locales y de Estados Unidos, impactaron negativamente los flujos comerciales, ocasionando pérdidas económicas. En tal sentido, autores como Sainz, (2007), afirman que “la decisión de Venezuela de retirarse de la CAN se hizo de manera inconsulta y tajante, sin tomar en cuenta a empresarios, partidos políticos y sociedad civil. Ni siquiera se consultó al poder legislativo”.
En este marco, Chávez cambiaría los fundamentos de la política exterior venezolana al enfrentarse con Estados Unidos, apoyar la democracia participativa, el socialismo y la lucha antiimperialista, clamar un mundo multipolar y desarrollar una diplomacia de confrontación que generaría fuertes tensiones con Estados Unidos y otros países de la región, además de intervenir abiertamente en los asuntos internos de otros países latinoamericanos.
En síntesis, para Chávez la integración regional no se limitaba a plantear una alianza comercial, sino que era en un instrumento para promover la integración no capitalista de los pueblos, el socialismo y el enfrentamiento con Estados Unidos, utilizando las afinidades ideológicas como motor dominante de la integración.
La salida de Venezuela de la CAN en 2006, tuvo varios impactos tanto en la organización como en la dinámica regional en América del Sur. A continuación se destacan algunos de los impactos clave:
Debilitamiento de la CAN: La salida de Venezuela debilitó la CAN como organización regional. Venezuela era uno de los miembros fundadores y tenía un papel importante en el organismo. Su retiro redujo la membresía y, por lo tanto, la capacidad de la CAN para promover la integración económica y política en la región andina.
Impacto en el comercio y la economía: La salida de Venezuela afectó las relaciones comerciales en la región andina. Venezuela era un mercado importante para otros miembros de la CAN, su partida tuvo repercusiones en el comercio y las exportaciones. Esto generó desafíos económicos para los países restantes.
Búsqueda de nuevos acuerdos comerciales: Tras la salida de Venezuela, algunos países de la CAN buscaron establecer acuerdos comerciales bilaterales o multilaterales con otros países o bloques regionales. Esto incluyó acuerdos con la Unión Europea y la exploración de relaciones comerciales fuera de la CAN.
Para contextualizar dicha situación, es preciso comprender la naturaleza de la Comunidad Andin. La CAN se estableció como un mecanismo de integración subregional mediante el Acuerdo de Cartagena, fue firmado el 26 de mayo de 1969 por Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia y Chile. Su objetivo principal fue promover el bienestar y el desarrollo equilibrado de los habitantes de los países miembros, ello a través de la integración y cooperación económica y social. Cabe destacar que Venezuela se unió a la CAN el 13 de febrero de 1973, consolidando los esfuerzos por fortalecer la colaboración regional.
La decisión de Venezuela de salir de este marco de integración regional, liderada por el entonces presidente Hugo Chávez, tuvo repercusiones en la integración económica, afectó las relaciones comerciales y la cooperación regional. Aunque la salida de Venezuela debilitó temporalmente la cohesión de la CAN, también generó oportunidades para que los países miembros restantes, como Colombia, Ecuador, y Perú, buscaran nuevas alianzas y acuerdos bilaterales.
La importancia de realizar un análisis de este proceso, radica en la necesidad de comprender cómo un cambio en la membresía de una organización regional puede alterar las dinámicas económicas y estratégicas a nivel continental. La salida de Venezuela de la CAN generó una serie de desafíos y oportunidades tanto para los países miembros restantes, como para la propia Venezuela. Además, repercutió en la forma en que otros bloques y actores regionales, como el Mercado Común del Sur (MERCOSUR) y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), interactuaron en el escenario económico de América del Sur.
Perspectiva económica del retiro de Venezuela de la CAN
El anuncio de la retirada de la CAN se hizo cuando Venezuela ejercía la presidencia pro tempore, lo cual le permitió bloquear algunas iniciativas urgentes, como la convocatoria de una cumbre presidencial. Con su estrategia provocó el efecto no deseado: hacer tambalear todo el tablero geoestratégico sudamericano, y no sólo el de la CAN, afectó igualmente al Mercado Común del Sur (Mercosur).
El presidente Chávez abrió la puerta a la esperanza de que los flujos comerciales se mantuvieran abiertos a través de acuerdos bilaterales. Más tarde, en abril de 2015, se suspendió de manera indefinida la aplicación de toda la normativa andina relativa a la Asociación de Estados del Caribe (AEC).
Exportaciones y crecimiento económico en la CAN
El comercio exterior juega un papel fundamental en la economía de la CAN. Las exportaciones de bienes y servicios representan un porcentaje significativo del Producto Interno Bruto (PIB) de cada uno de los países miembros. En 2022, las exportaciones totales de la CAN alcanzaron los 163 mil MdD, lo que representó un crecimiento del 19,5% con respecto a 2021. Las principales exportaciones de la CAN son productos primarios como petróleo, gas natural, minerales y productos agrícolas. Sin embargo, en los últimos años, la región experimentó una diversificación de sus exportaciones, con un incremento en las exportaciones de productos manufacturados y servicios.
Para los economistas ha crecido el interés en el tema de la relación entre el crecimiento de las exportaciones y el crecimiento de la producción agregada (Reyes y Jiménez, 2012). Entre los argumentos más relevantes a favor de la hipótesis de que las exportaciones influyen positivamente en el producto agregado, más allá de su participación contable, pueden mencionarse los siguientes: 1) a través de mejoras de eficiencia por incremento de la competencia (Balassa, 1978); 2) relaja la restricción de divisas para permitir incrementos en las importaciones de bienes de capital e intermedios (McKinnon, 1964); 3) aumenta la calidad de los productos por contacto con los consumidores del resto del mundo; 4) mediante el incremento del empleo y salarios reales, si la economía cuenta con exceso de mano de obra; 5) a través de una mayor productividad por la explotación de las economías de escala en la producción (Helpman y Krugman, 1987); y 6) por la mayor difusión de conocimiento técnico, que permite incrementar la tasa de formación de capital y el cambio tecnológico (Grossman y Helpman, 1991).
En los últimos años los países de la CAN han experimentado una mayor apertura económica, ello a través de la eliminación de barreras arancelarias y no arancelarias, procesos de integración económica, privatización de las principales compañías estatales y, políticas y programas económicos; sin embargo, su participación en el mercado internacional sigue siendo mínima, en el 2001 fue alrededor de 0.8% (CEPAL, 2014). Los recursos naturales siguen desempeñando un papel importante en el comercio exterior de los países miembros de la CAN.
Flujo de inversiones y comercio en la CAN
La inversión directa extranjera (IDE) se ha convertido en un pilar fundamental para el crecimiento económico de los Países, particularmente por sus efectos en el impulso del comercio, la generación de empleo y la elevación de la competitividad de los Países en el largo Plazo. De acuerdo con la Decisión 291 de la Comunidad Andina, toda inversión directa o de inversionistas subregionales (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú) debe ser registrada en el organismo competente en moneda libremente convertible (Carranza y Huaccha, 2018). A lo largo de los años no todos los países miembros de la CAN han recibido los mismos flujos de inversión extranjera directa.
La evolución del comercio intracomunitario en la CAN refleja un proceso de integración gradual, pero significativo. Desde la eliminación de aranceles y restricciones en 1993, hasta la adopción de medidas para facilitar el comercio y la armonización de normas, la región ha avanzado en la construcción de un mercado ampliado. En este sentido, el crecimiento sostenido del comercio intracomunitario, superior al de las exportaciones a terceros países, es un indicador del éxito de la integración. Este dinamismo se explica por la eliminación de barreras comerciales, la complementariedad de las economías andinas y la mayor competitividad de las empresas locales.
Sin embargo, aún existen desafíos para fortalecer la integración comercial. La persistencia de obstáculos al libre flujo de bienes, la falta de infraestructura adecuada y, la asimetría entre los países miembros, son algunos de los aspectos que deben abordarse.
Siguiendo el hilo conductor, cabe considerar que en el año 2009, tanto el comercio Intracomunitario con terceros países fue afectado en términos de volumen y precio, principalmente por la crisis internacional que impactó a las economías de la región a través de una disminución del comercio, menores flujos de inversión extranjera directa y remesas, entre otros. Las exportaciones a terceros países se vieron afectadas principalmente por el elevado componente de commodities, cuyos precios internacionales disminuyeron; se registró un menor volumen demandado por los países industrializados, principal por el destino de estas.
Las exportaciones mostraron una mejora a partir del año 2010, llegándose a tener una cifra récord de exportaciones intra andinas que alcanzó los 10,361 MdD en el año 2012. En los años 2013 y 2014 las exportaciones promedio alcanzaron alrededor de 9 mil 800 MdD, caracterizadas por tener un alto valor agregado, abarcar un amplio tejido del sector industrial de los países, en el cual las empresas pequeñas y medianas son los principales actores de su dinamismo. A partir del 2015, resultado de la caída del precio de los commodities en diversos rubros que se exportan al interior de la región andina, como el petróleo, se registró una reducción del intercambio Intra - comunitario, llegando en el año 2017 con exportaciones que alcanzaron 7,572 MdD. Posteriormente, se observó una tendencia oscilante hasta el año 2019. En el 2020 las exportaciones se redujeron significativamente debido a las restricciones sanitarias implementadas por la pandemia del COVID-19, registrando 6,557 MdD. Finalmente, las exportaciones intracomunitarias en el 2021 fueron de 8,667 MdD. (Dimensión económico-social de la Comunidad Andina (2021-2022).
Relaciones económicas bilaterales de Venezuela con los integrantes de la CAN
La situación actual de la integración regional en América Latina se presenta como un escenario complejo, marcado por una diversidad de procesos políticos e ideológicos que se desarrollan en un contexto global de crisis.
Paradójicamente, mientras la región se encuentra inmersa en un intenso debate sobre los modelos de integración, los países han experimentado un período de crecimiento económico que ha impulsado las relaciones comerciales intrarregionales a niveles sin precedentes. Sin embargo, al mismo tiempo, la región parece estar más dividida que nunca. Las diferencias entre los miembros de la Comunidad Andina (CAN), como la firma de tratados de libre comercio con Estados Unidos o, las diversas posturas frente a instituciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI), o el Banco Mundial (BM), han generado tensiones que, sumadas al retiro de Venezuela de la CAN en 2006, amenazan la supervivencia de las instituciones de integración regional.
MÉTODO
La investigación se basa en un enfoque cuantitativo (Ñaupas et al., 2013) para analizar el impacto económico de la salida de Venezuela de la CAN en la integración regional (2007-2023). Este enfoque, siguiendo a Hernández et al. (2014) citados por Nizama (2018), permite la recolección de datos y la prueba de hipótesis mediante la medición numérica y el análisis estadístico. Esto ofrece una evaluación precisa, generalizable y con potencial para realizar análisis causales, aspectos fundamentales para el estudio propuesto.
De acuerdo con Gómez (2010), la investigación documental cuantitativa, análisis utilizado en este estudio, permite emplear documentos como fuente de datos cuantitativos. Esto incluye estadísticas, cifras, gráficos y otros datos numéricos presentes en documentos, los cuales pueden ser extraídos y analizados para obtener conclusiones cuantitativas.
El diseño de investigación seleccionado es no experimental, lo que significa que no se manipularon variables ni se establecieron grupos de control. En cambio, se observaron y analizaron los datos existentes para identificar patrones, tendencias y relaciones entre variables relacionadas con la salida de Venezuela de la CAN y su efecto en la integración económica regional.
Para el análisis y procesamiento de la información, se utilizó el software SPSS (Statistical Package for the Social Sciences). SPSS es una herramienta estadística ampliamente utilizada en investigaciones cuantitativas. Este software proporciona diversas funciones para el análisis de datos, incluyendo la generación de estadísticas descriptivas, pruebas de hipótesis, correlaciones y análisis de regresión. Su interfaz intuitiva y capacidades estadísticas avanzadas lo convierten en una opción eficiente para procesar datos cuantitativos y obtener resultados significativos en investigaciones científicas y sociales. Para el caso de esta investigación, la utilidad de esta herramienta estadística permitió medir la correlación que existe entre la variable salida de Venezuela y su impacto en los procesos de integración económica de la región latinoamericana, ello durante el periodo comprendido entre 2007 y 2023.
RESULTADOS
A continuación, se presentan los resultados del impacto económico de la salida de Venezuela en los países miembros de la Comunidad Andina:
La salida de Venezuela de la CAN (CAN) en 2006, marcó un punto de inflexión en la dinámica económica del bloque regional. Se inicia con la tabla 1, en la cual se muestra el Producto Interno Bruto (PIB):
Los resultados de la tabla 1, revelan un panorama interesante en cuanto al comercio exterior y el Producto Interno Bruto (PIB), de los cinco países analizados durante el período de estudio. Se observa un crecimiento significativo en ambas métricas, aunque con variaciones destacables entre los países.
Colombia, Perú y Venezuela emergen como los países con mejor desempeño en términos de comercio exterior y PIB. Estos países han experimentado un crecimiento notable en ambas áreas, lo que sugiere un desarrollo económico sólido y sostenido a lo largo del período analizado. Por otro lado, Bolivia y Ecuador muestran un crecimiento más moderado en el comercio exterior y en el PIB, ello en comparación con los tres países mencionados anteriormente. Aunque su crecimiento es menos pronunciado, aún reflejan avances económicos durante el período de estudio. La figura 2, muestra la tasa de variación anual:
Los resultados de la figura 2, proporcionan una visión detallada de la evolución del Producto Interno Bruto (PIB) real y la tasa de variación anual en Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela durante el período comprendido entre los años 2000 y 2022. Este indicador es fundamental para comprender el crecimiento económico de cada país.
En el caso de Bolivia, el PIB real ha experimentado un crecimiento moderado, pero constante a lo largo del período analizado. Sin embargo, la tasa de variación anual del PIB real ha sido relativamente volátil, lo que sugiere cierta inestabilidad en el crecimiento económico a corto plazo.
En contraste, Venezuela ha experimentado una fuerte caída en el PIB real en los últimos años, con una tasa de variación anual negativa y muy volátil. A pesar de la salida de la CAN durante ciertos años, Venezuela no experimentó mayores efectos en su economía, lo que podría indicar una dependencia económica diferente a la de otros países de la región.
A continuación, la figura 3 muestra la tasa de variación anual del IPC (Índice de Precios al Consumidor) de los países miembros de la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú) y Venezuela entre 2000 y 2020
Nota: Todos los países están representados en el gráfico debido a que el eje Y utiliza una escala logarítmica. Sin embargo, el problema surge con Ecuador, que experimentó deflación en 2018 y 2020. Como resultado, sus tasas negativas no se reflejan en el gráfico.
La figura 3, proporciona un análisis detallado del Índice de Precios al Consumidor (IPC), un indicador crucial de la inflación, que es el aumento generalizado de los precios en una economía. Este indicador es fundamental para comprender el impacto de los cambios de precios en el poder adquisitivo de los consumidores y la estabilidad económica de un país.
El análisis revela que, en general, la inflación en la Comunidad Andina ha sido relativamente baja durante el período de estudio. La tasa de variación anual del IPC ha sido inferior al 10% en la mayoría de los años, lo que sugiere un entorno económico relativamente estable en términos de precios al consumidor. Venezuela ha experimentado una fuerte inflación en los últimos años, lo cual marca una divergencia significativa con respecto al resto de los países de la región andina.
La figura 4 muestra la evolución de las exportaciones e importaciones de los países miembros de la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú), y Venezuela entre 2000 y 2020.
La figura 4 presenta dos líneas, una para las exportaciones y otra para las importaciones, ambas medidas en miles de MdD estadounidenses. Las exportaciones e importaciones de la Comunidad Andina han experimentado un crecimiento significativo durante el período de análisis.
A diferencia de los demás países de la Comunidad Andina, Venezuela ha experimentado una fuerte caída en sus exportaciones e importaciones en los últimos años. Esto ha provocado un déficit comercial persistente y una crisis económica profunda. A continuación, se muestra la figura 5, representa las exportaciones en MdD estadounidenses FOB (Free on Board) para los países miembros de la CAN (Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú) y Venezuela, durante el período 2000-2020.
En los resultados presentados en la figura 5, destacan el notable crecimiento experimentado por las exportaciones totales de la CAN durante el período comprendido entre 2000 y 2020. Se observa una clara disparidad en el volumen de exportaciones entre los países miembros, Colombia destaca como líder del grupo en términos de exportaciones.
La situación de Venezuela muestra una caída abrupta en sus exportaciones a partir del año 2008. Esta tendencia merece un análisis más detallado para comprender las causas subyacentes y las implicaciones económicas y comerciales para el país y la región en su conjunto.
La figura 6 muestra la tasa de variación anual de las exportaciones de los países de la Comunidad Andina (CAN):
Los resultados de la figura 6, muestran que las exportaciones de la CAN en conjunto han experimentado un crecimiento positivo durante el período 2000-2020, aunque con una notable volatilidad.
Existe una diferencia en el ritmo de crecimiento de las exportaciones entre los países miembros, con Colombia y Perú como con los países con mayor estabilidad. Igualmente, se observa una alta volatilidad en la tasa de variación anual de las exportaciones de todos los países, lo que indica la necesidad de políticas que fomenten la estabilidad y diversificación del sector exportador. Por otro lado, las exportaciones venezolanas han experimentado una caída significativa desde 2008, con una tasa de variación anual negativa en la mayoría de los años posteriores. La volatilidad extrema y la caída sostenida de las exportaciones son indicadores de una profunda crisis económica en Venezuela.
En la figura 7 se presenta una muestra de la tasa de variación anual de las importaciones de los países de la Comunidad Andina (CAN):
Los resultados muestran que las importaciones de la CAN en conjunto han experimentado un crecimiento considerable durante el período 2000-2020. Existe una notable diferencia en el volumen de importaciones entre los países miembros, en esta oportunidad Colombia lidera el grupo, igualmente se observa una volatilidad significativa en las importaciones de todos los países, con fluctuaciones entre años. Para el caso de Venezuela, la tasa de variación anual de las importaciones venezolanas presenta una alta volatilidad, con períodos de crecimiento y decrecimiento pronunciado; tras un crecimiento considerable hasta 2008, se observa una caída abrupta y sostenida en las importaciones venezolanas hasta el 2020.
En la figura 8, se detalla la participación porcentual de las exportaciones intracomunitarias en los países miembros de la Comunidad Andina (CAN):
En los resultados presentados, destaca una tendencia general de disminución en la participación intracomunitaria de la CAN, ello a lo largo del período analizado. Esta disminución se evidencia al pasar de un máximo del 40% en el año 2000, a un mínimo del 20% en el año 2022. Esta tendencia revela un cambio en la dinámica del comercio intrarregional dentro de la CAN a lo largo de las últimas décadas.
La figura 9 muestra la participación intracomunitaria, detecta la evolución durante el período 2000-2022, de la participación en el total de las importaciones de los países miembros de la Comunidad Andina:
Los análisis realizados sobre los datos presentados en la figura 9, indican una tendencia general a la disminución de la participación intracomunitaria de las importaciones dentro de la CAN, ello durante el período de 2000 a 2022. Esta disminución refleja un cambio en la dinámica del comercio intrarregional dentro de la región andina a lo largo del tiempo.
Se destaca una diferencia significativa en la participación intracomunitaria entre los países miembros. Colombia y Perú destacan como líderes del grupo en términos de participación en las importaciones intra-CAN. Esta disparidad entre los países miembros puede ser resultado de diversos factores, incluyendo el tamaño de sus economías, la estructura industrial, y las políticas comerciales implementadas a nivel nacional.
DISCUSIÓN
La salida de Venezuela de los países miembros de la Comunidad Andina en 2006 ha tenido un impacto económico complejo en los países miembros restantes: Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú. Esta decisión ha llevado a una disminución significativa del comercio bilateral con Venezuela, lo cual ha afectado negativamente las exportaciones de estos países. Asimismo, ha resultado en la pérdida de importantes inversiones extranjeras, ya que empresas de otros países han reducido su presencia en la región. Como consecuencia, los países miembros de la Comunidad Andina han experimentado un aumento en su dependencia económica con otros socios comerciales para compensar la falta de comercio con Venezuela.
También es evidente una disminución drástica del comercio bilateral entre los países miembros y Venezuela, ya que anteriormente dicho país era un importante socio comercial para Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú. Sin embargo, esta salida ha generado una reducción significativa de las exportaciones hacia Venezuela, lo cual ha impactado negativamente en la economía de estos países, con lo cual se han pérdido oportunidades de inversión y expansión del comercio debido a la disminución de las relaciones comerciales con Venezuela.
La CEPAL (2014) señala que la salida de Venezuela ha generado una fuga de capitales y una reducción de la inversión extranjera directa en la región. Siendo que, antes de su salida, Venezuela atraía importantes inversiones de empresas extranjeras, las cuales buscaban aprovechar las oportunidades comerciales de la región. Sin embargo, con la salida de Venezuela de la comunidad, estas empresas han reducido su presencia y sus inversiones en Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú, se destaca que la salida de Venezuela ha hecho que la región sea menos atractiva para los inversores extranjeros. Esta disminución de inversiones extranjeras ha afectado negativamente el crecimiento económico y el desarrollo de estos países (Palermo, 2021)
Para finalizar, es de resaltar el aumento de la dependencia económica de otros países miembros de la CAN, para con otros socios comerciales, lo que proporcionaba una diversificación de sus fuentes de ingresos. Sin embargo, con la salida de Venezuela, estos países se han visto obligados a buscar nuevos socios comerciales para compensar la falta de comercio con Venezuela, lo cual puede generar desafíos y vulnerabilidades adicionales en la economía de estos países. Esto trajo consigo la perdida de oportunidades de inversión y expansión del comercio en la región.
CONCLUSIONES
A nivel económico, la salida de Venezuela de la CAN en 2006, ha tenido un impacto complejo y negativo en los países miembros restantes: Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú. Venezuela era un socio comercial importante para estos países, su partida generó una reducción significativa de las exportaciones hacia Venezuela. Esto se tradujo en la pérdida de oportunidades de inversión y expansión del comercio, así como en una fuga de capitales y una disminución de la inversión extranjera directa. Venezuela solía atraer importantes inversiones extranjeras, lo que hacía que la región fuera más atractiva para los inversores extranjeros. La reducción de estas inversiones afectó negativamente el crecimiento económico y el desarrollo de los países miembros, aumentando su dependencia económica con otros socios comerciales.
Como respuesta a esta situación, los países miembros de la CAN han buscado diversificar sus fuentes de ingresos y buscar nuevos socios comerciales. Sin embargo, este proceso no está exento de desafíos y vulnerabilidades adicionales en sus economías. La necesidad de adaptarse a estas nuevas realidades ha colocado a estos países frente a importantes desafíos económicos y comerciales.
En definitiva, la salida de Venezuela ha debilitado la economía de la CAN y ha generado importantes desafíos para los países miembros. Por lo anterior, se requiere una profunda revisión y replanteamiento del modelo de integración regional para adaptarlo a las nuevas realidades del siglo XXI y superar los desafíos actuales. Aunque la partida de Venezuela representó un duro golpe para la CAN, también ha sido una oportunidad para reexaminar su modelo de integración y construir un futuro más sólido y próspero para la región. Este proceso requerirá una mayor colaboración entre los países miembros y un enfoque estratégico en la diversificación de las economías y la búsqueda de nuevos socios comerciales.