La Guerra del Chaco se inscribe en la historia militar no solo de los países en contienda, Bolivia y Paraguay, sino, incluso a nivel mundial. El conflicto bélico ha dejado una profunda huella en la memoria colectiva, la producción cultural y las transformaciones sociales de la región. A punto de cumplirse 90 años del fin de las hostilidades, la revista Ciencia y Cultura presenta en su número 53 un análisis exhaustivo y multifacético de la guerra que marcó la historia boliviana.

La Guerra del Chaco, librada entre Bolivia y Paraguay entre 1932 y 1935, es considerada la primera guerra moderna en América Latina, pues combinó tácticas heredadas de la Primera Guerra Mundial, como las trincheras y las estrategias de desgaste, con innovaciones tecnológicas y logísticas que prefiguraron la Segunda Guerra Mundial, como el uso de artillería pesada, aviación militar avanzada y armamento sofisticado.

Este conflicto representó un desafío logístico monumental, especialmente en un entorno hostil como el del Chaco Boreal, caracterizado por su clima extremo y la escasez de agua. Ambos bandos enfrentaron no solo al enemigo, sino también a las inclemencias del terreno, que a menudo causaban tantas bajas como el combate mismo.

El impacto de la guerra fue profundo y duradero. En el ámbito cultural, inspiró obras literarias, cinematográficas y artísticas que exploraron los horrores del conflicto y la resistencia humana. Socialmente, significó un punto de inflexión en la organización política y militar de ambos países, dando lugar a movimientos que transformarían sus estructuras internas en los años siguientes.

Con el acercamiento del 90º aniversario del fin de esta contienda, es imprescindible reflexionar sobre sus múltiples aristas. En su número 53, la revista Ciencia y Cultura presenta un análisis interdisciplinario que trasciende la dimensión militar y política del conflicto, explorando también sus profundas repercusiones en la memoria colectiva, la identidad nacional y la producción cultural de la región. Este enfoque integral ofrece una perspectiva más rica y compleja sobre un episodio que dejó una huella imborrable en la historia del continente.

Agradecemos a los académicos por sus estudios sobre el tema y también a los descendientes de excombatientes que aportaron con testimonios, documentos y fotografías, atendiendo la convocatoria de Ciencia y Cultura para mantener viva esta valiosa memoria histórica.

Esperamos que esta edición trascienda su propósito como espacio de reflexión académica y se convierta en un testimonio vivo de nuestra historia, fomentando el diálogo sobre las lecciones que la Guerra del Chaco aún puede ofrecer al presente y al futuro. Expresamos nuestro profundo agradecimiento a todos los autores y colaboradores por sus valiosas contribuciones, que han hecho posible esta obra colectiva.