1. Introducción
¿Quién es la chola paceña fashion? Para responder esta pregunta, primeramente, se tuvo que analizar los procesos de globalización que incidieron en la transformación identitaria de la chola paceña actual, pero también sus raíces y su cultura aymara que fue heredada de sus antepasados.
A partir del año 2012, aproximadamente, se pudo ver el surgimiento de esta nueva chola paceña, que es hija de una chola “tradicional”: es decir, aquella que usa pollera, manta, sombrero y trenzas todos los días, además de hablar su idioma natal, el aymara, entre otros aspectos.
Por el contrario, la chola paceña fashion solo utiliza la pollera para eventos especiales, como ser: la Entrada folclórica del señor del Gran Poder, bodas, bautizos y pasarelas. Su vestimenta cotidiana consta de jeans y poleras; y pudo acceder a una educación formal, por ejemplo, se encuentra estudiando alguna carrera en la universidad o trabaja en alguna institución.
Para entender el mundo de esta nueva chola paceña, es importante conocer su entorno y los espacios donde se dio a conocer; el más grande y representativo de ellos es el Gran Poder, pues la chola fashion es la guía en las fraternidades de morenada, es decir que es el rostro de su respectiva fraternidad. Por ello comenzó a utilizar prendas más llamativas y sensuales, algo que con el tiempo se ha ido prohibiendo, sobre todo por los sectores conservadores, como la Asociación de Conjuntos Folclóricos del Gran Poder, pues temían que se distorsione la imagen de una chola paceña tal cual se la conoce.
Incluso varios medios de comunicación notaron este cambio. Ello se puede evidenciar a partir de los siguientes titulares: “Gran Poder, la pasarela de la moda ‘chola’” (Radio Semáforo, 2011). “Guías del Gran Poder se lucen en calendario”, (La Prensa, 2013). “Prohíben a cholas usar corsé en la entrada de Gran Poder” (Erbol, 2014), “Gran Poder: prohíben encajes, tacos altos y escotes en traje de chola paceña” (Zapana, 2019).
Otro gran espacio donde se desenvuelve la chola paceña fashion o guía es en las pasarelas de moda para chola. Todo lo que tiene prohibido utilizar en el Gran Poder puede lucirlo en el modelaje, como corsés, mantas o centros transparentes, etc. Incluso utilizan accesorios representativos de otros países, como joyas jade (que vienen de la cultura árabe), abanicos o blusas con mangas "kimono".
El tercer espacio que dio a conocer a la chola paceña fashion son los medios de comunicación, como la televisión, calendarios, revistas sobre folclore, etc. Allí, al igual que en las pasarelas, tiene permitido utilizar prendas más sensuales y transgresoras que las que están permitidas en el Gran Poder.
Un aspecto importante a destacar es que la chola paceña fashion es hija o nieta de una mujer aymara originaria, lo que significa que tiene raíces aymaras tiene raíces aymaras, además de usos y costumbres además de usos y costumbres de su cultura, pero como creció en la urbe paceña, entonces tiene características de la globalización que influyen en sus formas de vestir y ser. Más adelante se profundizarán los tres grandes espacios donde la chola paceña fashion se dio a conocer, y los encuentros y desencuentros que tuvo con los sectores más conservadores.
Para abordar este fenómeno, se eligió llevar a cabo el estudio con base en el paradigma teórico del interaccionismo simbólico. Esta corriente comprende a la sociedad a través de la comunicación y la explica como un proceso de intercambio social en el que sus participantes se retroalimentan y alcanzan una “conciencia común” como resultado de este intercambio (Kaplún, 1985, p. 68). Cuando no existe entendimiento mutuo, la comunicación se dificulta. Un ejemplo de esto se aprecia en cómo los sectores conservadores del Gran Poder -las asociaciones folclóricas que lo organizan- perciben a la chola paceña fashion como transgresora de ciertas tradiciones propias del baile de la morenada (Anzoleaga, 2022, p.23).
Es importante aclarar cómo dichos eventos llamaron la atención y llevaron a realizar la presente investigación, que se concentró en la siguiente pregunta: ¿Cómo se construye la identidad sociocultural de la chola paceña fashion?
Para ello se utilizaron diferentes técnicas cualitativas como ser:
Entrevistas a profundidad dirigidas a las guías de las diferentes fraternidades del Gran Poder, a las cholas paceñas que modelan sus atuendos en las pasarelas y a presentadoras de televisión (en algunos casos, las propias guías desempeñaban el rol de modelos y de presentadoras de televisión).
Entrevistas a expertos en el tema: comunicadores, diseñadores de prendas para chola y gestores culturales.
Observación de campo en la Entrada folclórica del Señor del Gran Poder, fiestas, ensayos de morenada, pasarelas de moda, sets de televisión y en medios de comunicación.
El presente estudio articula los conceptos de comunicación y cultura. En primer lugar, se entiende la comunicación como un proceso de interacción social y de intercambio de experiencias por medio de signos. Este intercambio simbólico tiene mucho que ver con las tradiciones, usos, costumbres, saberes, etc., que van pasando de generación en generación dentro de una comunidad (cultura). Con base en esa definición, es posible afirmar que la cultura se mantiene y perdura en el tiempo gracias a la comunicación (Anzoleaga, 2022, p. 24).
Hay una “necesidad de desplazamiento” del concepto de comunicación al de cultura. La comunicación debería entenderse como la manera de pensar los procesos de socialización; es decir, no debe abordarse desde los medios, mensajes o canales, sino desde un sentido cultural más antropológico. Esto implica analizar la comunicación a partir del intercambio social y todo aquello que una cultura articula: sistemas de conocimientos, códigos de percepción, producción de la realidad, mecanismos a través de los cuales una sociedad se reproduce de generación en generación, etc. (Martín-Barbero, 1984).
Gracias a los procesos de globalización, la chola paceña fashion está exportando su imagen a niveles internacionales, incluyendo las nuevas modas para chola. Esto se puede percibir en las pasarelas de alta costura, como la Semana de la Moda en Nueva York, con los diseños de Eliana Paco, o las nuevas prendas del diseñador italiano Valentino, inspiradas en la pollera.
Después de esta breve descripción que caracteriza a la chola paceña fashion y que motivó a esta investigación, es momento de profundizar en sus orígenes, formas de ser y espacios donde ella se desenvuelve para poder responder a la pregunta de investigación.
2. Formas de ser de la chola paceña fashion y apropiación de la cultura globalizada
¿Quién es? ¿Cuándo se originó? ¿Cuál es su identidad sociocultural? ¿Qué comunica?; éstas y otras preguntas salen a la luz cuando se habla de esta nueva imagen de la chola paceña. Ella es la guía en el baile de la morenada en la Entrada folclórica del Señor del Gran Poder, fiesta que se lleva cabo todos los años en la ciudad de La Paz. Las guías son el rostro de la fraternidad, son hijas o nietas de aymaras originarios, por lo que tienen usos y costumbres de dicha cultura que las acompaña desde sus antepasados (Anzoleaga, 2022, p. 26).
Así como las guías o cholas fashion mantienen el sentido de pertenencia hacia su cultura aymara, también comparten muchas características de la cultura globalizada, como ser la vestimenta de los jeans, tenis y poleras, interés por lo extranjero (como la cultura K-pop), saber el idioma inglés más que el aymara, etc. Cabe mencionar que la mayoría de ellas tienen entre 18 y 30 años de edad, por ello se encuentran en la etapa universitaria o trabajando y, dependiendo de varios factores, optaron por no usar la pollera en estos espacios.
Esto llama la atención ya que la indumentaria - el sombrero, la manta, la pollera y el peinado con trenzas- es una parte fundamental de la identidad de la chola paceña. En ese sentido, cuando se les preguntó a las guías por qué no utilizan todo el tiempo el traje de chola respondieron lo siguiente:
“Me encantaría usar las polleras todo el tiempo, pero realmente la mujer de pollera invierte una considerable cantidad de dinero en la vestimenta que lleva diariamente, lo cual no creo cubrir por el momento” (E. Chuquimia, comunicación personal, junio 2015).
“Yo soy de vestido, he pensado vestirme de pollera. Yo estudio derecho en la Universidad Católica Boliviana y tengo que ir de traje, que te vean de pollera como que no es cómodo, puede ser por tema discriminativo” (A. Figueredo, comunicación personal, junio 2015).
“Me visto con el traje de chola paceña para fiestas; no lo hago todos los días porque mi trabajo no lo permite. Tal vez con los años pueda porque tengo harta ropa. Para el Gran Poder, ensayos y matrimonios también tengo bastantes polleras entonces voy así a esos acontecimientos”. Esta fue la respuesta de una guía que estudia ingeniería civil y para ella resulta incómodo trabajar con el traje de chola paceña. (P. Patzi, comunicación personal, junio 2015).
A partir de las respuestas, se puede notar que hay varios factores por los cuales no utilizan la pollera y manta todo el tiempo. La mayoría de las guías respondieron que era por incomodidad o por falta de costumbre, otras contestaron que cuando se visten de pollera están acostumbradas a llevar muchas joyas, maquillaje, prendas coloridas, y otros elementos característicos de la chola paceña fashion, y que si tuvieran que ir a estudiar o a trabajar de cholas paceñas lo harían así (es decir de forma más ostentosa); sin embargo vestir todos los días de esa forma es más costoso. Pocos fueron los casos que respondieron que se sentían discriminadas u observadas por otros.
La versatilidad en la indumentaria de las guías o cholas paceñas fashion es producto de la globalización; la cual ha “eliminado” las fronteras mediante la tecnología, economía, política, etc. Dice García Canclini (2000) en su libro La globalización: ¿productora de culturas híbridas?:
El desarrollo tecnológico, sobre todo los satélites y la informática, contribuyeron a crear en las dos últimas décadas un mercado económico y financiero mundial, donde la producción se desterritorializa (marcas como Peugeot, Ford y Nissan debilitan su asociación originaria con Francia, Estados Unidos y Japón, en tanto sus coches son producidos en muchos países; lo mismo puede decirse de Benetton y Christian Dior para la ropa, o de las cadenas globalizadas de Fast Food, con la particularidad de que en estos casos, a veces, la globalización incluye adaptaciones a estilos locales) (García Canclini, 2000, p. 4).
La última frase “la globalización incluye adaptaciones a estilos locales” representa la dinámica de la identidad de la chola paceña fashion, pues ella adapta la vestimenta, formas de ser y costumbres de la cultura occidental a la andina.
Un caso que demuestra lo dicho es la modelo de ropa para chola Estefanía Camargo. Ella es hija de una chola tradicional y comentó que sólo viste de pollera para modelar, pero que utiliza con mayor frecuencia o comodidad el pantalón; le encanta hacerlo al estilo K-Pop, proveniente de Corea, una nueva tendencia en ropa, accesorios y canciones. En este caso se podría hablar de tres culturas en una misma persona: la aymara (por ser descendiente de ésta), la paceña (por haber nacido en la ciudad de La Paz) y la coreana (por adaptar las costumbres modernas de ese país a las suyas) (Anzoleaga, 2022, p. 29).
Martín-Barbero en su texto Dinámicas Urbanas de la Cultura (1999) indica que ya no existe una diferencia entre lo urbano y popular, ahora se están produciendo hibridaciones que hacen más complicado hallar términos definitorios para cada denominación que antes era más clara, y al tratar de dar una definición, se puede excluir algo nuevo e importante en esta dinámica de culturas de los tiempos actuales (Martín-Barbero, 1991).
2.1 El concepto de belleza para una chola paceña fashion
Tomando en cuenta que la chola paceña fashion es alguien a quien le gusta innovar, mostrarse ante las cámaras, maquillarse y estar siempre a la moda, especialmente cuando se viste de pollera, es importante saber qué significa la belleza para ella.
La mayoría de las entrevistadas afirmó que una chola paceña tiene que ser robusta para ser bella, porque de lo contrario su traje “se la comería” (I. Flores, comunicación personal, julio 2015). Sin embargo, esta apreciación se contradice con los corsés que utilizan, ya que estos reducen la cintura, lo que conlleva modelar un cuerpo con las medidas 90, 60, 90.
Por otro lado, Rosario Aguilar (comunicación personal, julio 2015), de “Promociones Rosario” (modelaje para cholas de La Paz), relacionó la belleza de la chola paceña con la personalidad y la esencia: “Es aquella mujer coqueta, para mí la mujer de pollera es belleza indígena autóctona que muestra sus aptitudes, vestimenta, elegancia, gallardía, sonrisa y también aquella mujer sacrificada. La mujer de pollera es totalmente íntegra, es luchadora, trabajadora”.
Este concepto define más que todo la esencia y la relación de la chola paceña con fuerza y lucha, como menciona Barragán (1996):
El posicionamiento estético de la mujer de pollera fue un patrón a seguir por las mujeres indígenas que llegaban a la ciudad de La Paz por diversos motivos: como servidumbre, vendedoras o comerciantes con el consecuente resultado de una ‘indianización’ de la pollera (Barragán, 1996, p.56).
La experiencia de otra guía y modelo de ropa para chola paceña tuvo que ver justamente con su concepto de belleza: “Lo habitual es que quieren ver cholitas con un poco más de peso, alguna vez una compañera de trabajo me dijo: ‘Pero si tú eres delgada ¿cómo te vistes de pollera?’, porque cuando me vestía de chola me hacían poner una chompa adentro para que aparente más cuerpo” (E. Choque, comunicación personal, julio 2015).
Otras respuestas de las cholas paceñas fashion hicieron énfasis en la belleza interior. Para ellas una cholita es bella por su humildad, sencillez, alegría, carisma, tambien por ser respetuosa y única.
2.2 Con qué mundo se identifican más: ¿andino u occidental?
A pesar de que las cholas paceñas fashion no utilizan todo el tiempo la pollera, se sienten más cercanas e identificadas con el mundo andino que con el occidental porque, según comentaron, está en su sangre y en sus tradiciones que heredaron de sus padres y abuelos. Ninguna de ellas nació en un pueblo indígena originario, y no visten todos los días con polleras y mantas, pero se autodenominan como cholas paceñas.
Respecto al término “fashion”, una parte de las guías no lo había escuchado, pero otras sí lo conocían y era un término común en su entorno. Para ellas este concepto significa estar a la moda. Sin embargo, es importante diferenciar lo que es ser una chola a la moda de una chola fashion.
Estar a la moda se relaciona más con innovar dentro de los parámetros establecidos y permitidos para una chola, como utilizar ropa más colorida, mayor cantidad de pliegues en la pollera, joyas de diferentes colores, etc. Por otro lado, la chola fashion innova con elementos de la cultura globalizada que por lo general son traídos del exterior y los fusiona al estilo andino (por ejemplo, blusas con manga kimono), por eso se utiliza la palabra “fashion” en inglés, que en español significa “moda”. Además de ello, transgreden lo establecido al usar atuendos más sensuales, como los corsés con escotes o las mantas transparentes.
Entonces, la identidad de las guías se analiza desde su proceso histórico. Por un lado, la colonización, época en la cual las mujeres indígenas tuvieron que adoptar usos y costumbres españoles, como ser la religión católica (sin dejar de lado las creencias aymaras) o la moda (adopción de la manta y la adaptación de la falda española a la pollera). En otro sentido, la identidad cultural de las cholitas paceñas se ha visto influenciada por la modernización y/globalización, con la adopción de algunas características del siglo XX, ya sea el idioma inglés, moda occidental, etc.” (Anzoleaga, 2022, p. 31).
El teórico Stuart Hall describe ese conflicto de identidades de la siguiente forma:
La cuestión de la ‘identidad’ está siendo vigorosamente debatida en la teoría social. En esencia, el argumento central es que las viejas identidades que estabilizaron el mundo social durante tanto tiempo se hallan en declive, lo que da origen a otras nuevas y fragmenta al individuo moderno concebido como un sujeto unitario (Hall, 2010, p. 363).
De la misma forma, Cesar Llanque habla de la identidad fragmentada, pero en el caso específico de la chola paceña:
Hallamos un proceso de identidad dentro de un marco cultural en constante transformación: adopción de bienes, objetos (cosméticos), status y roles en la corporeidad de la “chola paceña mestiza” y “chola paceña urbana”, pero al mismo tiempo, hallamos el mantenimiento de algunos rasgos y/o peculiaridades en su indumentaria que se mantienen desde hace bastante tiempo. En este sentido estamos hablando exactamente de una identidad “fragmentada y fracturada”, por una parte, de lo tradicional, productos de “una historización radical” en procesos de transformación (Llanque, 2010, pp. 538-539).
Estos conceptos se asemejan a lo dicho por Martín-Barbero sobre lo difícil que es diferenciar ahora entre lo urbano y popular de las hibridaciones culturales que existen actualmente.
A propósito de tocar el tema de hibridaciones, una guía mencionó que se identifica con ambos mundos, pues siente que ha crecido en una sociedad que comparte tanto el mundo andino como el occidental y no podría autoidentificarse con una sola cultura: “Me identifico con ambos mundos porque vivimos en un país que realmente tiene influencias occidentales muy marcadas en nuestro diario vivir; sin embargo, también hemos sabido acoplar nuestras raíces indígenas porque somos y fuimos parte de estas” (E. Chuquimia, comunicación personal, julio 2015).
Este último es un ejemplo de la identidad fragmentada, pues la chola paceña fashion tiene un sentido de pertenencia al mundo andino por sus tradiciones familiares, pero no es el mismo que el de sus madres, ahora esa identidad se transforma en algo más moderno con nuevas formas de ser y vestir, y con un gusto particular por elementos extranjeros.
En ese sentido, no hay que olvidar que la cultura está en constante cambio, transciende y se transforma a lo largo de los años para permanecer; de lo contrario podría estancarse y desaparecer. Sin embargo, en el caso de la chola paceña hay elementos que no deberían transformarse por completo, por ejemplo la pollera, sin ella una mujer ya no sería vista como una chola tal cual la conocemos.
La chola paceña fashion está fusionando su cultura aymara con la globalizada, pero la preocupación de los sectores más conservadores es si todos estos cambios podrían eliminar la esencia de la chola paceña.
3. La chola paceña fashion en el Gran Poder
Uno de los grandes escenarios donde se dio y se da a conocer la chola paceña fashion, como se mencionó anteriormente, es la Entrada folclórica del Señor Gran Poder. ¿De dónde proviene esta festividad? Dicha entrada aglutina la mayoría de las danzas folclóricas de Bolivia, pero en sus comienzos se la conocía como la celebración patronal en honor al Cristo de los Tres Rostros (llevada a cabo en el barrio de Ch’ijini de la ciudad de La Paz), que posteriormente dio origen a la fiesta del Gran Poder como la conocemos hoy (Delfín et al., 2009).
Bailar por devoción y tener esa pasión por el folclore son aspectos que caracterizan a una chola paceña tradicional, un sentimiento que no es ajeno para las fashion, quienes respondieron sentirse muy emocionadas al bailar:
“Se siente una alegría, especialmente al pasar por la iglesia, hay otro lugarcito que es característico en los ensayos, abajo del Puente Abaroa, te sientes diferente, cuando suena la banda, te retumba todo, la emoción. Esa emoción que se siente cuando la gente grita ‘Vamos Judith”’ (J. Quisbert, comunicación personal, julio 2015).
“Me gusta el folclore y las danzas típicas bolivianas, además porque vengo de una familia folclorista que participa en diferentes actividades de La Paz, y en cuanto se me presentó la oportunidad de participar en el Gran Poder, lo hice y lo sigo haciendo hasta ahora” (E. Chuquimia, comunicación personal, julio 2015).
“Desde los 15 años bailo. Entré al Gran Poder por una promesa que le hice al Tatita; también porque me gusta mucho bailar” (I. Flores, comunicación personal, julio 2015).
Este último comentario refleja la devoción y el sentido de pertenencia que caracteriza a sentido de pertenencia que caracteriza a las guías, pues todas mencionaron que bailan por devoción, no asisten a las recepciones y misas por obligación, sino porque realmente tienen deseos de participar y por las promesas que hacen al señor del Gran Poder. A todo esto, se suma la tradición familiar de las guías que conlleva participar en la festividad.
En la Entrada del Gran Poder las guías no solo mantienen las tradiciones en sus formas de ser, sino también en su vestimenta, la cual tiene que ser conservadora y debe respetar los parámetros establecidos (no mostrar los hombros o mantener la pollera debajo la rodilla), aunque esto último está siendo más controlado por la Asociación de Conjuntos Folclóricos del Gran Poder, ya que algunas guías trataron de ir más allá de lo establecido al usar escotes o mantas transparentes.
Con todo este análisis y a partir de las respuestas de las propias guías, se puede decir que las cholas paceñas fashion aún se encuentran en un proceso de autoidentificación sociocultural, ya que son una fusión de ambos mundos: andino y occidental. Sin embargo, sus raíces están fuertemente arraigadas a lo andino, pues su ascendencia étnica es aymara, ya que reconocen como propios los usos y costumbres de sus antepasados, como define el siguiente concepto:
La ascendencia étnica se entiende como el sentido de pertenencia que tiene una determinada comunidad, pues los miembros de estos grupos se distinguen de los miembros de otros porque reconocen a sus antepasados y a sus rasgos culturales -la lengua, usos y costumbres, religión, etc.- (Wade, 1994, citado en Bucheli & Cabela, 2006, pp. 8-9).
Lo que diferencia a las guías de otras cholas paceñas son las maneras de apropiación y sentido de pertenencia; construyen su identidad en una ciudad donde, por ejemplo, la influencia de la moda norteamericana y europea está presente y es accesible para todos.
Las cholas paceñas fashion han logrado acomodar sus costumbres y tradiciones, inculcadas por sus familiares, al mundo globalizado en el que viven, sin evitarlo, pero tampoco dejándose influenciar demasiado por aquella “cultura dominante”.
3.1 Diferencias y similitudes de la chola paceña fashion con otras cholas
3.1.1 Chola paceña fashion y la chola paceña tradicional
Una de las similitudes fundamentales es que ambas tienen ascendencia aymara, y se las considera cholas paceñas. En su mayoría, la chola paceña tradicional es madre de la cholita fashion.
Sin embargo, una de las diferencias que se puede mencionar es que la chola tradicional utiliza la pollera todos los días, y estar a la moda o usar las últimas tendencias no está entre sus objetivos. Por otro lado, la chola fashion solo usa la pollera para eventos especiales y lo hace de una forma más extravagante y sensual, esto incluye las joyas, el maquillaje, el peinado y algunos accesorios, pues se pudo notar que algunas guías lucían el cabello teñido de otro color, tatuajes en la espalda, piercings en la oreja, lentes de contacto, etc.
Ambas tienen sentido de pertenencia y devoción al momento de bailar en el Gran Poder, comparten ese sentimiento de orgullo por la pollera cuando se encuentran en las fiestas folclóricas u otros eventos.
Tanto la chola tradicional como la fashion son producto de una influencia occidental, pero en el caso de la tradicional, esta influencia se produjo hace siglos; en cambio, la chola fashion está relacionada a una influencia occidental contemporánea (que sería a partir de la globalización) y en un aspecto transgresor hacia su cultura aymara, es decir que “rompe” con algunas normas, por ejemplo, con el uso de mantas transparentes (Anzoleaga, 2022, p. 40).
Beatriz Villa Gómez Cajías, editora general de la revista La Fiesta explica las formas de vestir de la chola tradicional:
Son más conservadoras en cuanto a la moda, pero eso no quiere decir que no sean fashion, yo creo que son fashion porque también buscan estar con las últimas tendencias de la moda, la característica es que no transgreden tanto lo establecido. En cambio las nuevas generaciones tienden a ser más irreverentes y últimamente se ha visto el caso de los escotes, transparencias, del uso de corsés y todo, que ha causado cierto malestar en el mismo ámbito del Gran Poder a nivel de la Asociación. (B. Villa Gómez, comunicación personal, julio 2015).
3.1.2 Chola paceña fashion y chola antigua
La gran diferencia y más importante en este caso es que la chola paceña fashion o guía es una mujer de ascendencia aymara, mientras que la chola antigua es una mujer de la urbe paceña disfrazada de chola, no tiene raíces aymaras cercanas y tampoco los mismos usos y costumbres que la guía. La chola antigua baila, en su mayoría por diversión, pero no por tradición folclórica familiar o devoción.
La chola antigua en la Entrada del Gran Poder es una representación de las mujeres de pollera de antaño (cholas paceñas desde el siglo XIX y principios del siglo XX).
Cabe destacar que en el Gran Poder, la vestimenta de la chola antigua es más estilizada y más colorida de la que en realidad se utilizaba en siglos pasados. El estilo colorido en las prendas es algo que comparte con las cholas paceñas fashion.
3.1.3 Chola paceña fashion y china morena
Al igual que la chola antigua, la china morena no tiene ascendencia aymara alguna. Es una mujer de la urbe paceña, que simboliza a una chola pero con un atuendo totalmente estilizado, la mayoría no baila por tradición familiar o por devoción.
En ese punto es necesario recalcar que el Gran Poder comenzó siendo una fiesta patronal; por ello, los primeros grupos que fueron parte de esta fiesta eran del área rural, pero con el pasar de los años se unieron a la Entrada sectores urbanos de la sociedad paceña, como empresarios, comerciantes, empleados públicos y otros.
En el baile de la morenada existe la “figura” o china morena, que es la representación de una chola, pero de una forma más estilizada (Ramos, 2010, p. 374), y las mujeres que bailan de chinas morenas no tienen ascendencia aymara."... con la afirmación de Cajías, las mujeres que participan en la danza de la more- nada y son Figuras, o llamadas Chinas Morenas, pertenecen a un grupo social mestizo, fuera de la sociedad del Gran Poder” (Ramos, 2010, p. 373).
Sin duda, entre la chola paceña fashion y la china morena existen más diferencias que similitudes, la primera es hija o nieta de aymaras y en el baile muestra su esencia y raíces culturales. Sin embargo, se ha podido observar que en las pasarelas, las cholas fashion utilizan blusas escotadas y corsés al estilo de las chinas.
4. Pasarelas y nuevos diseños para indumentaria de chola paceña
Las pasarelas son el sitio por excelencia donde la chola paceña fashion puede lucir todo tipo de prendas que no están permitidas en el Gran Poder. Es en el modelaje donde puede desinhibirse y lucir incluso las nuevas tendencias en centros (prenda interior de una chola paceña).
Además, su forma de modelar no es como la de una mujer occidental, las cholitas fashion mueven más las caderas para que la pollera se luzca y se vean los centros; utilizan elementos extranjeros, como abanicos, para dinamizar el modelaje; incluso algunas mueven sus manos al estilo del baile árabe, haciendo ondas en el aire.
Respecto a los diseños, lo que está de moda son las mantas transparentes, corsés, blusas estilo bobito (largas y anchas de la parte de la cintura, llegando a tapar parte de la pollera) y blusas con manga kimono (como en la cultura oriental).
Una de las diseñadoras de ropa para chola paceña, Erika Centellas, comentó que ella elabora mantas con “estampados animados”, algo poco común que les gusta usar a las cholas fashion debido a sus dibujos alegres. Erika también refirió que su madre era “pollerera” (como se denomina a las diseñadoras de ropa para chola) y que antes utilizaban hilos para los flecos que caían de las mantas, ahora son de tela (E. Centellas, comunicación personal, agosto 2015).
Los zapatos tampoco son ajenos a la moda, pues entre las nuevas tendencias está el taco un poco más alto y con luces de colores para que, al bailar o modelar, se enciendan y muestren los diferentes colores que combinan con el atuendo de la chola fashion, incluso la diseñadora mencionó que junta algunos elementos de la moda occidental con la andina:
Yo veo qué es lo que más puedo vender, en damas veo qué modelos están saliendo y los pongo en Cholita [...] todo lo extrañito lo estoy poniendo para cholita porque he visto que las cholitas ahora son de vestido (es decir, que utilizan pantalón) y a la vez de cholita entonces buscan novedades, lo último (C. Quispe, comunicación personal, agosto-2015).
En ese sentido, el análisis de García Canclini es muy pertinente, él comenta que a partir de la globalización se busca “reconvertir” un patrimonio para reinsertarlo en el mercado: “(...) se encuentran estrategias de reconversión económica y simbólica en sectores populares: los migrantes campesinos que adaptan sus saberes para trabajar y consumir en la ciudad, o vinculan sus artesanías con usos modernos para insertar a compradores urbanos” (García Canclini, 2000, p.10).
Respecto a las modelos, muchas de ellas fueron invitadas por la Alcaldía de La Paz o por Promociones Rosario para lucir las prendas, y es que las cholas paceñas fashion, por ser guías y la cara de la fraternidad, también llaman la atención de autoridades o medios de comunicación.
Como ejemplo está el caso de una de las guías que a la vez es modelo y presentadora de televisión:
La Alcaldía me ha invitado, era un evento de la misma Alcaldía estaba realizando y había cholitas de diferentes programas de televisión. Esa fue la única vez que modelé, me gustó mucho pese a que no sabíamos mucho de modelaje. Un tiempito estaba de moda el Kipiur que son mantas caladas, entonces igual se dejaba ver la blusa. Las pollereras, que se hacen llamar ahora diseñadoras, marcan esas tendencias (J. Quisbert, contacto personal, julio 2015).
Por otro lado está el comentario de Ana Yugar, una de las guías de la fraternidad Señor de Mayo Transporte Pesado, que baila y modela hace varios años:
La primera vez que subí al escenario sentí nervios, no hay que hacerlo tan sexy como hacen otras modelos porque es diferente modelar de chola, hay que mover la pollera, sexy pero no vulgar para mostrar la manta, centros, hasta calzados. Hay formas de mostrar, no es así no más; las mantas abrirlas, cerrarlas, no es como las señoritas de vestido que en su pasarela es todo recto (A. Yugar, contacto personal, julio 2015).
También hubo comentarios sobre una modificación en los trajes que podrían tergiversar la esencia de la chola paceña, atuendos que por ser muy sensuales ya no mostraban la cultura aymara, sino más bien la occidental, y esto se pudo ver en la Entrada del Gran Poder. Es por ello que comenzaron las prohibiciones en el evento folclórico.
Hubo algunos diseñadores que modificaron completamente los vestuarios. El 2013, para una recepción de la Entrada del Gran Poder, quisieron vestir a las guías al estilo de la chola antigua con botas, polleras y corsé, no había manta, solamente un tapado en la parte de atrás como un torerito y entraron así, era para su recepción. Las bailarinas parecían como en algunas películas, como Can Can , solamente el corsé y unas polleras, o solamente estaban con las mantas en las manos y un corsé, ahí fue la primera observación (E. Choque, contacto personal, julio 2015).
Había transparencias, no solamente en las mantas, sino en las polleras, usaban centros y encima una pollera transparente, también los centros. Lo habitual es que utilicen los centros bordados, pero han estado utilizando los centros trasparentes que no parecen más que una tela de cortina y con un encaje o una cinta (E. Choque, contacto personal, julio 2015).
Las mantas transparentes, corsés, o telas en la espalda al estilo “torero” se utilizan en algunas pasarelas; sin embargo, no se percibió los controversiales centros o polleras transparentes. Lo que sí se pudo ver en las pasarelas fue modelaje de centros.
Claramente hay elementos que distinguen a la chola paceña y, si se llega a prescindir de ellos, entonces se puede modificar y tergiversar la esencia misma de la chola paceña.
A pesar de que los diseños actuales han causado preocupación, también generaron admiración, sobre todo a nivel internacional. Se ha visto últimamente trajes inspirados en la vestimenta de la chola en las grandes pasarelas de alta costura, como ser la semana de la moda en Nueva York, o como ya se mencionó, diseños de Valentino inspirados en la pollera.
Si bien la imagen de la chola paceña se ha ido transformando a lo largo de los años, es importante destacar aquellos elementos que distinguen a una chola paceña, como ser pollera, manta, sombrero y trenzas.
5. Luces cámara y acción, la chola paceña fashion en los medios de comunicación
Entre los medios de comunicación en los que se destaca la imagen de la chola paceña fashion están: calendarios donde, al igual que las pasarelas, muestran las últimas tendencias ya sea en joyas o indumentaria; televisión, espacio donde se desenvuelven las cholitas que son periodistas y al mismo tiempo modelos; revistas de moda para chola y por último se encuentran las Redes Sociales (RR.SS.).
Lo interesante de las RR.SS. (como Facebook) es que en ellas, las cholas paceñas fashion publican sus dos facetas. Se las ve como guías, modelos y/o periodistas con sus espectaculares atuendos de chola paceña, pero también muestran su vida cotidiana como universitarias o profesionales que utilizan pantalón y polera.
Así como en las pasarelas, en los medios de comunicación las cholas fashion utilizan los atuendos que están prohibidos en el Gran Poder. Esto podría ocasionar de parte de los sectores conservadores respecto a lo que transmiten los medios:
Desde dentro de las comunidades, esos procesos de comunicación son percibidos, a la vez, como otra forma de amenaza a la supervivencia de sus mundos - la larga y densa experiencia de las trampas a través de las cuales han sido dominadas carga de recelo cualquier exposición al otro- pero al mismo tiempo, la comunicación es vivida como una posibilidad de romper la exclusión, como experiencia de interacción que, si comporta riesgos, también abre nuevas figuras de futuro (Martín-Barbero, 2001, p. 7).
Los sectores tradicionalistas, como la Asociación de Conjuntos Folclóricos del Gran Poder, verán estos procesos de comunicación como una amenaza a la identidad de la chola paceña. Sin embargo, otros sectores, como las y los diseñadores de moda chola, verán estos procesos como una nueva reconfiguración de la chola que no dejará sus raíces, pero que trasformará algunas de sus costumbres, como ya lo hizo, sin que esto afecte su esencia, ni su cultura (Anzoleaga, 2022, p. 34).
Por último, después de lo observado en los medios de comunicación, sobre todo en la televisión, calendarios y revistas, la indumentaria que utilizan las cholas paceñas fashion es similar a la de las pasarelas, es decir, moda extravagante y bastante maquillaje. En estos espacios no tienen prohibición de usar ciertos elementos que podrían ser transgresores para la imagen de la chola paceña.
6. Conclusiones
Retomando la pregunta de investigación inicial: ¿Cómo se construye la identidad sociocultural de la chola paceña fashion?, este proceso se desarrolla a partir de una transformación identitaria que parte del contexto cultural en el que se desenvuelve actualmente.
Por un lado, se encuentran las tradiciones familiares y culturales con las que ha crecido. El folclore, la fiesta y devoción por el señor del Gran Poder, entre otras, están fuertemente arraigadas en la chola paceña fashion, y esto se percibe en el momento en que utilizan la indumentaria de una mujer de pollera en eventos especiales, como las bodas, bautizos, fiestas, etc. Por otro lado, está la vida cotidiana de ellas, que gracias a que pudieron acceder a una educación formal (en muchos casos sus madres no lograron esto), se les abrieron las puertas al mundo universitario y laboral. Esto al mismo tiempo les abrió paso para conocer nuevos lugares de la urbe paceña, donde no se acostumbra a ver a mujeres utilizando pollera, por lo que tuvo que optar por utilizar jeans.
Al mismo tiempo, ingresó al mundo globalizado de la cultura pop, se interesó por las nuevas tendencias del exterior, y esto generó que rescatara y fusionara características de ambos mundos: occidental y andino.
Esta fusión se pudo notar, en primera instancia, en la Entrada del Gran Poder, donde las cholas paceñas fashion, en papel de guías de las fraternidades de morenada, mezclaron la indumentaria y otros elementos que utiliza la chola con los que usa una mujer occidental de la urbe paceña. Este aspecto alejó la imagen conservadora que muestra la chola para exportar una imagen más sensual. Por ello se produjeron las prohibiciones en el Gran Poder, pues se trata de un espacio que fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, entonces hay ciertas reglas que se deben seguir en la Entrada del Gran Poder.
Sin embargo, este hecho no impidió que en otros espacios se luzcan dichas prendas más sensuales y extravagantes, ya que otros grupos promovieron la moda fusionada; estos son: diseñadoras de ropa para chola (o pollereras), academias de modelaje, organizadores de pasarelas de moda andina, periodistas y medios de comunicación (principalmente las revistas). Ese proceso llevó la moda de ropa para chola a un nivel internacional.
En ese sentido, la chola paceña fashion construye su identidad sociocultural en una sociedad con una importante influencia cultural aymara y una fuerte influencia globalizada. Esto se nota en sus particulares gustos por la cultura pop extranjera, pero también por su gran sentido de pertenencia hacia sus raíces aymaras.
Por ello, esta nueva chola paceña, denominada fashion, forma parte de ambos mundos, tanto del occidental como del andino. Demuestra que no es necesario vestir la pollera todos los días para sentirse una chola verdadera, además, sus raíces y sus valores culturales siempre serán aymaras.
El dinamismo de la cultura aymara y de la globalización generarán cambios estéticos, pero mientras la pollera, la manta y el sombrero, entre otros elementos, no sean completamente transformados o dejen se utilizarse; no cambiarán el sentido y el ser de una chola paceña (Anzoleaga, 2022, p. 45).