INTRODUCCIÓN
En estos tiempos es de interés general la participación ciudadana en la gestión ambiental ya que constituye un pilar esencial en los procesos de conservación del medioambiente; en tal sentido es de vital importancia que los ciudadanos desempeñen un rol activo en los proyectos ambientales que inciden sustancialmente en el aprovechamiento racional de los recursos naturales, contribuyendo en una pertinente gestión ambiental y una óptima toma de decisiones con coherencia en el ámbito de las políticas públicas a través de los procesos participatorios y gobernanza cuya implicación sea de alcance a través de mecanismos innovadores y del consenso ciudadano (1).
La participación de la ciudadanía digital posibilita un papel crucial en la configuración de las políticas públicas ambientales, siendo la presencia activa para el fortalecimiento de las bases de la democracia y del ejercicio pleno de los ciudadanos a ser escuchados en sus diversas necesidades en el plano de la sostenibilidad ambiental (2).
En tal sentido la participación pública es determinante en todas aquellas actividades en las que los ciudadanos intentan influir en las decisiones de políticas públicas; está referida a un conjunto de comportamientos en las que se pretende incidir en la toma de decisiones a través de la ciudadanía digital y los canales de atención gubernamentales en las que se enfatizan una comunicación bidireccional a través de una mesa de diálogo entre los responsables de la toma de decisiones y las partes afectadas por dicha decisión (3).
En cuanto a las competencias que deben desarrollar los ciudadanos en la sociedad actual se requiere la posibilidad de acceso a los servicios digitales, los dispositivos electrónicos e internet, siendo estas herramientas sustanciales en la vida de las personas, ya que, es un medio de comunicación sin limitaciones a nivel mundial, cuyo uso repercute directamente en las actividades de orden personal, familiar, laboral y ambiental (4).
Es por ello que, los gobiernos realizan esfuerzos en la implementación de tecnologías digitales en sus respectivas ciudades con el propósito de transformar su capacidad operativa, comunicativa y de servicios para una mejora en la toma de decisiones; de este modo lo que se busca es una participación mayoritaria para resolver problemas de interés social en el ordenamiento territorial y la gestión ambiental (5).
Asi también en el plano de desarrollo económico sostenible es importante la atención al bienestar social y el cuidado del medio ambiente promoviendo a través de las instituciones del Estado la protección de los espacios naturales en un tránsito desde un enfoque antropocénico a una orientada hacia la sostenibilidad ambiental; en esta se busca la armonización del crecimiento económico, la inclusión social y la protección ambiental tomando como dimensión intrínseca del desarrollo sostenible (6).
Desde esa óptica en el ámbito nacional se establecen políticas públicas, directrices, normas y proyectos de protección del medio ambiente, estas constituyen las funciones inherentes del sector ambiental cuya responsabilidad atañe al ministerio del ambiente, dicha entidad que mediante Decreto Supremo 023-2021/Minam, aprobó la Política Nacional del Ambiente al 2030, en la que se estableció las principales directrices, objetivos estratégicos, programas y proyectos de cuidado y protección ambiental, la cual está destinada a la orientación de los sectores de la gestión pública, la sociedad civil y el sector privado (7).
Las políticas públicas ambientales tienen por su naturaleza la protección del derecho al medio ambiente, en la que se reconoce como un derecho humano a vivir y desarrollarse en un medio ambiente limpio, saludable y sostenible; entre tanto los programas ambientales tienen como base la participación pública de la ciudadanía y de protección de los servicios ambientales en un entorno de condiciones óptimas para la familia y realización de actividades que generen bienestar a la población (8).
En esa línea, las políticas públicas forman parte de las decisiones de Estado y constituyen un proceso de aprendizaje colectivo de interacción social que tiene como sustento el incremento de la capacidad de resolución de problemas, influyendo decisivamente en la formulación y legitimación de la agenda pública a través de un proceso de interlocución y comunicación democrática entre la sociedad civil y el Estado (9).
Por consiguiente, la participación ciudadana en la política ambiental exige una actitud proactiva por parte de la comunidad que asume de manera responsable en la dinámica de gestión de los programas y proyectos en los asuntos públicos (10). Asimismo, las políticas públicas tienen como derrotero el desarrollo social, económico, cultural y ecológico de manera equilibrada entre las regiones del territorio que responda a la mejora de la calidad de vida, la gestión responsable de los recursos naturales y la protección ambiental (11).
Por ello, las políticas públicas deben de tener en consideración aspectos esenciales como el ordenamiento territorial y los procesos de planificación del desarrollo; asi también la reducción de conflictos en el uso y ocupación de los espacios geográficos e impulsando la conservación ambiental orientando el crecimiento urbano y corrigiendo los desequilibrios territoriales con el propósito de establecer los procesos de diálogo y cooperación siendo esta de carácter intersectorial (12). En tal sentido, es importante llevar a cabo un proceso de planificación concertado que atienda las demandas de la ciudadanía para alcanzar un desarrollo armonioso con el medio ambiente sin afectaciones negativas en el territorio (13).
La investigación tuvo como objetivo determinar la relación entre la ciudadanía digital y las políticas públicas ambientales, en la ciudad de Lima. El estudio está orientando a establecer la implicancia de la ciudadanía digital a efectos de poder participar de manera activa en el proceso de gestación de las políticas públicas ambientales teniendo en consideración las demandas de la población por el cuidado y preservación del medio ambiente de la comunidad. La justificación del estudio responde a la necesidad de abordar la problemática ambiental a partir de la preocupación de la comunidad por responder de manera adecuada a la forma de cómo se gestiona los planes, programas y proyectos en favor de la mejora del medio ambiente beneficiando a la comunidad en su conjunto asertivamente.
MATERIALES Y MÉTODOS
La metodología empleada en el trabajo de investigación es de tipo básico, de nivel correlacional, de corte transversal y de diseño no experimental. La población de estudio estuvo constituida por sujetos de un centro de abastos de la ciudad de Lima, la muestra de estudio estuvo conformada por 90 participantes. Los criterios de inclusión fueron que los participantes sean asociados al centro de abastos debidamente identificados, que posean más de 5 años de experiencia en las actividades de abastos y conocedoras de la situación ambiental. Los criterios de exclusión fueron todos aquellos que no se ajustan a los requerimientos de la investigación. Se emplearon como técnica de investigación la encuesta y como instrumento de recojo de datos el cuestionario de investigación. Para la medición se empleó la escala de Likert; (1) Nunca, (2) Casi Nunca, (3) Algunas veces, (4) Casi Siempre, y (5) Siempre. Los instrumentos fueron validados por el criterio de juicio de expertos y la confiabilidad por Alfa de Cronbach, para la variable Ciudadanía digital (Alfa=0.842) y para la variable de Políticas públicas ambientales (Alfa=0.824) siendo de una alta confiabilidad.
RESULTADOS
Entre los resultados obtenidos se puede evidenciar que, en la Tabla 1, predomina un nivel bajo en cuanto a la variable Ciudadanía Digital en los participantes con un 46.7%, para la dimensión Cultura digital se encuentra en un nivel medio con un 44.4%, para la dimensión Uso de tecnología se encuentra en un nivel bajo con un 48.9% y para la dimensión Derechos digitales en un nivel bajo con un 47.8%, destacándose la necesidad de mejorar los procesos de aprendizaje para el desarrollo de las competencias digitales. Al respecto cabe destacar que la competencia digital en los participantes se debe potenciar a través del involucramiento de los actores principales en los procesos de gestación de las políticas públicas ambientales por medio de la acción educativa que tienen que ver directamente con la formación de los participantes y de alcance transversal de dominio en la gestión del conocimiento a través de las TICs teniendo en consideración como un derecho al acceso de los medios digitales y consecuentemente para la participación de la ciudadanía digital.
Entre los resultados obtenidos se puede evidenciar que, en la Tabla 2, predomina un nivel regular en cuanto a la variable Políticas Públicas Ambientales en los participantes con un 82.2%, para la dimensión Derecho al medio ambiente se encuentra en un nivel regular con un 66.7%, para la dimensión Ciudadanía ambiental se encuentra en un nivel regular con un 58.9% y para la dimensión Problemática ambiental en un nivel regular con un 63.3%, lo cual evidencia la necesidad de implementación de políticas públicas ambientales que atiendan las necesidades de la población a través de planes y programas orientados a la conservación del medio ambiente siendo un aspecto coyuntural en las acciones de gobernanza por parte del Estado y un mayor grado de conocimiento en los aspectos de ordenamiento territorial, uso de los recursos naturales, planificación del territorio, actividades económicas, identificación de zonas de riesgo, gestión del riesgo ambiental, participación ciudadana y presupuesto participativo en la toma de decisiones a nivel de gobierno.
En la Tabla 3, se aprecia el análisis de la normalidad de los datos, en este sentido los valores de significación fueron menores que 0.05; lo que significa que no muestran normalidad en este sentido se aplicó el coeficiente rho de Spearman que mejor se ajusta en el proceso de tratamiento estadístico de la información.
En la Tabla 4, se evidencia que existe relación entre las variables de Ciudadanía digital y Políticas ambientales con un rho=0.350 y p=0.001<0.05, lo que significa una relación moderada entre dichos constructos. En relación a las dimensiones de Ciudadanía digital y Políticas ambientales se obtuvieron para la dimensión Cultura digital un rho=0.209 y p=0.048<0.05, para la dimensión Uso de tecnología un rho=0.279 y p=0.008<0.05 y para la dimensión Derechos digitales un rho=0.550 y p=0.000<0.05. De los resultados permite inferir la necesidad de mejorar la participación de la ciudadanía a través de los medios digitales con el propósito de manifestar sus propuestas relacionadas en el proceso de gestión de las políticas públicas ambientales que a la postre afectaran significativamente la calidad de vida de la población.
DISCUSIÓN
El objetivo general fue determinar la relación entre la ciudadanía digital y las políticas públicas ambientales; se evidenció efectivamente que existe relación entre las variables de Ciudadanía digital y Políticas ambientales con un rho=0.350 y p=0.001<0.05, lo que significa una relación moderada entre dichos constructos. En relación a las dimensiones de Ciudadanía digital y Políticas ambientales se obtuvieron para la dimensión Cultura digital un rho=0.209 y p=0.048<0.05, para la dimensión Uso de tecnología un rho=0.279 y p=0.008<0.05 y para la dimensión Derechos digitales un rho=0.550 y p=0.000<0.05.
En la investigación de Carrera, realizada en la comunidad de Chilca en Huancayo, se evidenció que se está ejerciendo una inadecuada ciudadanía digital con incidencia en la salud y bienestar digital donde el uso desmedido del celular predomina en un 50.9% y el mal uso del internet alcanzó un 47.6% (14). Asi también Pando en su investigación en la ciudad de Puno da a conocer el desinterés por parte de las autoridades en la gestión de las políticas públicas ambientales siendo esta un clamor por parte de la población puneña en atención a la problemática ambiental que afecta seriamente a las comunidades de dicha región sureña (15). Del mismo modo, Gonzales en su investigación que las políticas universitarias buscan generar la toma de conciencia a partir de la educación y cultura ambiental la cual se refleja su incidencia en la formación de una ciudadanía con perspectiva ambiental responsable con un 70.9% (16). Es por ello, que la participación de la ciudadanía es primordial para la conservación del entorno ecológico y la mejora en la capacidad y el nivel de gobernanza del medio ambiente; dado que la participación pública es vital para la implementación de políticas públicas ambientales que generen y promuevan la toma de conciencia ambiental, según el informe sobre el comportamiento ecológico y ambiental de los ciudadanos en el período 2029-2020 la proporción de encuestados sobre la preocupación por el medio ambiente ecológico se incrementó entre un 10% y un 20% (17).
En tal sentido el comportamiento ecológico en las personas responde a su comprensión, cognición y emoción en la conservación del entorno ecológico a través de una participación activa (18). En esa línea, la conciencia ecológica de los ciudadanos es fundamental en el proceso de conservación y cuidado de los espacios naturales en una tónica de mejora continua y el cultivo de valores ambientales; siendo un derecho a vivir en un medio ambiente saludable en donde el Estado debe desempeñar un rol de liderazgo en la aplicación de la normatividad ambiental (19). Por consiguiente, se debe promover el desarrollo a través de la participación ciudadana de manera consensuada para el desarrollo socioeconómico y el medio ambiente natural mediante la aplicación de políticas públicas orientadas hacia la sostenibilidad ambiental y el fortalecimiento de la capacidad innovadora de la comunidad (20). Asi también, el gobierno debe de demostrar un mayor nivel de responsabilidad en la implementación de políticas públicas ambientales en los procesos nacionales de planificación y presupuestación para lograr el desarrollo sostenible y conservación ambiental (21).
CONCLUSIONES
La ciudadanía digital es un factor clave en los procesos de participación ciudadana en la generación de políticas públicas ambientales, en la que la población se expresa libremente en función a las demandas relacionadas con la conservación del medio ambiente y desarrollo sostenible en virtud de los impactos negativos hacia el entorno ecológico y que a través de los medios de comunicación abiertos se puede manifestar a través de propuestas que permitan viabilizar las necesidades públicas mediante un diálogo bidireccional y con una amplitud de criterios en torno a la problemática ambiental; es por ello que los mecanismos existentes como los entornos virtuales permiten el ejercicio democrático para que la población desempeñe un rol importante para la toma de decisiones de carácter ambiental y el gobierno desarrolle un conjunto de acciones tendientes a la mejora del medio ambiente en toda su extensión de manera pertinente y con una valoración ecológica.
CONFLICTO DE INTERESES
Los autores declaran que no existe conflicto de intereses para la publicación del presente artículo científico.


















